Funcion didactica de la literatura infantil


  1. La competencia literaria

La competencia literaria es la capacidad de analizar, comprender, interpretar y producir textos literarios o de intención literaria como vehículo que reinterpreta la realidad (Orden del 9 de mayo de 2007). La combinación de distintos saberes dan lugar a la competencia literaria, y estos componentes o saberes que se ponen en práctica en la competencia literaria son:

  • Saberes de tipo cultural (del relejo de la sociedad, de la historia…)
  • Saberes de modalidades del discurso y saberes textuales (géneros, narrador…)
  • Saberes lingüísticos (léxico, morfosintaxis…)
  • Saberes retóricos (recursos para conmover al receptor, arte de manejar las palabras, uso de figuras literarias…)
  • Saberes estratégicos (conocimientos previos a la lectura)
  • Saberes intertextuales (diálogo que establece un texto con otros anteriores, ya que un texto, en ocasiones, hace referencia a otro anterior)
    1. Los objetivos de Educación Primaria

    • Objetivos Afectivos. Tienen que ver con el mundo afectivo, es decir, se trata de que el texto provoque un efecto placentero, toque la fibra del lector; para ello debemos presentar la lectura como un hecho voluntario, motivador, lo que se consigue tratando textos similares a la vida cotidiana, que hablen de problemas relacionados al lector (por ejemplo, las novelas de adolescentes) utilizando diversos recursos como, por ejemplo, la primera persona. El criterio de evaluación para comprobar si el alumno ha alcanzado dichos objetivos es verificar si incorpora la lectura a su vida cotidiana disfrutando de ella.
    • Objetivos Cognitivos. Que sirven para reforzar la inteligencia, ya que al potenciar la lectura, se refuerza el aspecto cognitivo. El criterio de evaluación de este objetivo es verificar si el alumno conoce algunos autores, sabe interpretar textos, reconoce sus argumentos, etc.
    • Objetivos Metalingüísticos (hablar de la lengua a través de la lengua). Cuando el texto sirve al alumno para aprender conocimientos sobre la lengua. El criterio de evaluación es saber si el alumno es capaz de identificar ciertos recursos estilísticos.
    • Cuadro de texto: Ampliación en el texto de la pág. 18Objetivos Ético-discursivos. Objetivos que ayudan al lector a construir su personalidad, sus valores… Su criterio de evaluación sería averiguar si el alumno ha adquirido criterios para seleccionar un libro según sus intereses y sus gustos.

    La adquisición de la competencia literaria (P.18)


    1. La competencia literaria como objetivo escolar durante la década de los setenta

    Esta capacidad no es innata sino adquirida, la escuela se halló ante el interrogante de cuáles son estas competencias, de cuándo, cómo y dónde aprenden los niños y niñas a entender y disfrutar de los textos que llamamos literatura en nuestra sociedad, y de qué se puede hacer para ayudarlos en este proceso.

    1. ¿Cómo se forma un lector?


    La definición del objetivo escolar de formar un lector competente fue ganando terreno durante los años setenta. Concebir la adquisición de la competencia literaria a través del uso de la literatura en la escuela como forma de comunicación. La lectura de libros por puro placer, marginada hasta entonces del horario escolar. El lector literario se forma leyendo literatura. En nuestro país fue la influencia de la pedagogía francesa la que ayudó a introducir actividades de biblioteca escolar y de tiempo individual de lectura en la Escuela Primaria.

    1. ¿Qué textos utilizar?


    Dos grandes debates presidieron la reflexión sobre la literatura infantil en aquella década. Uno de ellos se refiere a la función educativa de esta literatura y tuvo repercusiones en el material literario utilizado para las primeras edades. El otro se refiere a la función literaria y trató de legitimar el uso escolar de estos textos: La polémica educativa se centró en el valor moral de los cuentos populares, debate nutrido por la atención otorgada al folklore, tanto desde los estudios literarios como desde los estudios psicoanalíticos. La defensa de estas narraciones y, más allá, de todo el material folklórico, coincidió en el tiempo con el desarrollo de una nueva etapa educativa: la etapa de Educación Infantil.
    Esta coincidencia otorgó una presencia y un prestigio inmediatos a la literatura infantil de tradición oral en los primeros cursos escolares.

    El psicoanálisis; sus estudios se refieren al efecto de los cuentos sobre la maduración afectiva de los niños y niñas. La polémica literaria sobre la literatura infantil, por otro lado, se centró en la posibilidad de considerar “literatura” a estas obras. No era un debate superfluo si se quería reivindicar su utilización a lo largo de toda la escolaridad.

    1. La ficción literaria como forma de acceso a la experiencia

    Cómo elaboran los niños y adolescentes su experiencia a través del significado de la lectura. Los estudios sobre la adquisición del lenguaje oral durante los años sesenta partieron del análisis de las características externas del lenguaje para destacar cómo los niños aprenden a diferenciar progresivamente el lenguaje en usos diversos.

    La adquisición de la forma

    Un primer resultado de estos estudios ha sido el de destacar que el uso distanciado del lenguaje que requiere el acceso a la literatura empieza muy tempranamente. Hallaron que, ya a los dos años y medio, los niños construyen monólogos en los que interrelacionan la reflexión sobre su experiencia con la contemplación del lenguaje como un juego de repeticiones y variaciones. Sabemos, por ejemplo, que ya a los dos años el setenta por ciento de los niños y niñas utiliza alguna convención literaria en su explicación de historias.

    La relación entre la experiencia vital y la experiencia literaria

    Los lectores pueden asimilar desde un ámbito que es la vez inferior y exterior a ellos (llamado “tercera área” por algunos autores) y donde contrastan y asimilan la experiencia a través de mecanismos de identificación y proyección. Los textos que los niños oyen o leen colocan los acontecimientos en un horizonte más amplio y más ordenado de “mundos posibles”, en que el receptor se ve favorecido por los recursos narrativos y las técnicas interpretativas acumuladas por la comunidad, tales como los mitos, las tipologías de los dramas humanos, etc. Así, por ejemplo, el hecho de que durante los primeros años de vida, realidad y ficción aparezcan como una mezcla sutil contribuye a hacer de la literatura una manera poderosa de extender la limitada experiencia de los niños.

    Cuando los niños y niñas aprenden que las historias son ficción, asimilan que lo son sólo en lo que tienen de específico, mientras que los esquemas de valores recurrentes, las expectativas estables que son parte de la cultura propia, han pasado a formar parte de sus esquemas de conocimiento.

    Esta es una de las muchas maneras a través de las que los jóvenes adquieren valores y las normas de sus adultos. La relación entre la experiencia obtenida directamente del mundo primario y la otorgada por la mediación literaria se hace más compleja a medida que los niños enriquecen su experiencia vital y de lectura.

    1. ¿Cómo se ayuda a desarrollar la competencia literaria?


    Todavía distamos mucho de disponer de una descripción fidedigna de qué conjunto de competencias conforman lo que llamamos “competencia literaria”. Sí que permiten establecer algunos principios básicos de actuación. Los principios subyacentes a estas propuestas revelan el consenso educativo actual de cómo se forma un lector literario y puede resumirse en los puntos siguientes:

    • Hacer experimentar la comunicación literaria. Los niños y adolescentes adquieren competencia literaria en la media en que la comunicación litería está presente y es utilizada en nuestra sociedad. Esto implica crear situaciones que permitan percibir la literatura como una situación comunicativa real y como un hecho cultural compartido.
    • Utilizar textos que ofrezcan suficientes elementos de soporte para obtener su significado y que ayuden a la vez a aumentar las capacidades interpretativas del alumnado.
    • Suscitar la implicación y la respuesta de los lectores.
    • Construir el significado de manera compartida. La interacción entre la lectura individual y el comentario público la enriquece.
    • Ayudar a progresar en la capacidad de hacer interpretaciones más complejas.
    • Interrelacionar las actividades tanto de recepción como de expresión literarias, y tanto en su forma oral como escrita.
  1. Cómo debe ser la educación literaria en el ámbito escolar? Planteamientos didácticos de la literatura según la LOGSE y la LOE

Un enfoque más tradicional de la didáctica de la literatura es aquel que se centra en los conocimientos (obras, autores, estilos…); mientras que un nuevo enfoque propone centrarse más en el hábito lector (presentar al autor en clase, comentar las obras…).

En cuanto al canon, la enseñanza tradicional consagraba un canon de obras que había que leer porque la literatura era cerrada y no se vinculaba con otros artes; mientras que el nuevo enfoque establece que la literatura debe favorecer una visión más amplia relacionándola con otros artes. Atendiendo a los criterios de selección de los textos, antes se daba mucha importancia a los textos clásicos (como Cervantes); pero ahora se tiene una visión más sincrónica, es decir, se leen obras actuales. En referencia a la metodología, antes se buscaba que el alumno comprendiera los contenidos dando una versión definitiva y ahora se busca que el alumno interprete el texto de forma libre.

