Política Social y Trabajo Social: Evolución, Roles del Estado y Desafíos Actuales

¿Qué se entiende por Política Social?

Dentro de los objetivos fundamentales del Estado está el cautelar la adecuada calidad de vida de las personas en su territorio. Desde los años 20, el concepto de política social se ha utilizado como una forma de agrupar las acciones ejercidas para el logro de este objetivo.

La política social es definida como una forma de intervención a nivel macro que parte del Estado, en función de lograr algún tipo de justicia dentro de la sociedad, concordante con el modelo de desarrollo definido por el mismo Estado.

Desde el Marxismo, aparece como un concepto sujeto a crítica, considerando que la política social tendría un objetivo de «legitimación del funcionamiento de la sociedad, especialmente en lo que se refiere a la explotación, dominación y predominio de una clase social sobre el resto de la sociedad». Es decir, la aplicación de la política social no soluciona el problema estructural, sino que mantiene el statu quo de las demandas de las personas que sufren la explotación, a la espera de la satisfacción de sus necesidades por medio de la aplicación de la política, la cual siempre ofrece una solución paliativa, pero no genera cambios estructurales en la sociedad.

En los países industrializados, la adopción de las políticas sociales fue anterior en el tiempo respecto a América Latina. Sin embargo, en estas regiones fueron incorporadas rápidamente debido a los altos niveles de pobreza existentes. En las regiones subdesarrolladas, las políticas sociales de salud, vivienda, educación y seguridad social constituyen herramientas fundamentales para el mantenimiento de la paz social y representan un intento, dentro del sistema, de mejorar la equidad y la justicia social.

¿Cómo puede definirse el Estado frente a las Políticas Sociales?

Estado Protector

El Estado protector define sus relaciones desde una perspectiva de contención de los movimientos sociales emergentes. La política social aparece como un elemento fundamental para contener las demandas del proletariado que comienza a asentarse territorialmente en las periferias de las grandes urbes y a plantear necesidades cuya cobertura apela a la noción de justicia social y, al amparo de legislaciones internacionales, a exigir la implementación de respuestas estatales. Estas respuestas, ya sea desde la salubridad, la instrucción, la seguridad social o la incorporación laboral, implican una fuerte presión sobre el mantenimiento del orden político imperante, bajo el pretexto de «una integración nacional capaz de permitir la conducción democrática».

Estado Benefactor

El Estado benefactor orienta las políticas sociales en función de una mayor equidad y justicia social, con una visión redistributiva generalizada a toda la población y con un alto porcentaje comparativo del PIB asignado al gasto social.

La postura frente al abordaje de los problemas que impiden el desarrollo está orientada a permitir una cobertura universal por medio de la asignación de una gran cantidad de recursos a la implementación de la política, lo que se traduce, al traducirlo en términos de mercado, en un subsidio de la oferta.

Estado Subsidiario

La asignación de recursos en el marco de la política social está dada por la disminución del gasto fiscal por medio de la privatización de los servicios sociales de los estratos socioeconómicos medios y altos, y de una focalización de los escasos recursos en la población más pobre, la cual debe esforzarse por realizar un aporte en la satisfacción de sus necesidades. Es decir, el financiamiento es, en la mayoría de las veces, compartido, asignándole al sector privado el rol de proveedor de bienes y servicios transables en el mercado, lo que se traduce en un subsidio a la demanda.

Estado Subsidiario Focalizado

Mantiene los criterios del Estado subsidiario, incorporando nuevos conceptos que permiten un mayor control de la gestión de la implementación de la política por parte de los privados.

La idea es captar la oferta privada, supervisando el mantenimiento del concepto de calidad de vida y el mejoramiento de la condición de vulnerabilidad, y concibiendo el gasto social como una inversión social; es decir, promoviendo la instalación de capacidades en los propios individuos que faciliten su integración a la estructura social productiva.

