Evolución de la Asistencia a la Pobreza: El Rol del Trabajo y la Limosna en Pensadores Clave
El Trabajo y la Asistencia a la Pobreza en Pensadores Clave
¿Qué papel juega el “trabajo” en los planteamientos de Vives, Giginta y Robles?
Vives
Vives condena el ocio y exalta el **trabajo**. Su pensamiento contrasta con la visión moderna en dos puntos clave:
- Condena a quienes trabajan con el único fin de acumular riquezas para herederos que probablemente vivirán en el ocio.
- Critica la excesiva insistencia en los conceptos de “mío” y “tuyo”, que fundamentan la apropiación privada de las riquezas.
En su segundo libro, dedicado a la política pública para con los pobres, propone la reorganización de las antiguas instituciones caritativas, como los hospitales. El principio fundamental de esta reorganización es el **trabajo**.
Sostiene que incluso personas con discapacidades (ciegos, inválidos, ancianos, tontos, mancos, etc.) pueden trabajar. Concluye que es necesario “limpiar” los hospitales de aquellos que, pudiendo trabajar, no lo hacen, pues afirma que no faltan **manufacturas** para emplear a los **desocupados**. Solo excluye del trabajo a quienes considera **verdaderamente enfermos**.
También es partidario de la **instrucción de los niños** y de la **enseñanza de un oficio**.
Concluye que, a través del trabajo, los pobres pueden convertirse en **ciudadanos bien alimentados, bien instruidos y útiles**.
Cita a San Pablo: “Aquellos que puedan trabajar no deben permanecer inactivos porque Pablo, el discípulo de Cristo, lo prohíbe”.
Es partidario de que los pobres trabajen, pues considera que es un medio para **combatir su situación de pobreza** y **poner fin a la mendicidad**. Para ello, propone que se les instruya y se les asigne a **talleres** o a **obras públicas**.
Giginta
Entre sus proyectos, destacan las **Casas de Misericordia** y los **Cofrades**.
Coincidía con el pensamiento vivista en que las Casas de Misericordia debían ser **centros de formación profesional** y de **producción manufacturera**. Añadía que los pobres residentes en estas casas deberían ocuparse de las labores del campo o de otras labores artesanales, según la época del año.
Opinaba que, si dicho trabajo no bastase para mantener la casa, entonces el pobre se encargaría de **buscar limosna**.
Los Cofrades
Era un centro dedicado a la **instrucción de los pobres** para un futuro trabajo, cuyo salario sería destinado a las Casas de Misericordia. Cuando esto no era posible, se planteaba la **limosna inteligente**, que consistía en que los pobres pidieran para la Casa de Misericordia en unas determinadas horas, días y en un lugar concreto.
Robles
Era partidario del **examen de los pobres** y consideraba que los **pobres verdaderos** debían trabajar en distintos ámbitos, pues añadía: “No hemos de dar de comer al que puede y no quiere trabajar”.
Era muy clarividente, planteó la **ayuda a domicilio** (una o dos veces por semana) para quien no pudiera ganar dinero trabajando o para quien, ganándolo, no pudiera llegar a fin de mes.
También, al igual que Vives, era partidario de la **formación de los niños para trabajar**.
Opina que la pobreza se puede suprimir mediante dos modos principales:
- Hay modos de pobreza que se pueden superar por la **integración activa en el sistema social** de personas que, propiamente, no son pobres, ya sea porque carecen de medios por no querer trabajar o por no encontrar un empleo. A estos, propone ayudarles facilitándoles o imponiéndoles su **incorporación a la población activa**.
- La otra opción que propone Robles es mediante la **vía de la limosna**.
Por otra parte, se basa en la economía, pues opina que esta aumenta sus bienes por obra del **trabajo**. El trabajo es **creador de bienes**. Piensa que el esfuerzo de las manos de los trabajadores es una **mercancía vendible**, cuyo carácter de mercancía se reconoce por ser intercambiable por dinero.
Por tanto, añade que quien tiene salud y puede trabajar no puede ser mendigo, puesto que es poseedor de un bien (su capacidad de trabajo). Solo si, a pesar de todos sus ingresos, estos no son suficientes, podrá considerarse pobre y tendrá los mismos derechos que los demás.
