Fundamentos y Aplicaciones de la Psicología Profunda y Terapias Modernas
Carl Jung y la Psicología Analítica
Carl Jung, médico psiquiatra y psicólogo, fundó la escuela de psicología analítica y fue colaborador de Sigmund Freud. Su abordaje teórico y clínico enfatizó la conexión funcional entre la estructura de la psique y sus productos (manifestaciones culturales). El planteamiento de partida de la terapéutica analítica sostiene que la salud mental responde a la adecuada relación funcional que se establece entre los procesos conscientes y los inconscientes en el transcurso de la vida de un individuo. Desarrolló la teoría de los tipos psicológicos.
Jung afirmaba que no existía ninguna terapéutica válida para todos los individuos. Por ello, consideraba fundamental comprender cada caso de forma individual, explorando los sueños y las tendencias curativas inherentes al individuo, con el fin de activarlas mediante una participación consciente y facilitar la autocuración.
Teorías y Polaridades Clave
- Tipos psicológicos: Jung desarrolló este concepto para explicar las diferencias en las definiciones de neurosis entre Freud, Adler y él mismo. Los individuos nacen con una actitud psicológica introvertida o extravertida, dependiendo de si su interés natural se orienta hacia su mundo interior o hacia la realidad social que los rodea. El ser humano puede orientarse en el mundo a través de cuatro funciones básicas: sentimiento, pensamiento, intuición y sensación.
- La libido como energía neutra: Jung postuló que la libido, como energía psíquica neutra, podía manifestarse de diferentes maneras (por ejemplo, sexual) dependiendo de las circunstancias de cada ser humano.
- Una psicología de lo particular a lo sano: Jung afirmaba que no era lógico derivar lo normal de lo patológico, sino que lo correcto era establecer una psicología general del ser humano sano y, a partir de ella, comprender al individuo enfermo.
- Un inconsciente creativo: Otra evidencia de la perspectiva optimista de Jung es que el inconsciente era también una fuente positiva capaz de generar grandes beneficios, una fuente inagotable de creatividad que puede ser transmitida a la conciencia en forma de fuerzas de renovación y transformación.
- Un ámbito transicional: Jung se interesaba por una psicología que trascendía el lado puramente racional del ser humano.
- Principio finalista: Jung insistía en el principio finalista y teleológico, considerando que todas las actividades de la psique están dirigidas hacia una finalidad.
Principios Fundamentales de la Psicología Analítica
Los opuestos y la autorregulación de la psique
La psique entiende todas las formas de vida como una lucha entre fuerzas antagónicas. Estas generan tensiones que, al resolverse, producen un desarrollo en el individuo. Cuando se produce una polaridad o unilateralidad en el reino consciente del individuo, su inconsciente reacciona de inmediato (a través de sueños, fantasías, etc.) intentando corregir el desequilibrio.
La estructura de la psique
La psique se concibe como una estructura circular compuesta por:
- Una pequeña sección: la consciencia.
- Una segunda capa, un poco más grande: el inconsciente personal.
- Una inmensa porción: el inconsciente colectivo.
El inconsciente personal
Es el resultado de la interacción entre la persona y su entorno. El Yo (o Ego) otorga al individuo la conciencia de existir y el sentimiento de identidad personal. El Yo organiza las cuatro funciones psicológicas, siendo así el portador de la personalidad.
Los complejos
Jung consideraba que los complejos no eran algo patológico, sino que representaban partes esenciales de la mente, presentes en todos los seres humanos, tanto en personas sanas como enfermas.
El inconsciente colectivo
Jung derivó su teoría del inconsciente colectivo de fenómenos psicológicos que encontró en la psique de sus pacientes, los cuales no podían ser explicados basándose en la experiencia personal, el olvido o la represión. Descubrió que algunos de estos fenómenos guardaban similitudes con temas mitológicos y religiosos del pasado cultural de los pueblos.
Los arquetipos
Los definió como factores y motivos que ordenan los elementos psíquicos en ciertas imágenes, pero de tal forma que solo se pueden reconocer por los efectos que producen.
- Las representaciones arquetípicas son variaciones personales que se remiten a esas formas básicas que son los arquetipos en sí.
- Representan la posibilidad de que ciertas ideas, percepciones o acciones sucedan ante determinadas circunstancias del entorno.
