Cuentas de activo circulante fijo y diferido

Los presupuestos son estimaciones que se hacen sobre situaciones futuras. El presupuesto técnicamente es un plan, un plan expresado en dinero.
Los presupuestos son usados extensamente en finanzas y se trata de estimar los valores más probables que se produzcan en una situación de negocios. Se puede presupuestar casi todo. Los presupuestos más usados en finanzas son los de los estados financieros en general.

Uno de los presupuestos más usados es el presupuesto de flujo de caja.

Los presupuestos se pueden clasificar generalmente en 2 tipos, los presupuestos simulativos  y los presupuestos de control de gestión.

En los presupuestos de simulación, se proyectan cifras que constituyen metas, no necesariamente situaciones que sean más probables, si no que metas de gestión. De este tipo son generalmente los presupuestos de ventas, que constituyen metas para el departamento de ventas de las compañías. El cumplimiento de las cifras presupuestadas y, mejor aún, su superación, trae incentivos monetarios para los vendedores, su no cumplimiento puede acarrear la desvinculación del personal con la organización.

En cambio, en el presupuesto de tipo simulativo, lo que se persigue es presupuestar la cifra de más probable ocurrencia, esta cifra se conoce también como valor esperado. Este presupuesto es muy usado en finanzas, tanto en los de corto plazo como en los de largo plazo.

Además los presupuestos se pueden clasificar en tres tipos de acuerdo a su horizonte de planificación. Esta clasificación es la siguiente: 

1.            Presupuestos de corto plazo

2.            Presupuestos de mediano plazo

3.            Presupuestos de largo plazo

1.- Presupuestos de corto plazo, también denominados operativos. Tienen un horizonte de planificación de hasta un año. El presupuesto de caja de corto plazo es usado en finanzas fundamentalmente para 2 cosas

  1. Para planificar mejor sus pagos (egresos) en base a sus ingresos planificados y en base a estos determinar su política de financiamiento  e inversión de corto plazo, 
  2. Para la determinación del capital de trabajo necesario para la firma.

Se denomina horizonte de planificación al periodo de tiempo en que los recursos de la empresa son simulados, en términos coloquiales, es la duración del presupuesto.

 El presupuesto de caja de corto plazo es muy volátil, ya que tiene una alta tasa de cambio, por lo general, las empresas tienen un presupuesto de caja de no más de 90 días, el que es preparado por el departamento de tesorería, quien recopila la información necesaria para su formulación.

Este presupuesto, en la gran mayoría de los casos es reformulado todo los días, borrando el día que pasa y agregando inmediatamente por uno nuevo al final, por lo cual, el presupuesto siempre tiene la misma cantidad de días (30, 60 o 90 días, según sea el caso).

El presupuesto de caja, en este caso se denomina “presupuesto rotativo de caja”.

Vale la pena destacar que un presupuesto, sobre todo el de esta naturaleza, tiene utilidad en el caso que la empresa pueda presupuestar con cierto rango de certeza sus ingresos y sus gastos.

Las empresas hacen grandes esfuerzos para poder presupuestar sus flujos con el mayor nivel de certeza posible.

 2.- Presupuestos de mediano plazo. Son aquellos que tiene un horizonte de planificación es mayor a un año y menor a tres años. Se denominan presupuestos tácticos.

3.- Presupuestos de largo plazo o estratégicos. Estos presupuestos tienen un horizonte de planificación superior a 3 años. Este presupuesto es el que se usa para evaluar nuevas alternativas de inversión (negocios).

La formulación de este presupuesto es distinta al presupuesto de caja de corto plazo. El presupuesto de corto plazo es esencialmente volátil, lo que hace muy difícil su formulación por periodos mayores a un año. Los nuevos proyectos de inversión a ser evaluados, en su gran mayoría, son por un plazo bastante mayor a este periodo.

Determinación del capital de trabajo


El capital de trabajo se define en términos conceptuales como la cantidad de dinero que necesita una compañía para operar normalmente, evitando la insolvencia técnica.

Existen 2 formas de determinar el capital de trabajo, el capital de trabajo estático o contable y el capital de trabajo dinámico.

El capital de trabajo estático es una medida de control de gestión y se expresa por la siguiente ecuación:

Capital de trabajo = A. Circulante – P. Circulante.