Actualmente, predomina el enfoque de la estética de la recepción, que se apoya en varios principios; es decir, el lector es el motor de la literatura, por lo que, dependiendo de la sensación que crea la obra en el lector, el autor seguirá por un camino u otro. Los principios del enfoque de la estética de la recepción son:

  • Se tratará de provocar y promover el interés por la lectura, es decir, el mediador tiene que presentar obras adecuadas a los intereses de los alumnos.
  • Promover la interpretación compartida, guiada por el profesor, que se retroalimenta hasta convertirse en la interpretación lectora en una agradable conversación.
  • Promover la interrelación entre las actividades de recepción, reflexión y producción literarias. Buscar la creatividad en la creación.
  • Cuadro de texto: Ampliación en el texto de la pág. 76Promover esta educación literaria como un objetivo común de Primaria que debe ser abordado desde las distintas áreas, es decir, hacer unidades que integren la lectura.
  1. Justificación de la presencia de la literatura infantil y juvenil

La literatura infantil da respuestas a las necesidades íntimas del niño, puesto que conecta con el mundo interior del receptor… En segundo lugar, la escuela debe aproximarse a la vida y la literatura infantil presenta la realidad de la vida, por lo que es una forma de conexión con la vida. En tercer lugar, se puede hablar del folclore… La literatura infantil propicia el aprovechamiento de los elementos folclóricos. Es decir, la literatura infantil es una forma de conectar al niño con el pueblo, la naturaleza… En cuarto lugar, la literatura aporta al niño estímulos lúdicos como un instrumento de motivación para desarrollar el lenguaje; es decir, de una manera natural, jugando, el niño desarrolla el lenguaje.

El desarrollo del lenguaje se aprende mediante dos vías, por imitación y por creatividad personal; y la literatura aporta estímulos para ambas. En definitiva, la literatura infantil en la escuela sirve para descubrir y despertar la afición a la literatura.

Para justificar la presencia de la literatura infantil en la escuela, podemos decir que ésta es un medio de salvaguardar la palabra escrita y oral en un mundo posmoderno.

  1. Rasgos generales del hecho literario infantil

En primer lugar, debemos destacar la invasión de la narrativa por encima de los otros géneros, como teatro, lírica… es decir, el cuento domina casi toda la literatura infantil.

Respecto a los contenidos, la literatura infantil se caracteriza por:

  • La frecuente presencia de elementos no normales (fantásticos, mágicos…); lo que se llama el auxiliar mágico, que traslada el relato a un segundo mundo transformando la realidad o a convertir el mundo primario en uno secundario que se instala en un mundo maravilloso.
  • La tendencia a la personificación, ya que el niño es animista (según Piaget); por lo que es común ver muchos personajes representados, por ejemplo, por animales.
  • La ausencia de complejidad temática, es decir, argumentos sencillos.
  • Una carga afectiva de cada obra.
  1. Orígenes y evolución de la literatura infantil

Conviene la crítica, en general, que para hablar propiamente de literatura infantil debemos ir a finales del S. XVIII y principios del XIX porque fue en ellos cuando se empezó a pensar en el receptor infantil, en el niño; ya que el S.XVIII, el siglo ilustrado, fue un siglo intelectual en el que floreció el didactismo. Por su parte, el S.XIX es un siglo que piensa bastante en el niño dentro de la dureza de la época (la revolución industrial, por ejemplo) que propicia una deshumanización; pero sí que surge una preocupación por el niño.

Por eso cuando, en 1697 (finales del S.XVII), Perrault es el gran iniciador o precedente serio de la literatura infantil gracias a su recopilación de sus ocho cuentos en prosa con sus respectivas moralejas, que es conocido como “Cuentos de la madre oca”. En él aparecen los personajes clásicos como Cenicienta, Pulgarcito, El gato con botas, etc. Son el primer núcleo duro de lo que luego se expandirá como literatura infantil. Perrault es un escritor culto que utiliza el artificio de la pintura para construir obras tradicionales; y el resultado de esta obra es recibida por un público amplio que hace que esta obra gane adeptos y se convierta en literatura popular.

Más tarde, en el S.XVIII aparece el didactismo, la novela pedagógica, etc. Pero es el S.XIX cuando realza de manera extraordinaria la literatura infantil propiamente dicha, donde destacan los hermanos Grim, que toman prestados los cuentos de Perrault pero añaden otros muchos más y los someten a una elaboración importante (ejemplo del texto de Caperucita), amplificarlos, etc. incorporando distintas narraciones que son adaptaciones; por ejemplo, incorporan cuentos de las mil y una noche, pulgarcito, el lobo y los siete cabritillos, blancanieves, etc. formando un repertorio rico y amplio. Estos autores se inscriben en la corriente del romanticismo, que hace volver los ojos a las costumbres populares. En esta misma estela se sitúa el otro gran nombre de la literatura infantil, Hand Cristian Handersen, en Copenague, que hace un repertorio en 1835 para intentar recuperar los cuentos que él mismo ha oído de niño adaptándolo a la sensibilidad romántica destacando, sobre todo, el don de la oralidad, del cuentacuentos, etc. es decir, una serie de recursos para realizar el propio acto de narrar.

Y a partir de ese momento la literatura infantil se va desarrollando, sobre todo, en la Inglaterra del S.XIX. El S.XX vuelve a ser el siglo de la literatura infantil, aunque en España tenemos un cierto vacío durante el franquismo y, durante la segunda guerra mundial, florece sobre todo en Alemania. Se va introduciendo nuevos géneros y el más llamativo es el libro álbum.

¿Cuáles son las funciones de la literatura infantil?


  • Su contribución a formar lo que llamamos el imaginario colectivo, es decir, conjunto de imágenes que hemos interiorizado, regulan nuestra vida, nos sitúan en el mundo; es decir, contribuyen a las bases de nuestra visión del mundo. Teresa Colomer define este concepto como: “Está formado por las imágenes, símbolos y mitos que los humanos utilizamos como fórmulas tipificadas de entender el mundo y de entender las relaciones con las demás personas”. Y en esta formación de nuestro imaginario colectivo intervienen a parte de la literatura infantil, el cine, la escuela, etc. aunque la primera literatura supone una parte muy importante.
  • Contribuir a construir o madurar nuestra personalidad como tal. Bruno Bettheleim, en los años 70, escribe “el psicoanálisis de los cuentos de hadas”, donde viene a reivindicar el valor de los cuentos de hadas; es decir, que estos le ofrecen al niño una serie de arquetipos, de detalles culturales que le hacen afirmarse en el mundo. Porque dice Bettheleim que los cuentos tradicionales plantean conflictos protagonizados por héroes con los que el niño se identifica, representa también problemas que hay que superar para llegar a la felicidad reflejando la vida real, pero reconfortan finalmente con el final feliz.
  • Contribuir a la socialización cultural, es decir, a transmitir valores sociales (ecologismo, respeto a la tolerancia intercultural…), ideologías, que dependen del contexto histórico. Por tanto, la literatura infantil refleja muy bien los valores predominantes de la sociedad en cada momento.
  • Contribuir a la adquisición de las formas literarias, a hacer lectores literarios como primer aprendizaje porque presenta formas sencillas, repetitivas, un esquema muy básico y reconocible que acostumbra a los niños a meterse en la clave de la literatura (de lo que es un género, de lo que es el narrador…).
  • Permite ampliar la experiencia vital, igual que la literatura para adultos. Porque, tanto realismo como fantasía, contribuye a vivir diferentes experiencias enriqueciendo a la persona.

Todas estas funciones se pueden desarrollar en virtud de una característica básica que presentan los textos literarios, la intertextualidad, la conexión siempre con otros textos; ya que un texto dialoga necesariamente con otros anteriores y anuncia otros futuros. Por tanto, la literatura es como una gran red que tiene conexiones entre unas obras y otras. La intertextualidad no sólo es copiar un argumento, sino mencionarla, rehacerla, empaparse de ella. Estos influjos de obras anteriores los reconocemos gracias al intertexto lector, concepto desarrollado recientemente por Antonio Mendoza (uno de los críticos importantes) en un libro que titula precisamente así; este concepto es la capacidad personal e individual de los lectores de relacionar y confrontar nuestros saberes literarios cuando leemos un texto nuevo. Podemos añadir otras utilidades importantes a la … infantil, la más importante sería el aprendizaje de la lectoescritura, es decir, favorece la competencia lectora; y sirve también para conectar los aprendizajes de las distintas áreas, se convierte en un instrumento que potencia la interdisciplinariedad.

¿Cuál es el concepto y la caracterización de la literatura infantil?