Para él, el **trabajo** es siempre posible y productivo.
¿Qué es un Pobre Verdadero, un Pobre Falso y un Pobre Vergonzante?
- Pobres Verdaderos: Son aquellos a quienes se les permite llevar una insignia al cuello para pedir limosna en la calle y vivir “dignamente” de ella.
- Pobres Falsos: Se considera “falsos” a los pobres que piden limosna en la calle, ya que existen centros a los que pueden acudir. Por ello, se les forzará a trabajar para ganarse la vida.
- Pobres Vergonzantes: Son aquellas personas que, al pedir limosna, sienten vergüenza social y ocultan su situación, porque antes de caer en la pobreza, eran ciudadanos que no sufrían esa condición.
El Papel de la Limosna en Soto, Robles y Herrera
Domingo de Soto
En su obra Deliberación en la causa de los pobres, Soto expresa la defensa de los pobres, de su libertad de movimientos y su derecho a pedir limosna.
Respecto a la **limosna** y el **encierro de los pobres**, plantea lo siguiente:
- No se puede recluir a nadie en contra de su voluntad, ya que ello atenta contra la **dignidad humana** y la **libertad**. El **pobre verdadero** es libre de pedir. Los pobres tienen derecho a pedir limosna en cualquier necesidad, aunque no sea grave. En caso de duda, se considerará que el pobre es verdadero.
- La limosna que dan los ricos a los pobres tiene mucho de **restitución de deuda** y no procede simplemente de la generosidad, pues se trata de bienes que no son tan enteramente suyos como suelen suponer.
- La ausencia de los pobres a la vista de los ciudadanos pudientes disminuiría la práctica de virtudes como la **misericordia** y el **amor a los necesitados**, y se perdería el modo de educar en ellas a los niños.
Opina que la **limosna** es un acto de **caridad**, la cual no puede ser una obligación impuesta a nadie.
Rechaza cualquier intento de someter la actividad de la limosna a normas u organización, considerándolo un atentado a la **práctica libre de la virtud** o a la **libertad** en sentido estricto.
Su punto de partida se basa en la **libertad natural**. Añade que, ante cualquier necesidad, los pobres tienen derecho a pedir limosna, pues está en contra de la ley que les prohíbe salir a pedirla.
Para Soto, la principal razón de la limosna eran los **méritos** que el rico limosnero alcanzaba por la “compasión de la fatiga del pobre”. Por ello, para él lo importante era que la limosna fuera abundante, sin importar cómo se empleara.
La finalidad más importante de la limosna para él era que la visión del pobre generara **lástima** en la gente, ablandara sus corazones y los impulsara a dar limosna.
Robles
Presenta una **política institucionalizada** que pretende la **supresión de la mendicidad**.
En cuanto a la cuestión de la limosna, para Robles deja de ser un problema teológico-moral para convertirse en un problema de carácter **social, económico y político**. Para él, las acciones para “hacer el bien” no tienen significado si no resuelven un problema de convivencia terrenal entre los hombres.
Al contrario de la opinión de Soto, quien consideraba que lo mejor era una limosna abundante sin importar el modo de emplearla, Robles opinaba que lo importante era que no fuera más limosna de la necesaria, de manera que su volumen no perjudicara la **aplicación de los pobres en el trabajo**. Afirmaba: “De manera que vale más poca limosna bien empleada, que mucha desordenada y empleada a criar gente dañosa a la república”.
Opina que la pobreza se puede suprimir de dos modos:
- Mediante el **trabajo**.
- Mediante la **vía de la limosna**: destinada a aquellos pobres que no tienen otra solución que acudir socialmente en su remedio. A estos se les dará información y organización, bajo la autoridad pública, sobre los ingresos que puedan obtenerse en medida adecuada para el sustento de los **incapacitados de todo tipo**.
Así, con estas dos formas, Robles busca **suprimir la mendicidad**.
Por otro lado, opina que es necesario que se ponga **orden en la limosna** para que esta “orden” destierre a toda la gente desordenada y dañosa.
Por eso, hay que ordenar la **ayuda a los pobres** y la obtención de ingresos bajo un **principio de justicia**.