Esta forma de determinar el capital de trabajo, está basado en las partidas circulantes del balance de una empresa. Es decir, en base histórica, o sea, de algo que ya pasó. Nos da una medida del capital de trabajo que la empresa tenía a la fecha del balance no señala si el capital de trabajo era suficiente o no, solo el que se tenía.

Para determinar si este capital de trabajo era suficiente, es necesario considerar otro índice que es la liquidez.

La liquidez,  es una razón que relaciona las partidas de circulante. Esta razón o índice puede tomar valores que pueden ser menores que 1 y mayores que 1.

Si la razón de liquidez es menor que 1, esto implica que nuestro activo circulante es menor que nuestro pasivo circulante. Si esto lo llevamos al concepto de capital de trabajo, un índice de liquidez menor a 1, implica un capital de trabajo negativo. La empresa no cuenta con los fondos necesarios para operar normalmente.

Veamos esto con un ejemplo:


Un índice de liquidez igual a 1, implica que el activo circulante es igual al pasivo circulante, esto nos da un capital de trabajo igual a 0.


Un índice de liquidez igual a 2, nos da un capital de trabajo positivo. Si el índice de liquidez es igual a 2, implica que el activo circulante es el doble que nuestro pasivo circulante (o sea A. Circulante = 2 veces el Circulante)


Como se muestra en el detalle recién planteado existe una relación entre la razón de liquidez de la empresa y su capital de trabajo.

Si se acepta que para la mayoría de las empresas, una liquidez de 2 puede ser suficiente para hacer frente a sus deudas de corto plazo, entonces el capital de trabajo para una liquidez de 2 también sería aceptable.

Cuando la liquidez es 2, por cada peso de pasivo circulante, se tienen 2 pesos de activo circulante.

Si consideramos que se define como activo circulante lo que posee la empresa y que es dinero o se convertirá en dinero a lo menos 1 vez en el año y que el pasivo circulante son todas las deudas que la empresa tiene y que vencen dentro del año. Entonces una liquidez de 2 lo que está indicando es que se poseen 2 pesos de partidas que son dinero o que se convertirán en dinero para hacer frente a las deudas que vencen en el mismo lapso de tiempo.

Luego si la liquidez de la firma es 2, entonces podemos afirmar que el capital de trabajo de la empresa es positivo (mayor que cero) y suficiente.

Por otro lado, una liquidez menor a 1, indica que sus activos circulantes son menores que sus pasivos circulantes, por lo que su capital de trabajo estático (la diferencia de sus circulantes) es negativo. Es decir la compañía no tiene el dinero suficiente para hacer frente a sus obligaciones de corto plazo. Al ser sus pasivos circulantes mayor a sus activos circulantes, la empresa, más temprano que tarde no podrá pagar sus compromisos de corto plazo, entrando en insolvencia técnica.

En este caso, el riesgo de insolvencia técnica es apreciable. Mas aun si consideramos que hay una parte de los activos circulantes (el inventario) que tiene una componente un poco más permanente.

Una liquidez mayor a 1, conlleva una disminución del riesgo de insolvencia técnica, mientras mayor sea el índice de liquidez, mayor es nuestro capital de trabajo (medido como la diferencia entre Activo circulante y pasivo circulante).

Resumiendo, hemos determinado las siguientes situaciones:

Liquidez menor a 1. En este caso el capital de trabajo es negativo, la empresa no cuenta con el dinero suficiente para operar normalmente. Su riesgo de caer en insolvencia técnica es elevado.

Liquidez igual a 1. En este caso, el capital de trabajo (expresado como la diferencia de sus circulantes) es cero. Es decir, la empresa esta “calzada”, sus activos circulantes cubren exactamente sus pasivos circulantes.

La firma depende de que le paguen para poder pagar. Cualquier retraso en sus flujos de ingreso la hará caer en insolvencia técnica. No cuenta con un fondo de maniobra que le permita pagar sus deudas si a ella se le retrasan sus entradas de dinero. El riesgo de insolvencia es alto.

Liquidez mayor a 1. La empresa empieza a tener capital de  trabajo. En la medida que la liquidez se acerca a 2 el capital de trabajo aumenta, cuando la liquidez llega a2, el capital de trabajo, además de ser positivo, parece ser suficiente.