Hay un momento en que la crítica se muestra muy reacia a dar un estatuto autónomo a la literatura infantil y juvenil; por ejemplo, un crítico italiano de la escuela idealista llamado Benedetto Croce señalaba a principios del S.XX que el arte para los niños no será jamás verdadero arte porque en las obras infantiles hay elementos extraestéticos (que se salen fuera de lo estético).  A partir de esta afirmación surge una serie de críticos que ha insistido en negar la propia existencia de la literatura infantil, dentro de esta escuela de negación se sitúa otro autor español como Rafael Sanchez Ferlosio que niega tajantemente la existencia de esta que viene a decir que la literatura infantil se caracterizaría por una degradación de la verdadera literatura. Sin embargo, poco a poco, la realidad de los hechos ha subrayado la existencia de esta literatura; por ejemplo, Miguel Delibes ha afirmado que sí que existe. En definitiva, Delibes es el portador entre otros de la existencia real de la literatura infantil.

Concepto de literatura infantil

Partimos del entendimiento de lo que es literatura: conjunto de obras de un país en una determinada época en una lengua y en un género. Grandes clasificaciones dentro de las cuales incluimos todo un gran corpus literario. Rafael Lapesa define la obra literaria como la creación artística expresada en palabras, aun cuando no se hayan escrito. A partir de esta definición genérica, desembocamos en una definición de la literatura infantil porque no es lo mismo; la literatura infantil tiene que incluir algunos subgéneros (libro álbum…) que se escapan a la gran literatura por eso se van sucediendo distintas definiciones:

  • María Bortolussi, “la obra artística destinada a un público infantil”
  • Juan Cervera amplia la definición anterior en 1984, “en la literatura infantil se integran todas las manifestaciones y actividades que tienen como base la palabra con finalidad artística o lúdica que interesen al niño”; es decir, esta definición es mejor porque introduce no sólo el pensar en el niño sino que el niño lo acepte y amplia la finalidad artística a la lúdica.

Hay subgéneros que están en el límite de la literatura infantil.

Se introduce otro concepto, literatura ganada: la gran capacidad que tiene la literatura, con el paso del tiempo, de en un momento determinado no interesar y en otro momento interesar mucho.


1.- Concepto de género literario

Los géneros literarios es el cauce por el que circula el texto literario, es decir, un esquema o forma que ahorma al discurso literario. ¿Cuál es la separación de los grandes géneros literarios? Ya los antiguos dividían las obras en tres grandes géneros literarios: épica, lírica y dramática.

            La épica, hoy en día, se suele denominar como narrativa; y lo que caracterizaba a este género eran las grandes epopeyas (la Odisea y la Ilíada de Homero), luego (en la Edad Media) surgen los cantares de gesta y otros subgéneros narrativos. La épica estaba concebida para narrar historias sucedidas, verdaderas, que tenían que ver, fundamentalmente, con los episodios de la guerra. Posteriormente, llegarán también los géneros cortos como el cuento.

            El segundo gran género es el de la lírica o poesía, que tiene que ver con un sujeto poético, un “yo” poético, que vierte su mundo interior; por lo que caracteriza la lírica es la subjetividad de un “yo” poético.

            Y, por último, la dramática o teatro consiste en la representación de un diálogo llevado a cabo por varios interlocutores; por lo tanto, lo que define al teatro es el intercambio de voces entre varios personajes y que, finalmente, resuelven un conflicto. Es decir, el teatro se presenta como un conflicto que camina hacia su resolución.

Esta división es muy antigua porque la literatura es muy antigua, pero cuando queremos acomodarla a la literatura infantil, naturalmente, deberemos realizar algunas modificaciones prestando atención, sobre todo, al momento en el que el niño es considerado un sujeto independiente (en el S.XVIII). Al hacer dicho traspaso de los grandes géneros literarios a la literatura infantil, algunos críticos descartan varios subgéneros como la tragedia, etc. que no tienen cabida en el mundo infantil y, de igual forma, incorpora otros subgéneros que, en principio, no eran literarios, como el tebeo, los videojuegos, etc.

Así pues, en vez de épica vamos a hablar de cuentos, tanto es así que el término cuento se refiere a casi toda la literatura infantil porque es un término amplio que engloba tanto el cuento literario como el cuento popular como la novela para niños u otros subgéneros más modernos (libros-juegos, tebeo, abecedarios…). Y dentro del término teatro, teatro infantil no sólo incluye la obra teatral en sentido estricto, es decir, la obra teatral escrita por un autor culto para ser llevada a una representación, sino que existe también la dramatización o juego dramático (hacer de algo que no es teatro convertirlo en teatro), como los títeres, juegos de roles, etc. Y en la lírica popular hay rimas, canciones, etc., es decir, material muy vinculado con el folclore.

La primera distinción que tendremos que hacer es la distinción entre cuento popular y cuento literario. El cuento popular es una narración breve ligada al folclore con un tema que, muchas veces, introduce lo maravilloso y fantástico transmitido por vía oral y sometido a distintas reelaboraciones; por otra parte, el cuento literario surge con fuerza en el S.XIX-XX y se caracteriza por una narración breve de asunto variado y temática muy amplia (cualquier tema es susceptible de ser tratado brevemente) realizado por un autor conocido que lo transmite de forma escrita. Es decir, las diferencias se encuentran en la forma de transmitir (oral o escrita), en el autor (anónimo o conocido).

sobre el cuento popular, “Es un relato de tradición oral relativamente corto y con un desarrollo argumental de la intriga que consta de dos partes o secuencias: el conflicto y la resolución de dicho conflicto”. Según Almodóvar, este esquema tan sencillo permite la memorización fácil del cuento para que cualquiera pueda transmitir ese relato de generación en generación por vía oral. Es importante también la noción de arquetipo, que se define como “Una versión reconstruida de un cuento, que explica, de la mejor forma posible, la totalidad de ese relato”; es decir, un arquetipo es una síntesis de las variantes (las distintas formas o versiones que adquiere un relato). Por otro lado, en el cuento popular hay una conexión con el folclore (ciencia que estudia las costumbres y tradiciones de los pueblos, y el conjunto de esas costumbres). La cultura europea de época medieval se preocupa ya por dejar testimonios escritos de todo este material que, realmente, es oral y popular; dentro del folclore podemos incluir prácticas mágicas, remedios para enfermedades, ritos, canciones, poemas, relatos, etc.; precisamente la conexión del cuento con el folclore viene del anonimato, ya que el concepto de autor es un concepto relativamente moderno porque, por ejemplo, hasta la Edad Media no era muy importante firmar las obras con autor. También el folclore conecta con el cuento tanto en cuenta el autor se torna colectiva, en el sentido de que al final todo un pueblo es el que se siente dueño de un relato o una canción porque es este quien la ha ido modelando a través de las dichas variantes; por tanto se habla de anonimato y sentido colectivo. En determinados momentos (por ejemplo, junto a lo nacionalista) se ha potenciado/desarrollado este tipo de literatura popular.

¿Cuáles son los elementos básicos del cuento popular? ¿Cuál es la estructura del relato? Por una parte conviene hacer la distinción entre autor y narrador, ya que no es lo mismo porque el autor es la persona que crea e inventa la historia (colectivo o individual), dueño de la creación literaria, mientras que el narrador es una persona gramatical que lleva las riendas del relato, como punto de vista o personaje literario que se adueña de la voz narrativa (personaje de la historia o fuera de la historia: narrador en primera persona frente a narrador en tercera persona). El narrador en primera persona es un personaje de la historia que cuenta subjetivamente el relato porque la cuenta desde su punto de vista aunque, normalmente, no se da en el cuento popular, ya que este prefiere el cuento literario. Es el narrador en tercera persona el que predomina en los cuentos populares porque cuenta la historia como un observador, por tanto, se distancia de los hechos; y puede hacerlo de dos maneras: puede ser un narrador omnisciente (que lo sabe todo, controla todos los entresijos del relato y selecciona lo que desea contar eligiendo, por tanto, las anécdotas que desea contar) y, por otra parte, el observador externo o narrador en tercera persona que sólo cuenta lo que él puede ver desde su perspectiva externa sin poder adentrarse en el interior de los personajes sin saber, pues, su psicología y sus sentimientos; por lo que es menos potente que el omnisciente porque este sí que conocer los sentimientos de cada personaje.

Siguiendo con los elementos que estructuran al cuento podemos hablar de: el espacio, que se describe como el lugar donde transcurre la acción y donde se encuentra variedad de matices en torno al lugar, ya que puede ser un mero marco que no está demasiado descrito porque no interesa o puede ser un espacio descrito con más detalle; incluso puede ser un espacio real o irreal, puede ser un espacio simbólico. El cuento popular utiliza el espacio como un mero soporte, es muy funcional.

Por otro lado, el tiempo es otro elemento fundamental, ya que es un elemento básico porque va ligado al hecho de narrar. El tiempo es el tramo cronológico que abarca una acción, puede ser un tiempo dilatado/largo o breve. El tiempo del cuento popular es versátil porque hay historias que duran poco tiempo (incluso horas) y otras necesitan un tiempo mayor. El tiempo viene marcado por una serie de elementos delimitadores a través de recursos propios de la narración (la elipsis-un paréntesis de tiempo, por ejemplo).

