Marco Ético Integral en Salud: Bioética, Deberes de Enfermería y Derechos del Paciente
Principios Bioéticos Fundamentales en la Práctica Sanitaria
Para resolver los conflictos que surgen al tomar decisiones en el ámbito biomédico, emerge la bioética principalista, fundamentada en los Cuatro Principios. Su objetivo es establecer un método sistemático de reflexión que permita alcanzar una solución ética correcta ante cualquier dilema.
Principio de Beneficencia
Este principio manda hacer el bien. Es el más evidente, ya que el personal sanitario ha sido educado y formado para procurar el bienestar, no solo del individuo enfermo, sino de la sociedad en su conjunto. Se basa en que los procedimientos diagnósticos y terapéuticos aplicados deben beneficiar al paciente, es decir, ser seguros y efectivos.
Principio de No-Maleficencia
Se basa en el principio hipocrático de Primum non nocere, es decir, «ante todo, no hacer daño». También es un principio muy evidente, pues ningún profesional sanitario debe utilizar sus conocimientos o su posición para ocasionar perjuicios al enfermo. En la práctica, implica que el balance entre los beneficios y los riesgos de cualquier actuación médica debe inclinarse siempre a favor de los beneficios.
Principio de Autonomía
Se refiere a la capacidad que tiene el enfermo para decidir, siempre que exprese su deseo de forma informada. A diferencia de los anteriores, este principio ha estado históricamente ausente de la tradición médica, a pesar de la gran importancia que ha adquirido en los últimos años. Durante muchos siglos, el paciente nunca participó en la toma de decisiones, siendo el médico quien decidía; el deber del médico era «hacer el bien» al paciente, y el de este, aceptarlo.
Principio de Justicia
Este principio se fundamenta en dos hechos clave:
- Todas las personas, por el mero hecho de serlo, poseen la misma dignidad, independientemente de cualquier circunstancia, y por tanto, son merecedoras de igual consideración y respeto.
- Se debe procurar una distribución justa y equitativa de los siempre limitados recursos sanitarios para lograr el máximo beneficio en la comunidad, evitando desigualdades en la asistencia.
Ética y Deber Profesional en Enfermería
La ética de enfermería estudia las razones de los comportamientos en la práctica de la profesión, los principios que regulan dichas conductas, las motivaciones, los valores del ejercicio profesional, así como sus cambios y transformaciones a través del tiempo.
Deber Profesional de Enfermería
El profesional de enfermería tiene el deber de organizar, dirigir, controlar y evaluar la prestación de los servicios de salud y de enfermería del personal que intervenga en su ejecución.
Deberes Específicos del Profesional de Enfermería
- Orientar su actuación conforme a lo establecido en la legislación vigente y de acuerdo con los principios del Código de Ética de Enfermería adoptado en el país (o, en su defecto, por los principios del Código de Ética del Consejo Internacional de Enfermería, CIE).
- Velar por que las instituciones de salud cuenten con la planta de personal de enfermería adecuada, conforme a la ley y sus reglamentaciones, y con los recursos necesarios para una atención de calidad.
- Velar por que se brinde atención profesional de enfermería de calidad al usuario, sin discriminación de raza, sexo, credo, condición social o política.
- Respetar en toda circunstancia la vida y la dignidad de la persona humana.
Principios Fundamentales de la Práctica de Enfermería
La necesidad de los cuidados de enfermería es universal. El respeto por la vida, la dignidad y los derechos del ser humano son condiciones esenciales de esta profesión, sin distinción alguna de nacionalidad, raza, religión, color, edad, sexo, opinión política o posición social.
La primera responsabilidad del profesional de enfermería es la consideración hacia las personas que necesitan su atención, proporcionándoles el cuidado requerido y creando un entorno donde se respeten sus valores, costumbres y creencias.
Los cuatro principios fundamentales de la enfermería son:
- Promover la salud.
- Prevenir las enfermedades.
- Restaurar la salud.
- Aliviar el sufrimiento.
La Historia Clínica: Documento Esencial en Salud
La historia clínica es un documento fundamental para el diagnóstico de enfermedades. Constituye una recopilación de datos valiosos por parte del personal médico y de enfermería que, dispuestos de forma ordenada, permiten establecer hipótesis diagnósticas y, en ausencia del paciente o con ingresos previos, sirven como fuente para el análisis de otros facultativos.
Generalidades y Requisitos
La historia clínica debe diligenciarse de forma clara, legible, sin tachones, enmendaduras, intercalaciones, sin dejar espacios en blanco y sin utilizar siglas. Cada anotación debe incluir la fecha y hora de realización, junto con el nombre completo y la firma del autor.