Liquidez mayor a 2. Capital de trabajo positivo y abundante. En la medida que la liquidez se haga mayor que 2, la empresa tiene un mayor nivel de capital de trabajo que el que requiere, teniendo recursos ociosos.

Se ha discutido que tanto el índice de liquidez, como el  de capital de trabajo, que están muy relacionados, deben de tener valores que son propios de cada industria o grupo de negocios similares. Hay industrias que son grandes consumidoras de capital de trabajo (aquellas que pagan al contado y venden con un gran crédito), y otras que actúan de manera inversa (en términos promedios), otras industrias deben tener un alto nivel de inventarios, etc.

Se acepta por regla general que una buena medida de liquidez es 2, o sea mantener un nivel de activo circulante que sea el doble del pasivo circulante. Esto, por regla general, se considera como una posición conservadora, que disminuye considerablemente el riesgo de caer en insolvencia técnica

Determinación del capital de trabajo.

Para determinar las necesidades de capital de trabajo de una empresa se usa un presupuesto de caja de tipo simulativo de corto plazo.

Un ejemplo de este tipo de presupuesto es el siguiente:


Es importante hacer notar lo siguiente:

  • Un presupuesto de caja es útil a una compañía en la medida que esta pueda presupuestar sus ingresos y egresos de dinero con algún grado de certeza.
  • El presupuesto aquí ejemplificado, es una variación del presupuesto que se usa generalmente en las compañías día con día para planificar las operaciones y su objetivo es determinar la necesidad de capital de trabajo.

En este presupuesto se puede observar que en el día número 6, se produce el máximo nivel de saldo acumulado en contra o déficit de caja. Si se pudiera obtener una entrada de dinero el día 1 por ese monto, el saldo acumulado quedaría en cero (0) y el resto de los días quedaría con un saldo acumulado positivo (superávit). Si esto pudiese ser así, la empresa podría operar normalmente pagando todas sus obligaciones a tiempo sin caer en ningún tipo de insolvencia.

Si recordamos que la definición de capital de trabajo es la cantidad de dinero que la empresa necesita para operar normalmente pagando todo lo comprometido en su oportunidad, alejándose de la insolvencia, este máximo déficit de caja acumulado es el capital de trabajo.

Entonces, el máximo déficits de caja acumulado de un presupuesto de caja es el capital de trabajo que necesita la empresa.

Este máximo déficit de caja se encuentra siempre en un presupuesto que tenga un horizonte de planificación igual al ciclo del negocio, es decir a la cantidad de días que se demora la compañía en recuperar su inversión con margen.

Una vez determinado el capital de trabajo que la empresa requiere, se debe tomar una de las siguientes 3 opciones:

  1. Financiar toda la necesidad de capital de trabajo con un crédito de mediano o largo plazo.
  2. Financiar las necesidades de fondos en la medida que se necesiten.
  3. No financiar y pagar en la medida que se reciben los ingresos.

La primera  posición es muy segura. La empresa solicita un crédito a mediano o largo plazo, lo introduce en su flujo y tal como se señaló, el día que necesite esos recursos, quedara con un saldo de caja 0 y los demás días tendrá excedentes de caja. La empresa siempre pagara todas sus deudas y no caerá en peligro de insolvencia, pero es una posición que des rentabiliza a la compañía, por las siguientes razones.

  • Se está pidiendo un crédito por dinero que no siempre está ocupando.
  • Está pidiendo dinero a mediano o largo plazo y las tasas cortas son generalmente  más baratas que las tasas largas

La segunda posición es un poco menos segura que la primera. Implica que la compañía solicite crédito en la medida que lo necesite. Esto requiere que la empresa mantenga varias opciones de financiamiento con la banca (líneas de crédito abiertas y vigentes), lo cual no siempre es posible. Esto exige menos esfuerzo financiero a la empresa ya que solo solicita crédito en la medida que lo requiere y a corto plazo.

En este caso la empresa requiere más personal administrativo que este pendiente del flujo de caja y de los préstamos solicitados a los bancos, como así mismo de la mantención de las líneas de crédito con las instituciones financieras.

La tercera posición es la más riesgosa de todas, implica pagar las acreencias en la medida que se tenga dinero. Si no hay dinero los acreedores deberán esperar hasta que la compañía tenga recursos. Esto implica un grado de insolvencia frente a los proveedores, una situación que no siempre es factible de mantener en el mediano plazo. Es muy rentable ya que no se solicita ningún tipo de crédito.