Los personajes definidos como las personas ficticias que intervienen en la acción. Dentro de la clasificación de los personajes está histórico, simbólico (el amor, etc.). Pero básicamente, en lo que atañe al cuento popular, el personaje se va a caracterizar por ser un elemento plano. La distinción entre personaje redondo y personaje redondo. El cuento literario, por su parte, puede optar por el personaje redondo. El plano es un personaje esquemático, que responde a un estereotipo (el valiente frente al cobarde, el bueno frente al malo). Es aquel que no evoluciona psicológicamente, que siempre es igual. También vamos a encontrar personajes colectivos que se convierten en símbolos.

El argumento será la sucesión de anécdotas o acontecimientos que se narran en un texto. Unido al término argumento está el término tema que es la intención del autor (como el triunfo del bien sobre el mal), que se denominan con sustantivos abstractos; mientas que el argumento son acciones.

Respecto a la estructura, el cuento popular se constituye por dos secuencias de una forma general, también aplicándolo al cuento literario, se suele hablar de planteamiento, nudo y desenlace como esquema del relato. Este esquema se parece también bastante al esquema del teatro, que siempre se ha sometido a una división tripartita. El planteamiento aparecen los elementos básicos del mundo creado por el narrador (presentación de los personajes); en el nudo se narra la complicación del asunto, la trama; y el desenlace es la resolución del conflicto planteado. El cuento popular es que el adopta la estructura más sencilla, una estructura lineal (cuenta las cosas en orden tal y como suceden); sin embargo, conforme el cuento se hace literario, se va perfeccionando, sofisticando, las estructuras se vuelven más complejas utilizando técnicas como in medias res.

El cuento popular como género narrativo

  • Ausencia de descripciones porque predomina la acción.
  • Presencia de fórmulas (frases hechas) que se repiten: de comienzo y de cierre del cuento, la presencia del número tres, y el uso sistemático del pretérito imperfecto de indicativo (había, era…).
  • Personajes unidireccionales, que una sola dimensión y característica; es decir, personajes planos, personajes previsibles.
  • Lección siempre universal que se desprende del cuento popular, que vale para cualquier época y que se centra en torno a la lucha entre el bien y el mal. Dicho tema es el gran tema de toda la literatura narrativa infantil, incluso la contemporánea; y surge, lógicamente, en el cuento popular.
  • Exclusiva aparición de un narrador omnisciente, también llamado heterodiegético.
  • Ausencia de caracterización espacio-temporal; no hay ni un lugar concreto ni un tiempo concreto de la narración.
  • Convivencia entre los elementos naturales, realistas y elementos sobrenaturales, fantásticos produciéndose una confusión entre esos dos mundos (el natural y el sobrenatural). Aquí entra pues el concepto de lo maravilloso. Todomov, teórico ruso, distingue el mundo primario (realidad) frente al secundario (fantasía).

Ampliación con texto de la página 66: Didáctica del cuento infantil – Pedro Guerrero

El carácter tradicional de la Literatura lo adquiere un relato cuando vive en la memoria del pueblo y se transmite oralmente como variante de la forma original y, aunque sea de autor conocido en su origen, la tradición se apropia de dicha forma original y la convierte en creación colectiva que vive a través de versiones. (…)

Títulos de cuentos populares

Son desconocidos actualmente, pero tienen gran carga didáctica. (no hay que memorizarlos, sino es un repertorio de cuentos interesantes)

  • Cuentos de animales
    1. Animales viejos
    2. Batalla del grillo y el león

El lenguaje de los cuentos: Aspectos didácticos

La primera idea asociada al modo de contar cuentos es la dramatización, la tendencia a dotar de dramatismo, de vida al relato utilizando técnicas de dramatización; es decir, acercándonos, de alguna manera, al hecho teatral. Sin embargo, esta no es la mejor manera de contar un cuento.

La mejor manera de contar un cuento es incidir en la pura narratividad, en la forma natural de contar tratando de no desviarse en exceso de la conversación. Hay cercanía al uso de la lengua estándar, una lengua natural y central; es un lenguaje que se acerca al ordinario, pero siempre, al tratarse de literatura, tendrá unos rasgos que lo hagan diferente de una narración ordinaria.

¿Cuáles son los códigos que se superponen en el relato de un cuento?

Por una parte, el código narrativo, por medio del cual se aporta la estructura del relato, es decir, este código aporta estructuración, orden. Un segundo código que aparece en el relato es el código simbólico, es decir, utilizar la lengua como un símbolo que remite a conceptos de la cultura, a la realidad, al folclore. El tercer código es el estilístico, que sirve para filtrar un mensaje por medio de procedimientos estilísticos; es decir, en este código entran a formar parte las figuras literarias, ya que se trata de la función poética de la lengua.

Estos tres códigos que confluyen se insertan dentro de un marco oral, puesto que el cuento muchas veces es leído, pero otras es contado, y provoca en el niño efectos de crecimiento, de educación integral, etc. Pero el efecto evidente es el enriquecimiento de la lengua del niño, ya que por medio del cuento aprende a expresarse. El cuento hace reflexionar muy pronto al niño, aunque sea de forma inconsciente, sobre la morfología de la lengua; puesto que el niño interioriza, sin darse cuenta, conceptos como la derivación (uso de sufijos apreciativos), la homonimia (juego con las palabras que se parecen), la metonimia, así como cuestiones de género y número. Lo mismo cabe decir de la fonética gracias a la lectura de dichos cuentos en voz alta, lo que llamamos la eufonía (el buen sonido), ya que en el relato infantil se juega mucho con los sonidos; tanto es así que podríamos decir que importa tanto como el contenido del cuento. Todos estos aspectos contribuyen, poco a poco, al aprendizaje del niño.

El cuento, al tener una estructura cercana a la conversación, sus aspectos didácticos se funden con la afectividad, es decir, hay una invitación a la humanización, al cultivo de la vida interior, ya que el cuento trabaja las emociones y estimula el pensamiento divergente (partiendo de la puesta en contacto del cuento con el receptor, surgen baterías de actividades que trabajan transversalmente en la adquisición de los aprendizajes).

Ana Penegrin (autora de La aventura de oír) señala objetivos didácticos para la transmisión del cuento, que ella los relaciona con la expresión corporal, dentro de estos (ejercicios para plantear actividades a partir de la lectura de cuentos):

  • Expresar o reconocer diversos personajes mediante la manera de andar, etc.
  • Expresar personajes mediante gestos, onomatopeyas, etc.
  • Expresar personajes contrarios (el bueno y el malo)
  • Jugar a transformar personajes
  • Asociar palabras al movimiento
  • Hacer mimo con los personajes
  • Jugar a reconocer personajes por el gesto y por el movimiento
  • Reconocer las partes del relato a través del gesto y el movimiento

Para conocer las partes del relato a través de la expresión plástica, por ejemplo:

  • Dibujar personajes y situaciones de los cuentos oídos
  • Asociar palabras a los dibujos realizados
  • Organizar los dibujos en secuencias y construir el cuento oído
  • Construir un mural con los dibujos realizados
  • Realizar gráficos de las onomatopeyas de algunos cuentos o personajes
  • Construir un collage con los personajes y las imágenes de los cuentos maravillosos

El tercer bloque de objetivos que señala Ana Peregrín serían los juegos dramáticos, la dramatización. Y dentro de estos tendría cabida:

  • Distribución de personajes
  • Sonorizar un cuento grupalmente (contarlo entre varios)
  • Escenificar el cuento de forma improvisada
  • Construir el cuento y representarlo, de forma lógica tras haber hecho un esquema previo
  • Construir el espacio con sus elementos
  • Construir accesorios para el reconocimiento y el juego de los personajes

A partir de aquí, se podría precisar más elaborando un listado de actividades mucho más complejas.

Si tuviéramos que quedarnos con un libro que recoge de una forma sugerente todos los aspectos didácticos de los cuentos infantiles, tendríamos que acudir al libro Gramática de la fantasía, de Gianni Rodari.

Actual narrativa infantil y juvenil

Lo que va a caracterizar esta literatura serán los cambios sociales y los cambios de valores, que se refleja en la literatura con nuevos temas y autores. En cuanto a las características de los contenidos, de las nuevas narrativas lo que más salta a la vista es:

  • La ampliación de temas asociados a los cambios que están ocurriendo. Así por ejemplo, temas como las minusvalías, el acoso escolar, la discriminación racial y sexual, el dolor, la muerta y la enfermedad, etc. Estos temas aparecen en la literatura a la vez que se difumina el mensaje pedagógico. Aunque encontramos novelas que no es tan importante un mensaje de tipo didáctico.
  • En cuanto a lo formal, encontraremos mucho cuidado y una elaboración muy buena, y también tenemos el polo opuesto, obras que se producen a toda pastilla que se producen para vender, es decir, una obra instrumentalizada porque se adapta al mercado de ese momento, por eso no tiene tanto cuidado por lo material, no son libros tan elaborados.

Asistimos también a la producción de nuevos géneros, como por ejemplo los libros juego, los libros interactivos, que serían historias multimedia. El libro álbum como gran fenómeno. Ficciones audiovisuales y digitales que es lo que caracteriza en cuanto a las formas.