En teoría, la asignación de recursos para la implementación de la política social se concibe de modo complementario a la política económica, pero no supeditada a ella. Es decir, se guardan las reservas necesarias de modo tal de no desproteger los grupos focalizados en períodos de crisis. Sin embargo, el sustento ideológico que subyace a este tipo de políticas hace inoperante la propuesta, ya que el Estado se ve disminuido en sus recursos debido a que entrega a la gestión privada la mayoría de las empresas; por lo tanto, no cuenta con ganancias para generar las reservas.

La Polémica acerca del Rol del Trabajo Social

Desde siempre, nuestra profesión ha perseguido una definición respecto al rol que le cabe cumplir en la sociedad, frente a lo cual comprendemos la existencia de dos categorías que hemos querido definir como formas y/o posturas que puede asumir el Trabajo Social, en la medida en que pueden ser reconocidas en el ejercicio de la acción social en un mismo período histórico, diferenciándose por los valores subyacentes al ejercicio de cada una de ellas. Estas posturas son determinadas por la relación que se establece con el modelo de desarrollo, la concepción de individuo y sociedad, y las expectativas de las que son depositarios los y las trabajadores sociales.

Posturas que puede asumir el Trabajador Social

Analítico-Crítico

Se comprende esta postura como la asumida por el profesional que cuestiona el modelo, haciendo la crítica constructiva a la política social que se aplica, en función de su perfeccionamiento y/o modificación.

Esto provoca una retroalimentación constante que puede manifestarse tanto en aportes que contribuyan al perfeccionamiento de la política como en tensiones y crisis para asumir los cambios necesarios, lo que puede llevar a la confrontación con los diseñadores y financistas de esta.

Funcional-Pragmático

Opera en la implementación de la política social buscando su eficiencia dentro de las expectativas de orden preestablecidas.

¿Qué ha pasado a través de la historia?

Matriz Histórica del Trabajo Social y la Política Social

Períodos históricosRol del EstadoCaracterísticas de la Política SocialPrioridad de las políticas públicasRol del Trabajo SocialEjercicio de la Profesión
FuncionalAnalítico
1920 – 1964Protector

Creciente auge del Estado en la provisión de servicios sociales con características universales.

La política está orientada a mejorar las condiciones sociales de los habitantes del país bajo el sustento ideológico de la contención de las demandas de los movimientos sociales emergentes.

Centralismo territorial y administrativo.

Gasto social emergente.

Relaciones laborales, condiciones de trabajo y remuneración.

Orientada a la satisfacción de necesidades.

Educación.

Salud (nutrición y mortalidad infantil).

Vivienda.

Seguridad social.

Asistencial y de beneficencia con un fuerte énfasis en lo educativo a nivel individual, de modo que permitiese la solución de la problemática específica presentada por el usuario, a través del adecuado aprovechamiento de los beneficios de la política social.

Educador social informal, lo que se manifiesta en la adaptación de los habitantes rurales a la ciudad y el reforzamiento de los hábitos de higiene y cuidados de la salud en la población.

Énfasis en la intervención de caso social.

Contenedor de la demanda individual y organizada de la población.

La población es contenida en función de evitar el desborde de las demandas en relación con los recursos destinados por el Estado para la satisfacción de estas.

Actúa en relación con la demanda institucional y la política existente.

Fomento de la organización social y de la incorporación de las personas a dichas organizaciones.

La población es promovida y organizada en función de demandar una respuesta efectiva a sus necesidades.

Propuestas innovadoras en la formulación de políticas y sistemas de atención a las personas.

1964 – 1973Benefactor

La política social emerge de la creciente movilización de la población y se construye con esta. Al igual que en el período anterior, se orienta al mejoramiento de la calidad de vida de la población; sin embargo, el sustento ideológico se orientaba a la participación de la sociedad activa en la implementación de las soluciones a sus demandas.

Se privilegia la organización como forma de optimizar la implementación de la política.

El Estado norma, financia y ejecuta la política social.

Centralismo territorial y administrativo.

Gasto social creciente.

Desarrollo del modelo de sustitución de importaciones.

Inversión en servicios sociales.

Ampliación de la cobertura e inversión en:

  • Salud
  • Vivienda
  • Educación
  • Previsión

Política social disociada de la económica.

Fuerte énfasis en el nivel de intervención de grupo y comunidad.

