Encuentro cultural: Relaciones positivas y preservación de la identidad

¿Qué pasa cuando dos culturas se ponen en contacto?

El modo de acercarnos o aproximarnos a una cultura va a condicionar la futura relación que se dé entre los grupos. El caso más común es el encuentro entre una minoría y una mayoría. Mayoría y minoría en términos numéricos y de poder.

Existen dos variables que establecerán el tipo de contacto cultural:

  • Variable 1: Se buscan y valoran las relaciones positivas.
  • Variable 2: Se conservan la identidad cultural y las costumbres.

Se produce interculturalidad cuando se conserva la identidad cultural y las costumbres y se buscan y valoran las relaciones positivas. Como se puede observar, se respeta la diversidad cultural (es a lo que se limita el relativismo cultural) y, por otro lado, se potencian las relaciones positivas.

Lograr las relaciones interculturales entre una minoría y una mayoría es difícil y complicado. Estamos ante un proceso que requiere, por un lado, equiparar las condiciones de vida de los grupos (acceso a la educación, a la salud, a viviendas, al trabajo, etc.), y por otro, que el grupo mayoritario tenga interés y deseo de encuentro con otra cultura.

En este sentido, la interculturalidad integra una dimensión de interacción, intercambio, apertura y solidaridad efectiva: reconocimiento de los valores, de los modos de vida, de las representaciones simbólicas, ya sea dentro de los registros de una misma cultura o bien entre culturas distintas. No implica, por tanto, que se dé un dominio completo de los registros o patrones culturales de cada cultura, sino el dominio de la dinámica ejercida por la comunicación intercultural.

El concepto de intercultural es, en consecuencia, la acción y la comunicación entre personas, grupos o instituciones (interculturalidad escolar, comunitaria, entre instituciones) pertenecientes a culturas diferentes o procedentes de culturas diferentes.

Interculturalidad en salud

Diversidad Cultural

CULTURA: Son todos los elementos del proceso de socialización de una persona que determinan su modo de ver el mundo y situarse en él, su sistema de creencias y sus relaciones, su concepción de las normas, derechos y deberes hacia los demás.

Incluye también el identificarse con una tradición cultural y ser parte o desear ser parte de ella.

“La diversidad cultural es el grado de variación tanto a nivel mundial como de ciertas áreas, en la que existe interacción de diferentes culturas coexistentes. Las acciones a favor de la diversidad cultural comprenden la preservación y promoción de las culturas existentes” (Diversidad Cultural, de UNESCO, 2001).

Interculturalidad

«Modo de convivencia en el que las personas, grupos e instituciones, con características culturales y posiciones diversas, conviven y se relacionan de manera abierta, horizontal, incluyente, respetuosa y sinérgica en un contexto compartido» (Organización Mundial de la Salud – OMS).

Interculturalidad en salud

En una relación intercultural se reconoce al Otro como un ser digno de ejercer todos sus derechos, valorando la diversidad como riqueza potencial. Se sustenta en cuatro principios básicos:

  1. Reconocimiento de la diversidad cultural.
  2. Relaciones equitativas.
  3. Respeto a las diferencias.
  4. Enriquecimiento mutuo.

En el caso de las instituciones de salud, los usuarios cuestionan, por ejemplo:

  1. La falta de sensibilidad, de escuchar y de respeto en el trato recibido de parte de los prestadores de salud.
  2. El menosprecio de sus opiniones y costumbres.

Esto influye en el desapego a las indicaciones médicas, una incidencia mayor de abandono de los tratamientos y en resistencia al uso de los servicios de salud que, en casos extremos, ha llegado a la confrontación y al choque cultural.

¿Cómo se entiende y qué propone la Interculturalidad en salud?
Se produce cuando los servicios de salud consideran el entorno cultural, la diversidad y el respeto respecto a diferentes interpretaciones relacionadas con la salud y la enfermedad.

La interculturalidad en salud propone la participación activa de los diferentes actores sociales de la salud, considerando no sólo la relación entre las personas, sino los recursos terapéuticos, los espacios y los aspectos administrativos y de dirección.

Interculturalidad en Salud y Políticas Públicas

Se plantean dos condiciones que son prioritarias para los servicios de salud:

  1. Personal de salud culturalmente competente: Personal capaz de fomentar una comunicación respetuosa y eficaz de acuerdo con las múltiples identidades de los participantes y/o usuarios de los servicios, promoviendo para sí mismo y para los usuarios de los servicios actitudes de respeto, tolerancia y diálogo, constatando que la verdad es plural y relativa, y que la diversidad puede ser fuente de riqueza.
  2. Servicios de salud culturalmente competentes: Servicios de salud que promueven y otorgan valor a la diversidad, impulsan la participación social y la comunicación asertiva en los asuntos relacionados con la salud de la comunidad y que adecuan sus procesos y espacios a las características sociales y culturales de la población.

Bioética intercultural y Políticas Públicas en grupos vulnerables

La Bioética debe ser considerada en el contexto de las políticas públicas que rigen la vida y el desarrollo de los individuos, comunidades y sociedades.

De este modo, construir políticas públicas a partir, por ejemplo, de los principios de la bioética intercultural, constituye la base de una nueva forma de decisión y acción pública que el gobierno y la sociedad abordan frente a la complejidad de los problemas socioculturales como la vulnerabilidad de importantes grupos humanos.

El interés de la Bioética Intercultural es promover la convivencia, de manera apropiada y justa, tanto para las personas vulnerables, con capacidades diferentes, las personas de la tercera edad como los menores y las minorías étnicas en donde se antepongan el respeto a los derechos y a la dignidad humana.

La Bioética con enfoque intercultural hace posible la reflexión, el diálogo y la formulación de planteamientos normativos y de políticas públicas para regular y resolver conflictos en la vida social y cultural del ser humano y su medioambiente.