Psicología de la Influencia Social: Estereotipos, Prejuicios y Cognición

Influencia Social, Estereotipos y Prejuicios

8.1. Influencia Social

La influencia social está presente en todos los ámbitos de la vida del ser humano; las personas, los grupos, las instituciones y la sociedad en general influyen sobre las percepciones, actitudes, juicios, opiniones o comportamientos de todas las personas.

Así, podemos definir la influencia social como el proceso en el que unas personas inducen o provocan cambios en las creencias, opiniones, actitudes o comportamientos de otras personas.

La influencia social puede ocurrir aun cuando no exista una interacción concreta o una presencia física de otra persona.

Modalidades Básicas de la Influencia Social (Moscovici)

  1. Conformismo: una persona cambia su comportamiento o actitud a partir de una presión imaginada o real proveniente de otras personas o grupos. El conformismo gira alrededor del control o de la resolución de los conflictos.
  2. Normalización: influencia recíproca que lleva a los miembros de un grupo a nivelar sus respectivas posiciones y a formular determinados compromisos. La normalización gravita alrededor de la evitación del conflicto.
  3. Innovación: un individuo o una minoría crean o modifican ideas o modos de pensar y comportarse. La innovación gravita alrededor de la creación de conflictos.

La conformidad resulta de la influencia de la mayoría, mientras que la innovación procede de la influencia de la minoría.

8.2. Estereotipos y Prejuicios

La investigación de los prejuicios está estrechamente ligada a la de los estereotipos, expresión acuñada en 1922 por W. Lippmann en su obra “Public Opinion”, en la que, tras hacer un análisis de las ideas a través de las cuales nos representamos la realidad, expone las imágenes con que usualmente la sociedad se representa algunos grupos étnicos, nacionales o religiosos. Aunque las diferencias son sutiles, podemos distinguir entre ambos conceptos:

  • Estereotipo: perpetuación de una imagen simplista de la categoría de una persona, una institución o una cultura. Cuando juzgamos a alguien basándonos en nuestra percepción del grupo al que pertenece, estamos creando un estereotipo. Un estereotipo puede llegar a configurar un prejuicio.
  • Prejuicio: juicio u opinión preconcebida y arbitraria que tiene por objeto a una persona o a un grupo y puede ser de naturaleza favorable o adversa. Un prejuicio es una distorsión del conocimiento basada en el empleo de nociones, juicios de valor o estereotipos previos en nuestro conocimiento de la realidad. Los prejuicios son, en definitiva, actitudes negativas hacia un exogrupo (grupos a los que uno no pertenece). De este modo, un estereotipo puede llegar a configurar un prejuicio. En la mayoría de los casos, tanto los estereotipos como los prejuicios conllevan una actitud desfavorable.
Elementos en la Actitud del Prejuicio:
  • Cognitivos: “pensar mal”; se hacen atribuciones, se tienen expectativas negativas respecto del otro.
  • Afectivos: “desprecio o desagrado” junto a elementos emocionales como “miedo y aversión”.
  • Conductuales: “variadas formas de conducta hostil” o discriminativa.

Características del Prejuicio Estereotipado (Lippmann)

  1. Homogeneidad.
  2. Error antes que exactitud.
  3. Adquisición de segunda mano en vez de por experiencia directa.
  4. Resistencia a los cambios.

Los estereotipos más frecuentes están asociados con la raza, el sexo, la discapacidad o el lugar de procedencia. En definitiva, la opinión que cada persona se hace es parte de la personalidad y de la percepción, y esas opiniones son una escala de referencia sobre la que uno toma bases muy firmes, que luego van a resultar muy difíciles de modificar.

8.4. La Categorización

Categorizar significa agrupar, clasificar objetos o personas en función de que posean una característica común. Se trata de una actividad natural, necesaria dada nuestra limitada capacidad cognitiva, que permite a los sujetos mantener la división, cómoda y tranquilizadora, entre “los míos” y “los otros”, entre “nosotros” y “ellos”.

El resultado de esta categorización es un estereotipo o categoría, una selección de características que definen a un grupo de individuos diferenciándolos de los otros grupos.

Si todos categorizamos, la pregunta es: ¿cómo es que algunos individuos son prejuiciosos y otros no? La diferencia estaría en la diferencia que establece Allport entre “juicio previo o provisional” y “prejuicio”; mientras que el primero cambia fácilmente ante cualquier información contraria, el segundo es muy resistente a la modificación, incluso cuando la información objetiva le contradice.

Aunque en ocasiones sí es así, Tajfel afirma que no toda categorización va a dar como resultado un prejuicio.

8.5. La Correlación Ilusoria

La correlación ilusoria se produce cuando el sujeto sobreestima la frecuencia con que se dan conjuntamente dos acontecimientos. Tal sobreestimación de la concurrencia se debe a que los sucesos infrecuentes, poco usuales, durante el proceso de codificación atraen la atención en mayor medida que los que nos son familiares y se almacenan mejor en la memoria, pudiendo ser recuperados con mayor rapidez y gran detalle. La viveza del recuerdo induce al sujeto a pensar que se debe a que los ha percibido con mayor frecuencia de lo que ha sucedido en realidad.