Herrera
Su obra, Discurso del amparo de los legítimos pobres y reducción de los fingidos, se presenta en forma de discurso.
En el primer discurso, expone los inconvenientes que se derivan de que los **fingidos** pidan limosna y de las invenciones para quitárselas a los **verdaderos pobres**.
En cuanto a la limosna, se separa de la idea vivista: Herrera es partidario de la **mendicidad autorizada y controlada**.
Pretende acoger a los pobres en **albergues nocturnos** para que, una vez examinados (cuando haya un gran número de casas), a los **pobres “inútiles”** se les dé licencia y orden para salir de la casa a pedir limosna, con alguna **insignia en el cuello**.
Así pues, Herrera opina que los pobres (si son verdaderos y después de examinados) no solo pueden, sino que **deben pedir limosna** por las puertas.
Piensa que es una tarea difícil reunir suficiente limosna a través de terceras personas y que la **mendicidad autorizada** había proporcionado resultados satisfactorios en varias ciudades.
¿Por qué Domingo de Soto estaba en contra del encierro de pobres?
Soto defendía la **asistencia a la mendicidad a través de la limosna** y rechazaba el **encierro de los pobres** en instituciones de beneficencia. Argumentaba que no se puede recluir a nadie en contra de su voluntad, ya que ello atenta contra la **dignidad humana** y la **libertad**. El **pobre verdadero** es libre de pedir. Los pobres tienen derecho a pedir limosna en cualquier necesidad, aunque no sea grave. En caso de duda, se considerará que el pobre es verdadero.
Casas de Misericordia y Albergues de Pobres: Similitudes y Diferencias
Casas de Misericordia
Son **centros abiertos** donde a los pobres:
- Se les proporciona lo necesario para la **subsistencia**.
- Se les **forma para el trabajo**.
- Se les posibilita trabajar en **talleres**, ganando un salario y aportando a la comunidad y a la propia casa.
- Se les imponen unas **obligaciones religiosas**.
Se financian desde diversas fuentes: **donaciones**, porcentaje de entradas a espectáculos, trabajos de los acogidos, etc.
- La gestión se atribuía a **seglares** y la recogida de los fondos a algunos pobres con autorización.
- La **mendicidad en la calle no se potencia**; se avisa a la población de que quien está en la calle es un **pobre fingido**, porque el verdadero lo tiene todo en la Casa de Misericordia.
Albergues
Destinados a los **pobres verdaderos**.
- **Centros abiertos** con libertad para entrar o salir.
- **Administración mixta**: seglares y eclesiásticos.
- Se financian con **impuestos** por representación de comedias o por construcción de casas en la localidad.
- En los albergues, duermen, asisten a misa y tienen una “consigna” para guardar sus pertenencias.
Administración de Ayudas: Vives, Soto, Robles y Giginta
Vives
La administración se realizaba a través de los llamados **cuatro prefectos de los pobres**, hombres de buena reputación encargados de satisfacer las necesidades de los indigentes. Para conocer estas necesidades, dos veces por semana, durante varias semanas, recibían a las personas en situación de pobreza o a quienes tuvieran conocimiento de ellas. Con la ayuda de cuatro **ayudantes de la Iglesia** elegidos por ellos, decidían sobre cada situación. Para proporcionar esta ayuda, se recibían **colectas de la iglesia** y **donaciones particulares**.
Robles
Los **laicos** eran quienes administraban y gestionaban las ayudas públicas, financiadas a través de **donaciones particulares**, **colectas en las iglesias**, **limosnas** (solo para los pobres verdaderos) y **porcentajes de entradas a espectáculos**.
Herrera
La administración era **mixta**: **seglares y eclesiásticos**. Los **pobres falsos** vivían del trabajo, mientras que los **pobres verdaderos** dependían de su limosna. La financiación provenía de **impuestos varios** para el mantenimiento de los hospitales, y existía un **control por parte de las autoridades**.
Giginta
Las casas estaban adscritas al **obispado**. Un **mayordomo** y su mujer eran los responsables de los albergues. Las Casas de Misericordia eran gestionadas mediante la **recogida de fondos** por pobres con autorización y por **seglares**, y financiadas por los **trabajos de los acogidos**, entradas a espectáculos, donaciones, etc.