En cuanto a los contenidos:

  • Hay cambios de valores que se  reflejan son valores que surgen al calor del desarrollo industrial, es decir, el progreso económico, el cierto enriquecimiento de las clases medias. Lo social siempre influye en lo literario. Antes siempre se reflejaba la lucha por la vida, y ahora con sociedad más o menos abastecidas los problemas se desplazan a la vida íntima, el conflicto es interno. Son más problemas personales, entonces la literatura va a verbalizar la temática personal, la adaptación personal a los cambios externos, el problema de la autoridad personal.

Teresa Colomer sintetiza todo esto de este modo:

Por una parte de representa a la vida como placer y no solo como sufrimiento, además se insiste en las diferencias individuales, es decir, el respeto a la raza, es como una defensa a la libertad individual en el ser humano. También es característica la introducción del pacifismo y la ecología, así mismo el respeto a la naturaleza.

Otro contenido que aparece recreado literariamente sería la aceptación de la complejidad de los conflictos, es decir, presentar conflictos que no siempre se resuelven de una forma convencional (final feliz), dar a entender en la vida que no todo siempre sale como se quiere.

Apuntes para una educación literaria en la adolescencia

En consecuencia, y para ir resumiendo:

  • Existe una biblioteca fundamental para la adolescencia que nadie ha constituído todavía, pero que se halla dispersa y, en bastantes casos, inasequible.
  • Debería hacerse un esfuerzo coordinado entre instituciones y editoriales para darle forma a esa biblioteca y ponerla al alcance de los alumnos que van a emprender o están emprendiendo la Educación Secundaria Obligatoria.
  • Ofrecer al profesorado de Reforma cursos específicos de adaptación al aprendizaje creativo en las múltiples lecturas del universo semiótico de nuestros adolescentes: oralidad, sistemas audiovisuales, publicidad y prensa, principalmente; teniendo como objetivo constante el descubrimiento de la poesía, en su más amplio sentido.
  • Hacer compatibles estas estrategias con la presencia de escritores vivos en centros y bibliotecas.

En suma, tomar la educación literaria como un verdadero código intercambiador de sistemas, en un mundo acosado por la significación aleatoria; esto es, como un referente continuo al que reducir todos los demás lenguajes abusivos y desmotivadores.

10/04/14

  • Tendencia realista que se plasma en al psicoliteratura, inrapsíquica, realismo familiar…

El realismo psicoliterario corriente que aborda la construcción de la personalidad juvenil-infantil, es decir, el camino de maduración que se consigue a través de las relaciones familiares o interpersonales. El niño es el protagonista y madura haciéndole frente a los problemas.

Hay más temas comunes, como los celos, la transgresión de las normas (por ejemplo, en “Lily, libertad” de Gonzalo Moure), las relaciones familiares y de pandilla (por ejemplo, en “Manolito Gafotas”), la transición de la adolescencia a la vida adulta (por ejemplo, en la novela “El yacer cansino” de John Robinson Sánchez). Otro tema representativo es el descubrimiento del otro o de las diferencias del otro (en, por ejemplo, “El síndrome Mozart” de Gonzalo Moure también).

En relación con este realismo psicológico podemos anotar otra tendencia también realista, que podríamos llamar realista social; es decir, desde una perspectiva de denuncia social, que intenta anotar las lacras de la sociedad, conflictos que acechan a la sociedad. Por tanto, se busca una reflexión del adolescente o el niño sobre los problemas que asolan a la sociedad actual, evitando en lo posible el didactismo; es decir, los buenos autores evitan dar moralejas, pero inevitablemente en este tipo de narrativa (de crítica social) se da un mensaje social. Las líneas temáticas de relación con lo social serían:

  • El antiautoritarismo
  • El ecologismo y el pacifismo
  • Denuncias de la marginación social, desigualdades, conflictos sociales, injusticias…
  • El racismo y la xenofobia (en, por ejemplo, “Romanies” de Marta Osorio, escritora que ha escrito ocho o diez narraciones sobre el mundo gitano)
  • Culturas amenazadas o pueblos amenazados
  • Esclavitud infantil

Es decir, temas candentes que marcan la injusticia del mundo actual en medio del gran progreso. Y estos temas son los que pretende captar esta moderna literatura infantil.

También dentro del realismo, en una tercera línea, se desarrolla el género de aventuras imitando, por ejemplo, “La isla del tesoro”, “Los viajes de Gulliver”, etc. Actuales autores siguen en esa línea, por ejemplo, Gisbert, Climent, etc. En el fondo de todas estas narraciones modernas de aventuras subyace el género clásico de narraciones de aventuras, en las que destacan, por ejemplo, autores como Julio Verne.

El modelo histórico es una narrativa que se basa en esquemas populares, en buscar una intriga que atrape desde el principio hasta el final. Este género histórico, en España, tiene una línea que sería la memoria histórica que se centra, muchas veces, en la guerra civil española, en verla desde distintas perspectivas; por ejemplo, un autor básico sería Juan Farias, que trata la guerra civil y sus consecuencias (la censura, al injusticia, etc.), y su título más conocido es “Años difíciles”. También el aragonés Fernando Lalana, que últimamente se ha especializado en este género. Otros autores serían Concha López, José María Merino, entre otros.

Como quinta línea que tocan los autores realistas de la última narrativa infantil y juvenil en España hay que citar el género policíaco o de misterio, que van unidos dando cuerpo a narraciones en las que aparece la investigación policíaca, el misterio, etc. Y se busca alterar el orden cotidiano, el miedo, la intriga para atraer la atención del lector. Una de las primeras novelas policíacas entre jóvenes sería “No pidas sardinas fuera de temporada”, de dos autores catalanes, Martín y Ribera, que firman siempre sus obras conjuntamente, que dio lugar a la continuación de la serie Flanagan. Este género tiene mucho enganche con el receptor juvenil. Destaca también Elia Descansino, el propio Fernando Lalana, etc.

TERMINAMOS LA NARRATIVA Y VAMOS A INTRODUCIR BREVEMENTE LA POESÍA

En el género de la lírica, aparecen características generales como:

  • Tendencia a la interiorización, es decir, se trata de un discurso subjetivo en el que en seguida aparece un “yo” lírico y poético fuerte, que es el punto de vista. El hecho de que predomine la subjetividad hace que la poesía tenga una… Gran carga emocional que se expresa de forma breve e intensa, por tanto, hay… Brevedad e intensidad emocional.
  • No hay una trama que contar, no hay una historia que contar, sino que se trata de una anécdota que provoca emoción.
  • Frente a un desarrollo expositivo de hechos propios de otros tipos de textos, en los líricos se profundiza en un solo aspecto porque no hay desarrollo expositivo.
  • Se verifica también de una manera muy evidente lo que se llama la función estética o función poética de la lengua (Jakobson hablaba de la función estética de la lengua). En la poesía, por encima de otros géneros literarios, se evidencia esta función porque la lengua llama la atención sobre sí misma a través de recursos expresivos llamativos, es decir, se sale de la norma de la lengua estándar independientemente del contenido (como metáforas, repeticiones, juegos de palabras…) Esta función poética con lo que se llama connotación porque sugiere muchas interpretaciones añadidas (tu cuando lees una poesía te puedes quedar un significado más o menos literal, pero en seguida añades otras ideas y otras sensaciones que te evoca la poesía en sí misma).
  • Tendencia a la versificación porque mayoritariamente la poesía la reconocemos, desde el punto de vista externo, por el verso; aunque también hay prosa poética, es decir, poesía en prosa. Esta poesía en prosa consigue también mucho ritmo a base de estructuras sintácticas repetidas, etc. Pero, por regla general, hay tendencia a utilizar los versos como forma de llamar la atención sobre la expresión, ya que siempre que hay verso hay un trabajo artesanal de la palabra.
  • Finalmente, hay un ritmo y una musicalidad. El ritmo se consigue a través de estructuras repetitivas cuando el poeta introduce una serie, por ejemplo, de tres adjetivos, cuando utiliza la anáfora para repetir la primera palabra de un verso y del siguiente, cuando introduce la rima, cuando introduce el cómputo silábico (el mismo número de sílabas). Estos rasgos son esenciales en la poesía.

Todos estos son rasgos de todo tipo de poesía, peo si descendemos a la poesía infantil, se ha discutido, como siempre, si se puede hablar con propiedad en sentido estricto de una poesía infantil. Normalmente, se acepta que sí y los autores apelan al folclore porque hay una conexión fuerte con la poesía del folclore (como las nanas) podemos asociar a la poesía infantil. Todas las poesías infantiles son fácilmente asociables al juego porque el niño crece en el juego (canciones de comba, retahílas para jugar a las tabas, etc.). También dicen los autores que apoyan la existencia de una poesía específica infantil, que el niño es un poeta en ciernes (en potencia).