- Los arquetipos predisponen al individuo a enfocar la vida y a vivirla de determinadas formas, de acuerdo con pautas anticipadas previamente dispuestas en la psique.
Aportes Terapéuticos de la Psicología Analítica
La psicología analítica evita todo intento de estandarizar la psicoterapia. Reitera que la salud mental responde a la adecuada relación funcional que se establece entre los procesos conscientes e inconscientes en el transcurso de la vida de un individuo.
Concepto positivo de la neurosis
Jung veía la neurosis como un intento de curación con el que reacciona el organismo ante un estilo de vida inadecuado. Todas las neurosis están caracterizadas por la presencia de conflictos que involucran complejos y disociaciones, provocando regresiones y descensos del nivel mental. La causa suele ser una deficiente adaptación interna o externa que lleva a la persona a una regresión a etapas infantiles.
Etapas del tratamiento
- Confesión: Busca que el individuo tome conciencia y reconozca ante el terapeuta todo lo escondido y reprimido que le causa culpa, lo que a menudo lo lleva a alejarse del resto de la sociedad. Implica la aceptación de la sombra, el aspecto oscuro de nuestra personalidad.
- Explicación: Se ayuda al paciente a hacer consciente la transferencia con el terapeuta. Se trata de llevar a la conciencia fantasías que nunca antes han estado allí, mediante diferentes técnicas, en especial la interpretación de sueños.
- Educación: Entrenamiento indirecto para que el paciente pueda continuar con su trabajo terapéutico de manera independiente, fomentando un proceso de autoeducación que lo lleve a convertirse en un verdadero sujeto social.
- Transformación: Consiste en una transformación ética ante la vida que conduzca al individuo a encontrar sus propias metas en el plano moral. Representa el proceso de desarrollo que Jung denominó individualización.
El proceso de individualización
Es una forma de maduración y autorrealización de la personalidad, liderado principalmente por el Sí-mismo. Se caracteriza por la confrontación de lo consciente con algunos componentes del inconsciente: la persona, la sombra, el ánima, el ánimus y el Sí-mismo. La tarea básica consiste en diferenciar el Yo de todos estos complejos, para lo cual este debe relacionarse objetivamente con ellos, evitando identificarse.
El trabajo con la persona y la sombra
La persona representa la máscara que el individuo utiliza en su adaptación a la vida social cotidiana. Son todos aquellos aspectos de la personalidad con los que los individuos se adaptan al mundo exterior, los roles que desempeñan y que resultan presentables y agradables para los demás. El complejo de la sombra es el polo opuesto de la persona.
El trabajo con el ánima, el ánimus y el Sí-mismo
El ánima es el complejo funcional que representa el aspecto femenino en los hombres, mientras que el ánimus es el complejo funcional que representa el aspecto masculino en las mujeres. Ambos son fundamentales en la adaptación social de los géneros, en la adaptación sexual y también en la atracción hacia el sexo opuesto. Si los complejos del ánima y del ánimus se logran integrar, el inconsciente revela en sueños un nuevo aspecto: el Sí-mismo.
El Sí-mismo es el arquetipo de la totalidad y el centro regulador de la psique, oculto detrás de la personalidad total y encargado de llevar a la práctica el proyecto de vida y de guiar el proceso de individuación.
La fuerza transformadora del símbolo
El símbolo es un elemento fundamental para el proceso terapéutico, ya que opera como un verdadero motor transformador de energía, que conduce a cambios positivos en la personalidad de los pacientes.
Interpretación de los sueños
Jung consideraba los sueños un producto espontáneo y útil del inconsciente. Para interpretarlos, empleaba dos perspectivas:
- La primera deriva del enfoque finalista y lleva a atender no solo a la causa y al porqué, sino también al propósito y al para qué ocurre un sueño determinado.
- La segunda tiene en cuenta el principio compensador de la psique, por lo cual se analiza un sueño tratando de verlo como una compensación de las situaciones conscientes que esté viviendo el individuo en el momento determinado en que sueña.
Métodos auxiliares
La imaginación activa constituye una alternativa al trabajo con los sueños. Consiste en llevar a cabo un diálogo que combina lo racional y lo irracional, interactuando con los complejos del ‘teatro interior’.