La compañía deberá elegir una de estas posiciones de acuerdo a sus políticas y a su disposición frente al riesgo.

Observaciones sobre los Presupuestos.

Los presupuestos son herramientas de amplio uso en finanzas en particular y en negocios en general. Se puede definir un presupuesto como un plan expresado en dinero.

Los presupuestos se pueden clasificar, en forma muy general, en simulativos y de control de gestión.

Los presupuestos de control de gestión tienen como misión establecer metas u objetivos, las que son controladas una vez cumplido el horizonte planificación.

Los presupuestos simulativos tienen por objetivo modelar las situaciones de más probable ocurrencia, para así poder actuar frente a situaciones que se esperan. En base a estas situaciones, se puede determinar una situación más favorable para la empresa (situación optimista) o más desfavorable (situación pesimista). Pero situaciones como la determinación del capital de trabajo, se realizan en base a la situación más probable.

Uno de los presupuestos más  utilizados en finanzas es el presupuesto de caja. El presupuesto de caja simulativo proyecta hacia el futuro las entradas y salidas de dinero de más probable ocurrencia. El presupuesto de caja operativo se usa para determinar las necesidades de capital de trabajo, El flujo de caja de largo plazo es usado para evaluar nuevos negocios.

Se define como ciclo del negocio, el periodo de tiempo que necesita la empresa para recuperar el dinero invertido en el negocio (inversión) con margen.

Para una empresa manufacturera, es el periodo promedio de fabricación, más el periodo promedio de inventario más el periodo promedio de cobranza.

El periodo promedio de fabricación es lo que se demora la compañía en fabricar el producto que es objeto de su negocio. Si son varios los productos que fabrica la empresa, el periodo de fabricación es un promedio ponderado de los tiempos ocupados en fabricar cada uno de los productos. Por ejemplo, si la empresa fabrica 3 productos y sus tiempos de fabricación son los siguientes:


El periodo promedio de fabricación  de la empresa es 6,1 días.

El periodo promedio de inventarios es el periodo de tiempo que se demora la empresa, en promedio, en vender sus inventarios. Esto se puede calcular de la siguiente forma:

Periodo promedio inventario = Inventario*365 días / costo de la venta.

Este es un índice financiero que nos puede entregar una información bastante aproximada a la realidad.

Si contamos con la rotación de los inventarios, basta que se dividas el número de días del año (365) y se divide por la rotación (también expresada en días).

El periodo promedio de cobranza (PPC), se define como el  número de días que demora la empresa en cobrar sus ventas al crédito.

El periodo promedio de fabricación también es un índice financiero que nos puede entregar información bastante aproximada acerca de cuanto demora la empresa, en promedio, en cobrar sus ventas al crédito.

Periodo Promedio de cobranza = Cuentas por cobrar*365 días/ Ventas al crédito.

Si se cuenta con la rotación de las cuentas por cobrar, el periodo promedio de cobranza es la 365 días/ rotación de las cuentas por cobrar.

La sumatoria de estos 3 periodos es el ciclo del negocio (en promedio).

Si la empresa es solo comercializadora (compra para vender) el periodo de fabricación es cero y el ciclo del negocio es la sumatoria de los otros 2. 

Para poder determinar la necesidad de capital de trabajo, la empresa necesita confeccionar un flujo de caja.

El flujo de caja debe cumplir con 2 requisitos.

a.-Las proyecciones deben de ser válidas. Es decir, compañía debe ser capaz de presupuestar en forma acertada sus entradas y salidas de dinero. En otras palabras el presupuesto de caja debe ser confiable (debe tener capacidad predictiva)

b.- El presupuesto de caja debe tener un horizonte de planificación igual a su ciclo del negocio. (Concepto examinado en párrafos anteriores).

Si el flujo de caja es por un horizonte de planificación igual al ciclo del negocio, se puede estar seguro que el máximo déficit de caja aparecerá en esa proyección.

También la empresa puede no necesitar capital de trabajo ya que lo tiene incorporado en sus flujos. Esto no significa que la empresa no tenga capital de trabajo. Toda empresa tiene una cierta necesidad de fondos para financiar su operación. Si el flujo de caja no presenta déficits, la empresa ya tiene incorporado el capital de trabajo en sus flujos. En este caso, la empresa podría ocupar estos excedentes de caja en inversiones de corto plazo.

