Estrategias Conversacionales y Comunicación Intercultural: Claves de la Interacción
Las Presecuencias
Las presecuencias son secuencias que se insertan en una posición previa a otra secuencia. Un ejemplo bastante claro de estas presecuencias son las preinvitaciones. El motivo de las preinvitaciones es evitar o mitigar los turnos no preferidos. Por ejemplo: si yo no pregunto antes «¿Qué haces esta tarde?» y digo directamente «¿Te apetece ir al cine esta tarde?», la respuesta puede ser sí (preferido) o no (no preferido). Si se responde no, se tendría que indicar el motivo. Todo esto se evita precisamente con las preinvitaciones.
Otro tipo de presecuencias son las preanunciaciones. Como indica su nombre, son secuencias previas a las anunciaciones. También son muy comunes las preanunciaciones cuando se tiene que dar una mala noticia. Por otro lado, a veces, las preanunciaciones tienen como finalidad que sea el interlocutor quien adivine la mala noticia para evitar de este modo tener que decirla.
Finalmente, tenemos las prepeticiones: secuencias previas a una petición. Normalmente, estas están destinadas a asegurarnos de que el interlocutor está capacitado para acceder a la petición. Estas prepeticiones funcionan como actos de habla indirectos.
Estrategias Conversacionales desde una Perspectiva Intercultural
Regla de Cambio de Turno
Los autores Sacks, Schegloff y Jefferson establecieron una serie de reglas para el cambio de turno. Estas, por su simplicidad y elegancia, se supone que son universales. La idea fundamental es básicamente que hay unos lugares pertinentes en la transición en los que cambiar de turno. Sin embargo, hay que tener en cuenta que ya dentro de una misma lengua y cultura se dan variaciones respecto a estas reglas de cambio de turno.
Estas reglas varían en aquellas situaciones en las que se dan unos roles de poder determinados. Por ejemplo, en la conversación entre un médico y sus pacientes, o entre profesor y alumnos. Si pasamos al plano interlingüístico y cultural, la variabilidad es mucho mayor. Para abordar esto, volvemos a hablar del solapamiento.
Según estos autores, el solapamiento debería ser mínimo. Sin embargo, esto obedece a una perspectiva etnocéntrica. El solapamiento mínimo es propio de la cultura angloamericana, donde predomina el valor cultural del respeto a la autonomía del otro.
En cambio, en aquellas culturas en las que predomina la cordialidad y la expresión simpatética, el solapamiento es mucho más frecuente como expresión de implicación en la conversación y viveza de la misma. En este sentido, un estudio demostró que el solapamiento es cinco veces mayor en español que en el sueco. En general, otros estudios han señalado que en las lenguas romances es más frecuente interrumpir que en las lenguas del norte de Europa.
Constitución del Marco Conversacional
Hay aspectos de la conversación que están claramente convencionalizados. Por ejemplo, el inicio y el cierre de la conversación. Los autores mencionados en el punto anterior (Sacks, Schegloff y Jefferson) estudiaron la apertura conversacional en las conversaciones telefónicas. Descubrieron tres secuencias:
- De llamada
- De saludo
- De identificación
Las distintas lenguas tienen distintos modos de responder en la secuencia de llamada. En español peninsular es muy habitual que digamos «¿Diga?» o «¿Sí?». En inglés americano es con «Hello?». Lo más importante es que, si se desconocen estas convenciones para establecer el marco conversacional, se pueden generar situaciones de inhibición.
Actividad Negociadora
Hernández cita distintas situaciones en las que se requiere una negociación, como son:
- Al hacer un cumplido
- Una invitación
- En situaciones de compraventa
En primer lugar, en relación con los cumplidos, es bastante frecuente en muchas culturas que a un cumplido le siga una expresión de discrepancia, seguida a su vez de una reafirmación del cumplido. Se inicia así una negociación que puede prolongarse durante varios turnos. En otras culturas, sin embargo, se responde a un cumplido mediante un agradecimiento, evitando estas secuencias de negociación.
En el ámbito de las invitaciones, también la negociación es muy importante. Es común que, según las culturas, se tenga que iniciar una negociación más o menos extensa antes de aceptar una invitación.
Un tercer aspecto que trata Hernández y en el que se da una negociación es en las situaciones de compraventa. La posibilidad de negociar el precio depende de la cultura y del sistema económico.
En general, Hernández señala que estas diferencias remiten, en último término, al valor que se concede en diferentes culturas a la función fática del lenguaje. Es decir, hay culturas en las que se entiende que cualquier encuentro social tiene que estar acompañado de materia verbal (conversación) y otras que son mucho más taciturnas al respecto.
Valoración del Silencio
Hay que tener en cuenta que el silencio comunica. Existen distintas valoraciones del silencio según las culturas. Por ejemplo, la frase «Quienes saben no hablan, quienes hablan no saben». En cambio, en la cultura occidental, fácilmente se considera que el locuaz, quien habla mucho, es sabio. Cuanto menos se habla, la comunicación se considera más auténtica.
En cambio, Hernández señala que en aquellas culturas en las que se valora la palabra, son culturas en las que las relaciones sociales se han vuelto indeterminadas. Según el contexto de la conversación, el silencio puede expresar:
- Ira
- Hostilidad
- Afecto
- Condolencia
Basso estudia las situaciones en las que se exige guardar silencio en la cultura apache, las cuales contrastan con la cultura angloamericana. Finalmente, Scollon y Scollon parten de situaciones de contacto entre códigos pragmáticos.