Vamos a explorar de forma rápida y ligera (comprobar con los textos) un repaso a los distintos subgéneros poéticos

Señalamos una división entre:

  1. Poesía popular infantil

Dentro de la poesía popular infantil se han señalado algunos subgéneros inevitables, que son:

  • El de la adivinanza, que se suele definir como un texto poético que plantea un juego intelectual que busca interpretar una representación verbal de carácter críptico (escondido), de objetos personas, animales o cosas, para la solución se reclama o se pide una ejercitación lingüística por parte del receptor. Es un recurso muy interesante para la didáctica de primaria porque se construye por medio de recursos estilísticos, de figuras literarias. ¿Cuáles son esos recursos literarios que podemos encontrar en la adivinanza? La metáfora, la polisemia, la homonimia, la antítesis, la comparación, la anáfora, la paradoja, la exageración, el diminutivo, el calambur, las onomatopeyas, etc. La adivinanza tiene objetivos didácticos indudables puesto que, por una parte, sirven para observar la realidad (porque las palabras que hay que adivinar pertenecen a la realidad o al mundo en el que vive el niño, aunque siempre se decanta por la naturaleza) y, sobre todo, reflexiona sobre la lengua (porque es un juego metalingüístico).
  • El trabalenguas es un tipo de burla poética donde el emisor propone un texto de difícil pronunciación, normalmente, grupos consonánticos difíciles, palabras largas, compuestas, inventadas, construidas a partir de la derivación, la repetición, expresiones ilógicas que no tienen sentido. También se trata de proponer este enunciado con el fin de que el receptor se equivoque provocando la risa o burla de los demás. Es una poesía destinada al grupo, lo que se llama la performance, para ser representada y el público se divierta. Así pues, se formula como un reto propuesto al destinatario con la finalidad de la burla. Los objetivos y las aplicaciones y los beneficios didácticos en el aula de este subgénero, aporta al niño flexibilidad y fluidez en el habla (es un claro ejercicio de logopeda), además podemos decir que el trabalenguas es una ocasión para la pronunciación correcta por parte del niño, en tercer lugar actúa como elemento preventivo para corregir defectos de la pronunciación, sirve también para trabajar el oído (afinar el oído), contribuye al descubrimiento de imágenes sonoras, sirve para progresar en la expresividad, ejercita la memoria musical, puede servir también como juego psicomotor (para trabajar la psicomotricidad), pero lo más importante es que mejora la pronunciación; es un instrumento que trabaja directamente en la recta pronunciación de la lengua porque pones al niño en una situación de tener que concentrarse en la lengua y en su pronunciación en una tensión total porque está delante de sus compañeros. Algunas figuras usadas en el trabalenguas son aquellas figuras que afectan al plano fónico, como la onomatopeya, la aliteración, la derivación, etc.

-Hay distintas modalidades de fórmulas de juego:

La primera es el juego hogareño, que son dichos que se formulan, se cantan y consisten en decir bromas, hacer movimientos. Y así por ejemplo tenemos juegos hogareños El niño sobre las rodillas.

Dentro de estos juegos, hay fórmulas que consisten en hacer rabiar al niño, o para asustarlo. Estimulan al niño, a base de movimientos.

Una segunda modalidad serían los llamados juegos de motricidad y acción, son juegos infantiles pero un poco superiores a las anteriores, el niño necesita moverse, necesita estar en permanente acción. Entonces inventan estructuras poéticas para encauzar el movimiento. El escondite inglés… En esta misma gama, introducimos el juego a la pata coja, también para balancearse entre parejas estar de espaldas con los brazos entrelazados, la silla de la reina, el juego de esconder la china en la mano, etc.

La tercera modalidad serían las retahílas, son una enumeración de expresiones que a muchas veces no tienen sentido. Por lo tanto, el folclore abunda en este tipo de enumeraciones ilógicas. Muchas veces, ciertas enumeraciones se usan al servicio del niño con una utilidad didáctica (para caminar, etc.). Juegos para saltar a la comba (que tiene una utilidad didáctica, saber contar y empezar a enumerar).

Hay una fórmula nueva, que te ofrece una propuesta (cuando son las una… cuando son las dos…).

Una cuarta modalidad, serían las fórmulas de sorteo, consiste en recitar rítmicamente el texto, señalando sucesivamente a las personas que participan en el sorteo y aquel que coincide con el último número de esa enumeración es al que le toca la suerte.

Obliga a una correcta pronunciación, ya que son estructuras muy cercanas al trabalenguas.

En el mismo nivel del trabalenguas y la adivinanza hablaremos de las nanas, siempre se han querido ver como una manifestación de diálogo de la madre con el niño (siempre se ha unido a la visión femenina), como un cauce para expresar ternura al niño. Se ha relacionado con las sociedades agrarias o primitivas, y las mujeres tenían que ingeniárselas para dormir al niño.

Esta fórmula consiste en darle una invitación al niño para que duerma, este género poético muestra la intertextualidad que hay entre los distintos subgéneros poéticos porque, por ejemplo, hay algunas que contienen estructuras de villancico.

La nana contiene todos los elementos característicos de vocabulario infantil como las interjecciones, también contiene elementos como la amenaza y el miedo (el coco).

Hay autores importantes como López de Vega, Alberti, Luis Rosales…

Otro género es el villancico, que se une a la posada y a los aguinaldos, que son modalidades del villancico, de canción juvenil dedicada a la navidad. Puede adoptar distintas estructuras tróficas, son siempre canciones de navidad centradas en el portal de Belén que sugieren escenas de adoración al niño Jesús, presentan frecuentemente una estructura dramatizada, tienen un aire festivo y yace desde abajo una visión idealizada de la naturaleza como la literatura pastoril.

El villancico transporta esta visión idílica, pero al ser un género infantil incorpora toda la estructura infantil e incluye juegos también, la extrema importancia de las interjecciones (bum bum bum), es un género dinámico que viene acompañado de la música y el juego.

Introduce casi siempre el toque humorístico, también el anacronismo (describir acciones fuera del tiempo en que paso).

Una modalidad del villancico serían las posadas, que se caracterizan por la dificultad que tienen, consisten en el rechazo de una petición.

Otra modalidad sería el aguinaldo, mucho más abundante que la posada, que hoy día se mantiene vivo porque sigue asociado a diferentes prácticas que vemos en algún momento de nuestra vida, por ejemplo Halloween que mantiene una petición de caramelos. Se trata de pedir comida para celebrar una comida.

Se suele celebrar con la navidad aunque actualmente se sale fuera del ciclo navideño.

Pasamos a otro gran subgénero, las oraciones religiosas, es decir, los rezos que se formulan en verso y quieren adaptarse al niño. Se caracterizan por invocar u ofrecer cosas a los seres superiores (niño Jesús, la virgen, San José y los Ángeles).

  1. Poesía de autor

Muy próxima a la poesía popular. Se nutre de la poética que suministra lo popular.

Poesía infantil de autor: carácter lúdico, poeta tiene que considerar el ingrediente del juego. (Lorca para niños, Machado para niños…). Colección Latorre, especialista en poesía infantil.

Autor ejemplar: Gloria Fuertes, retorica de la poesía infantil.

Autores interesantes: Lope de Vega, Rafael Alberti, García Lorca, Ángela Figuera, J.Luis Hidalgo, J.Ramon Jimenez, Machado…

Toda aquella poesía que ha sido escrita por un autor, incluyendo la escrita por niños. En la poesía española encontramos que los poetas hacen poesía para los niños.

La lirica de autor esta bastante conectad a la lirica popular (nanas, acertijos, trabalenguas, etc.).

La tendencia al didacticismo que se plasma en el poema didáctico. Se convierte en una pequeña lección.

El gusto por la conjunción interdisciplinar. El didactismo lleva más allá al intentar difundir varias disciplinas en la poesía.

La clave de la poesía infantil esta en lo lúdico y humorístico. La función lúdica es la propia del poeta y del niño. Se trata de inventar una retorica de imágenes con una rima provocativa. Lo lúdico a veces se presenta  también tipográficamente.

