Estado de Bienestar: Origen, Características y Evolución
Definición
La expresión Estado de Bienestar proviene del término inglés Welfare State, en contraposición a Warfare State (estado de guerra). Este modelo se caracteriza por la provisión de una serie de servicios y garantías sociales a la totalidad de los ciudadanos de un país.
Tras la Segunda Guerra Mundial, se implantó un nuevo modelo político, económico y social que se desarrolló a través de las políticas sociales, contribuyendo a mejorar las condiciones de vida de gran parte de los europeos. El concepto de Estado de Bienestar implica que el Estado asume la responsabilidad del bienestar social y económico de sus miembros.
Según Muñoz del Bustillo, el Estado de Bienestar se define como «el conjunto de actuaciones públicas tendentes a garantizar a todos los ciudadanos de una nación el acceso a un mínimo de servicios que garantizan su supervivencia».
José Luis Monedero señala que el Estado de Bienestar «es aquella forma de organización política en la comunidad que comporta una responsabilidad de los poderes públicos para asegurar una protección social y el bienestar físico de sus ciudadanos».
Características del Estado de Bienestar
- Universalidad de los derechos: En el Estado de Bienestar, todos los ciudadanos tienen los mismos derechos para alcanzar determinadas cotas de bienestar. El Estado interviene para modificar el medio social y mejorar las condiciones de vida que resultan perjudiciales o negativas para determinados grupos de personas. La política social no solo debe actuar sobre las necesidades, sino también sobre las causas que las generan.
- Responsabilidad social: El Estado de Bienestar asume que los problemas son de índole social, no individual, y que afectan a grupos y comunidades.
- Tipos de actuaciones: Los Estados realizan dos tipos de actuaciones para lograr el bienestar social:
- Actuaciones generales: Pretenden conseguir soluciones globales para todos.
- Actuaciones específicas: Dirigidas a colectivos concretos o a mejorar aspectos concretos. También existen actuaciones destinadas a determinados ámbitos territoriales. Entre las actuaciones específicas encontramos las que se destinan a satisfacer necesidades sociales como sanidad, educación y vivienda.
- Intervención pública en la economía: La intervención pública en la economía se hace necesaria porque el funcionamiento del mercado por sí solo no resuelve los problemas de distribución. El mercado produce para quien puede pagar el precio de los bienes y servicios, y no para quien lo necesita. Por eso, la dinámica del mercado no resulta socialmente justa y se hace necesaria la intervención pública para corregir el reparto de la renta, es decir, una política redistributiva. Esta intervención pública permite modificar el juego de las fuerzas del mercado en tres direcciones:
- Garantizando a los individuos un mínimo nivel de ingresos, independientemente del valor que el mercado dé a su trabajo o a sus propiedades.
- Limitando los efectos de la inseguridad económica al permitir que tanto los individuos como las familias puedan hacer frente a determinadas contingencias que les podrían conducir a crisis, como la enfermedad, el desempleo o la ancianidad.
- Asegurando que a todos los ciudadanos se les ofrezcan los mejores servicios sociales, independientemente de cuál sea su estatus social.
- Garantía de un estándar de vida mínimo: Se pretende garantizar a los ciudadanos un estándar de vida mínimo. Para ello, se garantiza:
- Renta mínima para la subsistencia.
- Pensiones de jubilación.
- Prestaciones por desempleo.
- Ayudas familiares.
Estas prestaciones reducen la incertidumbre sobre los flujos de ingresos que se producen ante situaciones esperadas o inesperadas.
- Redistribución de la renta: Se persigue modificar el reparto de la renta entre los miembros de la sociedad. El Estado puede hacerlo mediante impuestos y transferencias. La política de redistribución de rentas es conflictiva, está sujeta a juicios de valor y a la determinación de cuánto tiene que pagar cada cual.
- Integración social: Se pretende permitir la integración social de los excluidos. A veces, la pobreza es consecuencia de las crisis económicas porque generan desempleo, empleos precarios, economía sumergida, etc. Para luchar contra la pobreza se han elaborado sucesivos programas en donde se adoptan medidas como:
- Prestaciones no contributivas.
- Salarios mínimos de inserción.
- Prestaciones por desempleo.
Origen del Estado de Bienestar: Hechos Históricos
Podemos considerar que el Estado de Bienestar surge como una necesidad histórica para dar respuesta adecuada a las disfunciones de la sociedad industrial.