Las principales alternativas de inversión que enfrenta una empresa, para colocar estos excedentes de caja son las siguientes:

  • Renta fija.

Fondos Mutuos.

Renta variable.

Prepagos.

  • Prontos pagos.

La renta fija es un instrumento de inversión de corto, mediano y largo plazo que constituye un activo para su dueño y una deuda para quien lo emite.

Se denomina de renta fija porque su rendimiento es conocido al momento de su compra o contratación. El más común de estos instrumentos de inversión es el depósito a plazo. En un depósito a plazo, el dueño del documento (pagare), presta una cantidad de dinero a un banco determinado, por una cantidad determinada de días (generalmente a 30 días) a una tasa previamente acordada. Para el ahorrante, el depósito es un activo y para el banco es un pasivo (deuda).

El ahorrante sabe perfectamente que cantidad de dinero ganara su inversión, antes de que esta venza.

Este tipo de inversión se contrata ya que, dentro de ciertos parámetros, es un acuerdo entre 2 partes (el inversionista u ahorrante y el banco). En este acuerdo se fija la tasa de interés, el plazo (los días), el monto y la condición del documento (al portador, a la orden o nominativo).

Instrumentos de renta fija.

Son instrumentos de inversión que constituyen deuda para quienes los emiten y un activo para el tenedor (quien los adquiere). Los instrumentos de renta fija, se denominan así, porque su rendimiento es conocido al momento de contratar o comprar.

La renta fija está formada por un amplio conjunto de valores negociables que emiten las administraciones públicas (deuda pública) y las entidades privadas (renta fija privada), y que son adquiridos por inversores a modo de préstamo, concedido a cambio de la obtención de  intereses.

La inversión en renta fija no se encuentra exenta de riesgos, de forma que, como en cualquier préstamo, existe el riesgo de no cobrar los intereses que el emisor se ha comprometido a pagar, e incluso, en situaciones de insolvencia, tampoco la devolución del principal. De ahí la importancia de la calidad crediticia del emisor. A este tipo de riesgo se le denomina “riesgo de crédito”, pero la renta fija no sólo presenta ese riesgo, sino que también hay que tener en cuenta el riesgo de mercado (variaciones en el valor como consecuencia de las oscilaciones en los tipos de interés).

En resumen, los instrumentos de renta fija poseen 2 riesgos, el riesgo emisión o riesgo de crédito y el riesgo de mercado. Este riesgo aparece en el caso de que el propietario del instrumento de renta fija decida vender antes del vencimiento del título.

Formas de pago.

Los instrumentos de renta fija se pueden pagar de diversas maneras, las cuales quedan estipuladas al momento de contratarla. Pueden, en teoría, existir tantas formas de pago como quiera el emisor.

Sin embargo existen 4 formas típicas de pagar la renta fija.

1.- Pago de capital e intereses al final del periodo. Esta forma es como se pagan los depósitos a plazo, por esta razón es conocida como “tipo depósito a plazo”

2.- Pago de intereses periódicos, con amortización total del capital en una sola cuota, al final del periodo

3.- Cuotas iguales y sucesivas de pago de intereses y amortización de capital. En la última cuota se extingue totalmente la deuda. Este tipo de amortización se conoce como “tipo dividendo”. En este tipo de pago, se hace necesario construir una tabla de amortización, para separar los intereses de la amortización de capital. Los intereses y la amortización de capital varían de periodo en periodo, aumentando el monto de la amortización de capital y disminuyendo el pago de intereses, conforme el documento se vaya acercando a su extinción.

4.-Una cuarta forma de pagar, es igual a la anterior pero considera amortizaciones extraordinarias de capital Estas amortizaciones extraordinarias se hacen por sorteo y extinguen toda una lámina de deuda. El pago anticipado de la letra se hace a valor par. Esta forma se denomina tipo letra hipotecaria.

Emisores de renta fija.

Dado a que el principal riesgo de la renta fija lo constituye la posibilidad de no pago de los intereses o del capital e intereses (riesgo de emisión) es que los emisores de renta fija se encuentran muy regulados. En chile los emisores de renta fija se clasifican en 3 grandes tipos.

Emisores estatales.