Terapias Conductuales de Tercera Generación
Las Terapias Conductistas de Tercera Generación se presentan como un salto cualitativo en el desarrollo de las terapias de conducta (abarcando también las terapias cognitivo-conductuales). Para comprender la tercera generación, es fundamental conocer las anteriores:
Primera generación
Hace referencia a la terapia de conducta clásica, orientada a la modificación directa de la conducta basada en principios de aprendizaje. Según la clasificación de Meichenbaum, sigue la metáfora del condicionamiento.
Segunda generación
Comprende las terapias cognitivo-conductuales que trabajan en torno al concepto de cognición y operan sobre su construcción, identificación y cambio. Esta segunda generación respondería a la metáfora del procesamiento de información.
Características
Dan paso a un enfoque contextual. Su suposición básica es que el contexto es el elemento esencial para la comprensión de la naturaleza y función de un suceso. A partir de esta especial sensibilidad al contexto y a las funciones de un evento psicológico (más que a su forma), se tiende a enfatizar el papel de las estrategias contextuales y experienciales. No se trata de eliminar un síntoma, sino de modificar la función que ese síntoma tiene a través del cambio en el contexto en el que dichos síntomas aparecen como problemáticos. Esta descripción corresponde, según la clasificación de Meichenbaum, a la metáfora de la narración constructiva, que enfatiza el concepto de la creación activa de la realidad a través de la fortaleza de los significados personales y de los modelos individuales de representación del mundo.
Incorporaciones y filosofía
- Intervenciones y técnicas de las terapias humanistas y experienciales como elementos importantes de su modelo.
- Modos de hacer de las terapias “no científicas”.
Esta nueva filosofía supone el paso de un modelo mecanicista a un modelo más narrativo. Se abandona el modelo de déficit en favor de un entendimiento del trastorno en términos del contexto, la historia personal y la construcción que el sujeto ha hecho de su realidad.
Principios generales
- Aceptación: Dar un lugar a lo negativo y al sufrimiento en la propia vida.
- El trabajo sobre los valores, tanto del paciente como los del terapeuta.
- La activación, promoviendo el cambio hacia metas personalmente valiosas.
- La consideración de la relación terapéutica como un elemento importante de la terapia.
Desensibilización Sistemática
La Desensibilización Sistemática es una de las técnicas más ampliamente utilizadas en terapia. Está basada en el principio de inhibición recíproca: la respuesta que se da ante determinados estímulos o situaciones no es inevitable; se pueden elicitar conductas incompatibles con la respuesta original, lo que, con el tiempo, la irá debilitando.
Elementos clave
Se define por tres elementos:
- Entrenamiento de relajación.
- Elaboración de una jerarquía de situaciones ansiógenas.
- Emparejamiento de los elementos de esta jerarquía con el estado de relajación.
Se espera que, al emparejar los elementos de la jerarquía ansiógena con el estado de relajación (dos respuestas antagónicas), se inhiba la ansiedad.
Tipos de exposición
Existen dos tipos de exposición:
- En la imaginación: donde se visualizan los diferentes elementos de la jerarquía.
- En vivo: se diseña la situación terapéutica de tal modo que el paciente debe aprender a relajarse en presencia del estímulo ansiógeno real.
La exposición en vivo tiende a ser más efectiva que la imaginaria.
Técnicas de Comunicación Terapéutica
Reformulación de contenido
Consiste en la intervención inmediata, repitiendo o reformulando con pequeñas modificaciones lo expresado por el paciente. Sirve para mejorar su entendimiento y comprensión mediante la percepción de la propia experiencia.
Recapitulación
Constituye una síntesis de comunicaciones más amplias, buscando resaltar los elementos significativos del relato. Su objetivo es estimular la capacidad de síntesis del paciente.
Interrogación
Es una de las técnicas más empleadas en la entrevista psicológica. Las preguntas deben realizarse de forma directa, clara y precisa, evitando interrogantes suspicaces, acusadoras o contestables con monosílabas que escasamente promueven la profundización en el relato.
Proporcionar información
El terapeuta es también un medio de transmisión de información sobre aspectos de cultura humanística que aclaren situaciones desconocidas o conocimientos distorsionados.
Seguir o dar consejos
Cuando el paciente pregunta sobre su patología, su etiología o las formas de resolver sus problemas, el terapeuta puede incurrir en el error de exponer libremente su opinión. Es preferible devolver la pregunta, discutir el problema, proponer conductas alternativas y ensayos originales, o estimular el pensamiento anticipatorio.