El Consentimiento Informado en la Atención Sanitaria
El consentimiento informado es un proceso mediante el cual una persona acepta participar en una investigación o procedimiento médico, conociendo plenamente los riesgos, beneficios, consecuencias o problemas que puedan presentarse durante su desarrollo.
Elementos Clave del Consentimiento Informado
Un consentimiento informado debe contener, al menos, los siguientes apartados:
- Nombre del proyecto de investigación o procedimiento en el que participará.
- Objetivos del estudio o intervención, es decir, qué se pretende obtener.
- Procedimientos y maniobras que se le realizarán a la persona en ese estudio o intervención.
Componentes Fundamentales
El consentimiento informado consta de dos partes esenciales:
- Derecho a la información: La información brindada al paciente debe ser clara, veraz, suficiente, oportuna y objetiva acerca de todo lo relativo al proceso de atención, principalmente el diagnóstico, tratamiento y pronóstico del padecimiento.
Deberes y Responsabilidades del Paciente
El paciente tiene los siguientes deberes y responsabilidades:
- Entregar información veraz y completa acerca de su identidad, dirección y estado de salud, incluyendo síntomas y posibles causas de su enfermedad.
- Cuidar las instalaciones y el equipamiento del recinto de salud.
- Tratar con el debido respeto al personal de salud y a los auxiliares que participan en el proceso de atención.
- Respetar el reglamento interno y la normatividad hospitalaria del establecimiento.
- Informarse acerca de los horarios de funcionamiento, las modalidades de atención y las formas de pago.
- Informarse acerca de los procedimientos de reclamos y consultas establecidas.
- Participar, en la medida de lo posible, en las actividades para recuperar su salud.
- Informar al personal de salud, a su médico tratante, al jefe del servicio o al comité de Ética sobre cualquier falta a los principios éticos vigentes en el proceso de su atención.
Modelos Bioéticos y sus Fundamentaciones
Modelo Personalista
El modelo bioético personalista, fundamentado en la virtud, los principios del personalismo ontológico y las virtudes aristotélicas, es adecuado para la experimentación con animales, ya que se trata de una actividad realizada por seres humanos para cuidar, prevenir, curar e investigar en los animales.
Principios del Personalismo Bioético
- Principio de defensa de la vida física: Destaca que la vida física, corpórea, es el valor fundamental de la persona, ya que esta no puede existir sin un cuerpo. Asimismo, la libertad no puede manifestarse sin la vida física; para ser libre, es necesario ser viviente.
Modelo Pragmático Utilitarista
El modelo pragmático-utilitarista (con fundamentación intersubjetiva) se basa en la utilidad social entendida como valor.
Su principio básico es el cálculo de las consecuencias de la acción, basado en la relación costo/beneficio. Sin embargo, este principio no puede aplicarse de manera última y fundamental al «sopesar» bienes no homogéneos, como cuando se confrontan los costos monetarios con el valor de una vida humana.
Modelo Liberal Radical
El modelo liberal-radical (con fundamentación subjetiva y un fuerte sentido de la libertad) parte de la presunción de que no se puede formular una verdad ni una ley moral a partir de la realidad. Los hechos son datos empíricamente demostrables, mientras que los valores y las normas son considerados solo presupuestos indemostrables.
En este modelo bioético, el principio de autonomía adquiere un sentido fuerte. La única fundamentación del accionar moral es la elección autónoma, y el horizonte ético social se representa por el esfuerzo hacia la liberalización de la sociedad. El único límite para la acción del individuo es la libertad del otro, la libertad del prójimo.
Modelo Personalista (Fundamentación Objetiva – Metafísica)
Este modelo puede considerarse válido para resolver las antinomías de los modelos anteriores. Se propone para el diálogo con diversas teorías éticas (deontológicas, de la virtud, teleológicas, de la responsabilidad, el principialismo ético, la bioética teológica) que son conciliables entre sí, y para proporcionar una fundamentación objetiva a los valores y las normas.
Modelo Sociológico-Biológico (Fundamentación Biológico-Naturalista)
Representa la primera tentativa de fundamentar la norma ética en los hechos, oponiéndose a la «ley de Hume«. Se remonta al evolucionismo darwiniano y al valor del progreso de la ciencia. Aquí, el progreso y la evolución socio-biológica se establecen como criterios discriminantes objetivamente fundamentados.
Los criterios morales subjetivo-individualistas e intersubjetivos pierden relevancia. Esta propuesta relativiza los valores y las normas, y está representada por una corriente de pensamiento de corte sociológico-histórico, ofreciendo una perspectiva puramente descriptiva de la ética.
Principios Éticos Adicionales en el Ámbito Sanitario
- Solidaridad
- Fidelidad
- Continuidad
- Veracidad
- Calidad
- Dialogicidad