Son emisores de deuda que son organismos de gobierno. Los más importantes son el Banco Central, el Banco del Estado y la Tesorería General de la Republica.

Bancos privados.

La banca privada también se encuentra autorizada a emitir renta fija y lo hacen a través de depósitos a plazo (renta fija) y emisión de letras hipotecarias, documento destinado a recaudar fondos para el financiamiento de créditos para la vivienda.

El funcionamiento de una letra hipotecaria es más o menos el siguiente:

El banco emisor de la letra hipotecaria evalúa un conjunto de clientes que quiere adquirir viviendas. Una vez evaluados, determina la cantidad de dinero (expresado en UF) necesaria para la adquisición de estas viviendas y emite letras hipotecarias por el monto requerido a una tasa de interés atractiva para los inversionistas. Una vez que ha colocado las letras en el mercado y ha recaudado los fondos necesarios, cursa los créditos hipotecarios a cada uno de los clientes. Con estos dineros se adquiere la vivienda que necesita el cliente del banco. La tasa de interés a la cual el banco presta estos dineros es superior a la que el banco se comprometió a pagar a los inversionistas.

Con los flujos obtenidos mediante el pago de dividendos que hacen los clientes, el banco hace frente a los pagos que tiene que hacer a los inversionistas que adquirieron las letras hipotecarias.

Es una operación de bajo riesgo para el banco, ya que la propiedad queda en garantía hasta que el cliente termine de pagar el crédito hipotecario. Además se contratan seguros de desgravamen que cubre el fallecimiento del deudor. En este caso, el seguro paga la propiedad al banco y los herederos del deudor quedan con la propiedad saneada.

Las letras hipotecarias emitidas por los bancos tienen buena aceptación entre los inversionistas institucionales quienes las incorporan a sus carteras de inversión. Quienes adquieren estos documentos son las compañías de seguros, los fondos de pensiones, los fondos mutuos y los bancos de inversión.

Las empresas.

Las empresas también pueden hacer emisión de instrumentos de renta fija para capturar fondos que financien sus planes de inversión. La renta fija que emiten las empresas se denominan genéricamente bonos.

Las empresas que emiten renta fija deben cumplir una serie de requisitos, destinados a asegurar a los inversionistas.

Para que la empresa pueda emitir bonos debes primero ser Sociedades anónimas abiertas, además sus acciones deben ser elegibles por los fondos de pensiones para conformar sus fondos de inversión y además deben cumplir con una serie de normas impuestas por la Superintendencia de Valores y Seguros (S.V.S.) para que sean autorizadas su emisión de renta fija.

Usos y fuentes de fondos.

El uso y fuente de fondos es una herramienta analítica complementaria al análisis financiero. Esta herramienta permite identificar el uso que le dio la empresa a los fondos y de donde los obtuvo.

El uso y fuente de fondos nace de la comparación de 2 balances, generalmente anuales (al 31/12) consecutivos.

Para confeccionar esta herramienta, se hace necesario recordar conceptos anteriormente mencionados, como el capital de trabajo y aceptar algunas convenciones.

El concepto de capital de trabajo que se manejara en la confección de esta herramienta será el contable, que es la diferencia de los circulantes (activo circulante – pasivo circulante)

De acuerdo con esta definición, cuando una partida de activo circulante aumenta, y se mantiene todo lo demás constante, el efecto del aumento de esta partida sobre el capital de trabajo será un aumento.

Si la partida de activo circulante disminuye, entonces el capital de trabajo también disminuirá. Es decir, se establece una relación directa entre el activo circulante y el capital de trabajo. Si una partida de activo circulante aumenta, el capital de trabajo aumenta. Si disminuye, el capital de trabajo también disminuirá.

Por otro lado, de acuerdo a la definición contable del capital de trabajo, si una partida del pasivo circulante aumenta y todo lo demás permanece constante, el capital de trabajo disminuirá. Si disminuye una partida del pasivo circulante, el capital de trabajo aumentara. Se establece una relación inversa entre las partidas del pasivo circulante y el capital de trabajo. Si el pasivo circulante aumenta, el capital de trabajo disminuye, si el pasivo circulante disminuye, el capital de trabajo aumenta.