28 de abril

  1. Poesía Infantil

Introducción

La poesía infantil comprende tanto la poesía escrita para niños expresamente, como la que no está escrita para niños pero puede interesarles. Hay también poetas específicamente para niños pero también tienen obra poética para adultos, Gloria Fuertes, Carlos Murciano. El buen poema es el que consigue conmover al niño, el poema infantil es el que pudiendo hablar de árboles o pájaros, recibe un estímulo nuevo. Como regla general, podemos decir que las características de la poesía infantil de autor conectan con la estructura de la poesía popular. Conectan con una oralidad esencial. Recursos que aparecen: repeticiones, estribillos, versos cortos, rimas reguladas, personificaciones comparaciones, metáforas…

Características:


  • Una primera característica trata del ritmo. Que el poeta cree ritmos propios. Muy llamativos que presentan una intensidad especial.
  • Este ritmo se consigue mediante el uso de determinadas combinaciones métricas, a través de la medida de los versos y las rimas.
  • Es expresiva y llamativa la selección de las palabras y de los campos semánticos.
  • El ritmo se compone a través del uso de estructuras de corte repetitivo. Pueden ser de varios tipos:
  • basadas en la enumeración del enunciado.
  • Se consigue también mediante el encadenamiento de elementos.
  • Mediante estribillos.
  • Otros tipos de repeticiones como sonidos (Aliteraciones, paranomasias), de palabras (paralelismos sintácticos).
  • Uso de un vocabulario comprensible, que el niño comprende que es adecuado al destinatarios. En medio de este vocabulario común se puede insertar palabras nuevas en la órbita del juego. Presencia de diminutivos sin abusar.
  • La insistencia en el uso frecuente de recursos estilísticos concretos. Uso frecuente de determinados recursos estilísticos, mayoritariamente el epíteto, personificaciones o prosopopeyas, comparación, metáforas.
  • Uso de una métrica variada pero con predominio de ciertos rasgos que se van a repetir.
  • Preferencia por el verso de arte menor.
  • Tendencia hacia variedad silábica, versos con distintas medidas en un mismo poema. El que más se repite es el octosílabo y el hexasílabo.
  • Predominio de la rima asonante sobre la consonante.
  • Aparece el uso del verso libre, no sujeto al cómputo silábico.
  • Estrofas clásicas como la cuarteta (abab), la redondilla (abba), el pareado (dos versos que riman aa), el romance (octosílabos con rima asonante pares quedando libre los impares).

UTILIDADES DIDÁCTICAS DE LA POESÍA INFANTIL

Siguiendo a Isabel Tejerina, vamos a enumerar algunas actividades que se desprenden de forma natural para el aula natural sobre la poesía.

  1. Desplazamiento de letras, consiste en buscar términos dentro del poema en los que cambiamos el lugar de algunas letras o sílabas para encontrar distintas palabras.
  2. El juego de las palabras capicúa, encontrar palabras que al darle la vuelta signifique lo mismo.
  3. Las palabras escondidas, palabras que en sí mismas contienen otras diferentes.
  4. La poesía visual,
    1. los caligramas, jugar con el dibujo con la disposición gráfica del texto, reproducir el objeto al que alude el poema.
  5. Actividades de imitación y transformación de poemas,
    1. El poema incompleto, suprimir a un poema ciertas palabras y darle al niño para que lo complete con palabras suyas.
    2. Homosintaxismo, mantener la misma sintaxis.
    3. El método S+7, consiste en sustituir cada uno de los sustantivos importantes que aparecen en el poema por el séptimo sustantivo que le sigue en el diccionario.
  6. Otra técnica didáctica, la creación libre, más libertad para la composición y la escritura. A través de ejercicios como:
    1. los encadenamientos (verso final de cada verso inicia el verso siguiente),
    2. hacer una composición que repite la siguiente estructura (un primer verso indica el protagonista, el segundo verso alude a la cualidad que presenta este protagonista, en el tercero y cuarto versos se escribe un predicado y un quinto verso constituye un epíteto final).
    3. El poema verbal porque es un poema colectivo que lo van haciendo los niños pero que presenta un requisito previo que es que tienen que presentar una estructura verbal siempre idéntica.
  7. Explotaciones didácticas a través de opiniones personales. Actividades relacionadas con preguntas de comprensión.

LIBRO ALBUM:


En todo el material literario la parte gráfica es muy importante, pero en el libro álbum es su característica principal. El formato del libro, el material en el que esta escrito, la tipografía del libro, las gamas cromáticas que se utilizan en las ilustraciones (suelen no ser inocuas); en el libro álbum todo tiene su significación.

En ocasiones también hay presencia de bidimensionalidad (dos dimensiones en el mismo plano), también puede aparecer el “POP-UP” esto significa que en el libro aparece algún desprendible o algún tipo de ventana con la que el niño puede interactuar.

Este género muchas veces es comparado con el arte visual o incluso es comparado con el cine.

Hay algunos libros álbum que solamente presentan imágenes y cuentan la historia a través de los dibujos, estos están destinados a alumnos de muy corta edad ya que carecen de los conocimientos necesarios para la lectura. Lo más normal es que el libro álbum combine imagen y palabras, ya que es una unión fructífera y da un resultado nuevo, la imagen contribuye a ahorrar palabras y economizar datos.

Como en cualquier texto literario se produce de forma extraordinaria la función poética o estética, esto sucede con la unión de la imagen con la grafía que despierta en el lector sensaciones magníficas. De todo esto se desprende una lectura compleja, los dos códigos suponen múltiples formas de lectura y de interpretación. El resultado es una polifonía ya que funde el texto con la imagen.

En el libro álbum es muy importante el ilustrador, a veces es el mismo escritor, otras veces la vocalización del propio escritor aparece luego. También importa mucho la estética de los libro álbum, podríamos hacer un estudio para ver cuál es la estética que predomina. El estilo comunica el mensaje. No es lo mismo libro álbum que libro ilustrado. El libro ilustrado suele tener un gran tamaño, cuida mucho la ilustración. El libro ilustrado está sujeto a varias técnicas. En el libro ilustrado, la ilustración no es más que un complemento, pero diferente al libro álbum.

El libro álbum se habla de género híbrido, ya que es el resultado de la unión del código lingüístico (palabras) con el código icónico (imágenes). Tanto las palabras como lass imágenes se utilizan para crear una atmósfera en la que poder representar a los personajes o situaciones, para enfatizar, para determinar los tonos, para insertar diferentes puntos de vista de la narración. El buen libro álbum relaciona los dos términos de forma dinámica, no estética. Lo amplia y lo potencia en lugar de anularlo o minimizarlo.

Se suele hacer una clasificación en función de las palabras e imágenes. Encontramos 3 tipos de libro álbum según este criterio:

•          Texto comprensible por sí mismo y las imágenes lo que hacen es ilustrar al texto. Se diferencia en que no es total, pero tiene tendencia hacia la ilustración.

•          Complementariedad: la historia que se nos presenta se encuentra parte en el texto y otra parte en las imágenes, por tanto ambos códigos se complementan para contar la historia.

•          La imagen ofrece una información extra a la que nos da el texto, no son necesarias para mantener el hilo de la historia, pero aportan aspectos secundarios del texto. Cuando observamos este género, observamos que las imágenes suelen diferir con el texto (unos tienen mayor número de imágenes, otros mayor número de texto, otros tiene equilibrio entre imágenes y texto, y otros solo disponen de imágenes).

TEMAS:


 La temática suele ser la misma que en la literatura infantil (conducta, comportamiento moral, etc.) estos temas aparecen en toda la literatura infantil y en el libro álbum.

“Donde viven los monstruos” gran éxito que trata sobre las relaciones de los padres con los hijos, los temas tratan en torno a la vida familiar. En cuanto al destinatario, hay una ambivalencia (dos receptores; padre e hijo) en el libro álbum este aspecto se nota mucho. Este género sintetiza los temas trascendentales que preocupan a todos los públicos. Temas relacionados con el amor, la vida en familia, el vivir cotidiano… aunque también pueden añadirse hechos fantásticos.

Para finalizar, el listado de criterios para seleccionar un buen libro álbum es:

1.    Paratexto


Esto quiere decir todo aquello que rodea al texto. Cubierta y contracubierta atractiva para el lector y coherente con el resto del álbum. Las guardas tienen que guardar la estética. La encuadernación debe ser resistente. El tamaño y el tipo de letra también es muy importante.

2.    Preguntas relacionadas con las ilustraciones


Deben de ser entendibles, deben tener coherencia. También deben ser atractivas y expresivas, capaces de sugerir si suscitan sentimientos, si ayudan a crear ritmo.

3.    Relato


La trama es imaginativa y original. Logra la identificación del autor infantil. La estructuración debe de ser lógica. La elipsis debe ser interpretada por el destinatario. El final de la historia debe de resolver la trama.

4.    Estilo


Se hace evidente la función poética de la trama. El estilo presenta sencillez pero sin caer en la ramplonería. Adecuación del vocabulario.


El Teatro infantil

No está muy clara la divisoria entre el teatro infantil y el teatro normal.