Promoción social.

1973 – 1989Subsidiario

Financiamiento de políticas supeditado a un aporte por parte de los beneficiarios.

Privatización de la implementación de las políticas sociales.

Política social supeditada a la económica.

Beneficios entregados a través de subsidios individuales.

Descentralización administrativa, pero no económica ni política.

Gasto social minimizado en función de criterios económicos.

Se privilegia el acceso individual a los beneficios de la política.

La profesión sufre un duro golpe debido al cierre de escuelas y a una fuerte limitación en su ejercicio.

Esto implicó un retroceso en el rol asignado a la profesión, ya que se volvió al desarrollo asistencialista.

Se vuelve a poner énfasis en la atención individual, contribuyendo a la atomización de la sociedad y reduciendo los impactos de la intervención.

Trabajadores sociales funcionales al sistema que administran la política social.

Promoción de la organización y compromiso con la defensa de los derechos humanos.

Coordinación con la cooperación internacional.

Reconstrucción de la red social.

1990 – a la fecha«Integrador»

Se ha aumentado ligeramente el gasto social, con una recuperación de las políticas sociales, continuando con los lineamientos económicos y políticos del período anterior. Se mantiene la subsidiariedad del Estado.

Se orientó el gasto social hacia la salud, educación y vivienda.

Reconocimiento gradual del rol de promotor social del trabajador social.

Que incluye las tres estrategias de intervención social, con las ideologías que las sustentan.

Ejecutor de las normativas institucionales vigentes.

Experiencias críticas y propositivas, pero sin una proyección más generalizada, tanto como estrategia de política social como estrategia gremial.

Dilemas, Desafíos y Propuestas en Trabajo Social

A partir del análisis de esta matriz, hemos decidido ordenar las ideas en torno a dilemas, desafíos y propuestas. Los dilemas son entendidos como cuestionamientos que ubican al Trabajo Social en la encrucijada de tomar posición frente al rol del Estado en la definición de las políticas sociales; los desafíos se relacionan con aquellos aspectos pendientes de incorporar en el ejercicio de la profesión; y, por último, las propuestas involucran diseñar escenarios posibles para la instalación y el desarrollo de los puntos anteriores.

Dilemas

Para el Trabajo Social, resulta imprescindible, al menos en términos éticos y políticos, resolver:

  • La coexistencia de dos posturas (analítico-crítico y funcional-pragmático) frente al rol del Estado.
  • El compromiso político versus el apoliticismo.
  • Propiciar la apertura del Estado versus su repliegue en manos de los privados.
  • Rol de formuladores versus implementadores de la política social.
  • Delegar la formulación teórica a otras disciplinas producto de la práctica avasalladora versus una actitud sistematizadora y propositiva de pensamiento teórico.

Desafíos

  • La participación reglamentada en la retroalimentación de la política; es decir, la creación de instancias que coordinen a trabajadores sociales con competencia y experiencia en áreas determinadas, delegando en ellos la revisión de la formulación de la política social y el monitoreo de su ejecución.
  • Estructuración e implementación de coordinaciones sociales que recuperen la noción de ciudadanía e incorporen explícitamente a la sociedad civil en la formulación e implementación de la política social.
  • Visualizar las acciones políticas necesarias para denunciar y superar los problemas instalados como productos no esperados de las transformaciones neoliberales.

Propuestas

  • Un Trabajo Social comprometido con los sujetos de intervención, por encima de intereses institucionales que atenten contra ellos.
  • Un Trabajo Social comprometido, si bien con el presente, también con la memoria histórica y el futuro de los sujetos de intervención.
  • El desarrollo de una estructura gremial con la fuerza para influir en la opinión pública y en el imaginario colectivo de la población.
  • Fomento de la participación social en función de la formulación de políticas, con el fin de promover la noción de ciudadanía.
  • La promoción de la necesidad de adecuar los conocimientos a las experiencias de cada grupo a través de la sistematización, como un ejercicio colectivo de evaluación y rearticulación de las políticas sociales.
  • Advertir y abordar proactivamente las deficiencias y los problemas sociales generados por las reformas neoliberales.