Las convenciones que adoptaremos son las siguientes:

El recurso que tiene la empresa es dinero. Este recurso se puede obtener o gastar (aplicar)

Si una cuenta de activo aumenta, aceptaremos que la empresa adquirió algo, por lo cual tuvo que pagar una determinada cantidad de dinero. Como la empresa el recurso que tiene es el dinero, cada vez que aumenta una partida de activo (cualquiera sea su naturaleza) es un recurso aplicado (la empresa aplico el recurso dinero para obtener la mayor cantidad de activo)

Si una cuenta de activo disminuye, se considerara que la empresa vendió ese activo, por lo cual obtendrá una cantidad de dinero igual a esa disminución, por lo tanto, la empresa obtuvo una cantidad de recursos. Luego, una disminución de una cuenta de activo es un recurso obtenido.

Por otro lado, si una cuenta de pasivo aumenta, significa que la empresa se está endeudando, es decir, está asumiendo una obligación a cambio de una cantidad de dinero, o sea está obteniendo recursos. Luego asumiremos que cualquier aumento de una cuenta de pasivo, es una obtención de recursos.

Si las cuentas de pasivos disminuyen, la empresa está cancelando sus obligaciones, lo cual hace con dinero, desde este punto de vista, la disminución de un pasivo es un recurso aplicado.

Los aumentos de capital de trabajo se consideran recursos aplicados (la empresa necesita una mayor cantidad de dinero para operar el negocio sin caer en insolvencia técnica). Las disminuciones de capital de trabajo se consideran recursos obtenidos (la empresa necesita menos dinero para operar el negocio, por lo cual libera recursos)

Las cuentas de patrimonio representan el dinero que la empresa  debe a los socios u accionistas (un pasivo no exigible), por lo cual las cuentas de patrimonio se tratan al igual que las cuentas de pasivo.

Una vez adoptadas estas convenciones podemos construir un uso y fuente de fondos. Para esto se construye una hoja de trabajo, tal como muestra el siguiente cuadro.


Como se puede observar, se ha creado una hoja d trabajo donde existen 4 columnas que son:

  1. Aumento de capital de trabajo.
  2. Disminución del capital de trabajo.
  3. Recursos obtenidos.
  4. Recursos aplicados.

En las 2 primeras columnas se registran los movimientos de las partidas del circulante (las que mueven el capital de trabajo). Este registro se realiza de acuerdo como afecte la cuenta al capital de trabajo. Si es una cuenta de activo circulante y aumento, el aumento se registra en la columna aumento del capital de trabajo.

Se llena sucesivamente de acuerdo a como la cuenta afecte al capital de trabajo. (Tal como se explicó en los párrafos precedentes).

Una vez que se han registrado todas las variaciones que afectan al capital de trabajo, se totalizan las variaciones. Si el total de los aumentos fue mayor que el total de las disminuciones, hay un aumento neto del capital de trabajo por la diferencia entre ambas columnas. Si la columna de disminuciones es mayor que los aumentos, entonces habrá una disminución neta del capital de trabajo.

Recuérdese que un aumento del capital de trabajo es un recurso aplicado y una disminución es un recurso obtenido.

En la hoja de trabajo presentada se han pintado con amarillo las cuentas circulantes, que son las que afectan al capital de trabajo.

En la tercera y cuarta columna se registran las variaciones de las otras cuentas (las que no mueven capital de trabajo, o sea las fijas o de largo plazo). Las variaciones de  partidas se registran de acuerdo a las convenciones asumidas, nombradas anteriormente. Es decir si una cuenta de activo fijo aumenta, la variación se registra en la columna recurso aplicado, y así sucesivamente.

Luego de llenada las columnas de recursos aplicados y obtenidos, se totalizan y se considera el aumento o disminución del capital de trabajo, como recurso aplicado u obtenido.

Los recursos aplicados deben ser igual a los recursos obtenidos, considerando la variación del capital de trabajo.

 A continuación se muestra una hoja de trabajo desarrollada.


Después de esto se realiza una cuadratura, que es la siguiente:

Recursos aplicados.

Aumento de activos fijos                            $20.809

Aumento del capital de trabajo                               $32.708

Total recursos aplicados                              $53.517

Recursos Obtenidos.

Disminución de otros activos.                   $    408

Aumento deuda de largo plazo                                $  6.410

Aumento Utilidad ejercicio                        $14.580

Aumento Utilidad acumulada                   $32.119

Total recursos obtenidos                            $53.517