Rasgos o características específicas del género teatral:

  1. Inseparabilidad de texto y representación


    Esto quiere decir que el texto gramático está concebido para la representación, no tiene sentido si no se representa. Cuando el lector se enfrenta a un texto teatral, el lector le añade la imaginación de la representación.
  2. Plurimedialidad, muchos códigos, se entremezclan distintos códigos. Esta vinculación entre texto y representación implica que se utilicen varios códigos, el verbal e importantes son también los códigos extra verbales (decorado, maquillaje, vestuario, mímica, gesticulación).
  3. Colectividad tanto de la producción (emisión) como en la parte de la recepción


    Dicho de otra manera, cuando una obra se pone en el escenario hay varias personas que están en la producción en el papel de emitir los mensajes, y varias personas que lo reciben (público). Cuando el autor de verdad se pone a escribir una obra tiene que tener cuenta la producción colectiva y la recepción colectiva.
  4. Autarquía del drama


    El drama por sí misma es autónoma, autosuficiente. En el sentido que se produce la ficción aparente de que el drama prescinde del autor y del público, es decir, una vez que echa a rodar la presentación parece que el autor ya no existiera y que el público, aunque no intervenga, la obra sigue adelante, se produce una ficción de autosuficiencia de la obra.
  5. Doble sistema de comunicación


    Por una parte, se comunican entre sí los personajes, hay una comunicación escénica entre las figuras o personajes. Por otro lado, está la extra escénica, es decir la comunicación que se produce entre los actores y el público.
  6. El tejido textual de la obra teatral es el dialogo, diálogo dramático. Esta constituido esencialmente por el dialogo.
  7. La ficción del drama y de la representación


    Es decir, hay un pacto de ficcionalidad entre el autor y los espectadores, mediante ese pacto los actores actúan como si fuesen de verdad las personas que encarnan. El espectador acepta y asume que esos actores encarnan personas. Del mismo modo, también hay una aceptación de que el escenario se convierte en el espacio que propone el autor.

Todas estas características, nos ponen de manifiesto que le género teatral es muy distinto de los otros géneros literarios.

Conceptos en relación con el teatro infantil

El teatro tiene una dimensión antropológica, es decir se relaciona con los ritos primitivos, con el deseo de cambio que tiene el ser humano, en este sentido, se vincula a un origen mágico.

Isabel Tejerina dice que el teatro es ceremonia y arte de representación.

Por otro lado, el teatro es conflicto, fuerzan que luchan, acción. El origen etimológico de la palabra drama, significa acción. Dotar de acción a un texto.

Cuando hablamos de teatro infantil, tenemos que ponerlo en relación con el juago que es una actividad lúdica más o menos espontánea, y es también una actividad que desarrolla la expresividad y que estimula la formación integral.

Conviene poner de manifiesto la diferencia entre dos conceptos:

  • Dramatización.
  • Teatro.

Normalmente, como docentes, nos vamos a encontrar con el concepto de dramatización.

Vamos a observar diferencias en cuanto a los participantes.
La dramatización tiene participantes que son jugadores mientras que en el teatro son actores con mayor o menos profesionalidad.

Una segunda diferencia es, respecto a los participantes, en la dramatización los jugadores que actúan y los observadores se alternan. El jugador puede pasar a observador y viceversa. En cambio en el teatro no puede haber alternancia, en un lado están los actores y en el otro el público. Está muy dividida la zona de la representación con la de la recepción.

Otra diferencia, respecto a sus peculiaridades, la dramatización es expresamente pedagógica, educativa y lúdica. En la dramatización hay un placer espontáneo, se busca pasarlo bien mientras que en el teatro se percibe un trabajo previo que va encaminado al logro artístico.

En cuanto a los medios, la dramatización echa mano a técnicas diversificadas puestas al servicio del juego. En el teatro, hay un uso seleccionado de técnicas propiamente teatrales subordinadas a un proyecto artístico.

En cuanto al texto propiamente dicho


En la dramatización es un texto improvisado, si hay un guion pero sobre ese guion surge la aportación personal, variación. Sin embargo, en el teatro, hay un texto previo que exige una memorización fiel o exhaustiva.

En cuanto al ritmo, en la dramatización es un ritmo libre que se va creando espontáneamente, a diferencia del teatro que se da un ritmo previamente marcado.

El lugar también es distinto


El lugar de la dramatización es la escuela, el aula. El lugar del teatro es escenario.

En cuanto a la presencia de un coordinador


En el dramatización el coordinador es una animador que puede ser un amaestro en una ámbito cercano. En cambio, en el teatro hay una figura que se llama director de escena. Da orientaciones y pule los efectos hasta que se produce la representación de la obra.

Un último criterio seria la finalidad


El propósito en la dramatización es el de contribuir a la formación y al desarrollo de la persona sin embargo el teatro tiene detrás una preparación rigurosa de las personas, actores en el arte de la interpretación. En la dramatización, el resultado se agota en la propia realización. En el teatro, se propone como objetivo una representación espectacular todo va encaminado a dar un espectáculo. En la dramatización lo que interesa es el proceso de creación más que el resultado artístico. A diferencia del teatro que lo que interesa especialmente la calidad del resultado artístico final.

Términos afines

  • Juego simbólico, el niño se transforma, hace la burla a sus padres.
  • Juego de representación de roles, el niño juega a hacer de enfermero o médico, indios vaqueros.

En todos los libros que podemos manejar como maestros, vamos a encontrar términos afines como:

Creatividad dramática, dramática creativa, juego dramático, dramatización, expresión dramática. Pero los términos más recurrentes van a ser juego dramático y dramatización.

Dos tipos de estructuras o dos modelos:

  1. Un primer modelo que sería un modelo tradicional más asimilado con el teatro convencional que presenta una estructura interna de planteamiento, nudo y desenlace. Una estructura que se podría asimilar a la de Bladimir Prop.
  1. Un segundo modelo, que es el que triunfa actualmente, pensemos en Fernando Lalana. Un modelo más elaborado que consiste en adaptar las acotaciones que son transformadas en texto. El teatro se asimila más al relato, es decir las descripciones que pueden aparecer en las acotaciones pasan a las narraciones. Po eso a veces, se produce una confusión entre el teatro y el cuento.

La expresión teatral une varios campos:

  • Expresión lingüística


Estamos hablando de aspectos del a lengua oral y escrita. En definitiva, se trata de conocer y modular las características de la voz. Trabajar en la identificación de sonidos. La versatilidad, a la hora de imitar voces. Desarrollar la improvisación versal, incitar a la escritura libre. Las actividades apropiadas para realizar en el aula de éste campo serian:

Imitar las formas de hablar de personajes, probar distintas modulaciones de la voz, ejercitar los distintos modos expresivos, es decir, el diálogo, la descripción y la narración. Elaboración de guiones dramáticos mediante el trabajo colectivo, adaptación dramática de textos, aprender a imitar canciones, elaborar historias a partir de un dibujo o una frase, entonar y aclamar estrofas poéticas.

  • Expresión corporal


    El cuerpo se expresa, comunica y todo eso juega un papel importante que hay que trabajar.

Cada vez cobra más relevancia, se considera un factor importante dentro de la educación integral de las personas, por ellos se incorpora en el currículo escolar. En la práctica escolar se procura que el niño aprenda a expresarse corporalmente. Se puede someter a una educación, comienza tomando conciencia de lo que es el cuerpo, con sus límites y posibilidades. Ejercicios y Juegos de movilización, movimiento, reconocimiento y sensibilización de lo que es el cuerpo y sus capacidades. Ejercicios de control y descubrimiento del cuerpo, ejercicios de control muscular, articulación corporal, de reconocimiento de las sensaciones, exploración sensorial de los objetos, trabajar el contacto de los cuerpos uno con otro. Como propuestas más concretas, juego de hincharse y deshincharse como globos, sentir el cuerpo pesado y ligero, inspirar y expirar, ejercicios de manipular aros, pelotas y cuerdas para experimentar las nociones cerca lejos, débil. Juegos de marioneta, inventar juegos relacionados con los cinco sentidos, explorar las texturas de los objetos y los colores. Reconocimiento de los otros por la voz, por el tacto, realizar composiciones corporales (representar las olas, el viento…)

  • La expresión plástica


    Pintar, diseñar artefactos, manejar la expresión plástica.

Mediante el dibujo, la pintura, el grabado, modelado, el niño puede elaborar los elementos que necesita para caracterizar a los personajes, al ambiente. Aporta la base técnica para desarrollar los efectos escenográficos, los objetos y el mobiliario. Incitar a desarrollar de forma imaginativa la capacidad creativa. No se tratad de imitar las escenarios reales sino de aprovechar los elementos. Caracterizar personajes, construir títeres, marionetas y crear elementos y espacios escénicos. Esto se plasma, buscando el disfraz, promoviendo los llamados disfraces fantásticos, que sorprendan por la originalidad, caracterización de personajes. Buscar objetos usados y rentabilizarlos, como gafas, bigotes, gorros, sombreros, objetos que son cotidianos. Trabajar la luz y el color, realizar siluetas de nubes, montañas. Exige mucho trabajo en el aula y necesita de gran control.

  • Expresión rítmico musical


La música puede desempeñar un papel esencial. A través de ella, el niño puede coordinar los elementos del sonido, la palabra, el ritmo. Con el ritmo y la melodía se crea ambiente.

Propuesta de actividades:

– De reproducir sonidos con diversos objetos para que haya un ambiente, se pueden aprovechar elementos del aula no sólo musicales.

– Trabajar la danza.

– Iniciación a los diferentes bailes.

– Vivir el silencio corporal.

– Analizar sonidos cotidianos frente a musicales.

– Asociar ritmos a situaciones diversas.

– Desfiles de personajes sobre un fondo rítmico.

– Bailes colectivos, libres…

– Inventar historias a partir de varios sonidos.