Generalización
Es una intervención que se relaciona con la extensión o ampliación del problema del paciente a los demás o a otros casos. La utilidad de esta comunicación radica en que sirve como una fase tranquilizadora.
Incitación general
Es toda estimulación que anima al paciente a continuar su relato o su acción. Generalmente son comunicaciones breves, enunciadas como exhortaciones de tipo verbal o no verbal, y sirven para reorientar los temas de discusión.
Intervención paradójica
Utilización de un mandato para conseguir el efecto contrario.
Confrontación o señalamiento
Se refiere a las precisiones y rectificaciones de los enunciados del paciente.
- El señalamiento: Se llama la atención sobre elementos o contenidos que se han pasado por alto en el relato, o se muestran relaciones peculiares entre los fenómenos.
- La rectificación de enunciados: Se ponen en relieve las limitaciones de comprensión, contradicciones y las actitudes defensivas.
Operaciones de encuadre o estructuración
Se relacionan con todas las especificaciones referentes a la estructuración de la relación terapéutica que tienden a repetirse durante el proceso, especialmente cuando:
- El paciente solicita mayor dirección.
- Surgen fenómenos transferenciales.
- Se manifiestan problemas espaciales o temporales en el contacto.
Reafirmación o técnica de apoyo
Es una comunicación que alimenta o presta apoyo emocional al paciente basándose en sus logros y capacidades presentes o anteriores. Puede enfocarse en las posibilidades del tratamiento, la idoneidad del terapeuta y la bondad de la psicoterapia. Contrarresta sentimientos de inadecuación del sujeto, mejorando su autoestima y disminuyendo la ansiedad. Estimula la acción y puede ligarse a incitaciones o sugerencias, sirviendo también para apoyar la exploración y elección de ideas y sentimientos.
Reflejo de sentimientos
Es la intervención que demuestra al paciente una comprensión correcta de lo que siente o experimenta. Mejora la relación y ayuda a expresar sentimientos sin miedo.
Silencio
Comprende todas las pausas que, iniciadas por el paciente o el terapeuta, tienen una aplicación o utilidad en el tratamiento. Sirve para:
- Que el paciente asuma la responsabilidad de sus problemas hablando de ellos.
- Controlar el ritmo del proceso.
- Ayudarle en la asimilación de sentimientos o pensamientos.
- Crear un ambiente de angustia necesario para la terapia.
Interpretación
Es una técnica muy empleada cuando se requiere mejorar el autoconocimiento del paciente o se intenta modificar actitudes, pensamientos y emociones durante la terapia. Es la intervención que identifica y define las relaciones y significados de la conducta del paciente, a menudo como resultado de reactivos (preguntas o cuestionarios).
Interpretación de las comunicaciones verbales
Las comunicaciones del paciente deben ser juzgadas según los siguientes parámetros:
- Contenido lógico de la referencia normal: Se relaciona tanto con los contenidos estrictamente lógicos del pensamiento como con la estructura gramatical del mensaje.
- Componentes afectivos del contenido: Vinculado a la correspondencia entre lo cognitivo y lo afectivo, o las contradicciones presentes en el mensaje. También puede observarse la correlación entre los hechos y circunstancias con la expresión afectiva de los mismos.
- Relación de la comunicación en el contexto etiopatogénico y dinámico: En cuanto al grado de conocimiento que presenta el paciente de la causalidad de sus problemas y de su propia estructura de personalidad.
Interpretación de las comunicaciones no verbales
Incluye la observación de:
- Mímica.
- Gestos (consuetudinarios, técnicos, autodirigidos).
- Actitudes corporales.
- Modificaciones orgánico-funcionales observables.
El terapeuta debe entrenarse meticulosamente en observar, captar e interpretar la conducta no verbal del paciente, así como controlar la expresión y congruencia de sus propias comunicaciones no verbales. La comunicación no verbal se analiza desde los siguientes puntos de vista:
- El efecto que nos produce el individuo de acuerdo con sus condiciones personales.
- La congruencia entre los intereses del paciente y su edad, profesión, rol social y conducta.
- Las actitudes que adopta el paciente para provocar reacciones en el terapeuta.