Guía Integral de Ciencias Ambientales: Contaminación, Tratamiento y Gestión de Residuos

Glosario de Términos Clave en Contaminación Atmosférica

  • Emisión: Acción de expulsar, verter o arrojar sustancias contaminantes a la atmósfera a través de focos, conductos o chimeneas.
  • Inmisión: Nivel de presencia o concentración de gases contaminantes en la atmósfera, posterior a la emisión. Se asocia al nivel de calidad del aire.
  • Foco contaminador: Punto emisor de contaminantes a la atmósfera, como instalaciones industriales con chimeneas.
  • Límite de emisión: Concentración máxima admisible de un contaminante en las emisiones a la atmósfera.
  • Compuesto Orgánico Volátil (COV): Compuesto orgánico con una presión de vapor de 0,01 KPa o más a 20°C.
  • Disolvente orgánico: COV utilizado para disolver materias primas, productos o materiales residuales, o como agente de limpieza.



El Reglamento (CE) n.º 2037/2000 establece condiciones muy estrictas para la producción, uso y puesta en el mercado de:

– Hidroclorofluorocarburos (HCFC).

– Bromuro de metilo.

Existen excepciones, entre las que cabe destacar la relativa a los sistemas de protección contra incendios y extintores que contengan halones, que debían ser retirados del servicio antes del 31 de diciembre de 2003, recuperando estas sustancias mediante gestores autorizados para su reciclaje o destrucción por medios compatibles con el medio ambiente.

Control de la utilización de hidroclorofluorocarburos (HCFC)

Respecto a la utilización de HCFC, queda prohibido su uso bajo las siguientes condiciones:

Aplicación

En aerosoles Prohibido su uso.

Como disolventes Prohibido su uso. A partir del 1 de enero de 2002, en todos los usos como disolventes, con excepción de la limpieza de precisión de componentes eléctricos y de otro tipo en aplicaciones aeroespaciales y aeronáuticas; en este caso la prohibición entró en vigor el 31 de diciembre de 2008

Como refrigerante A partir del 1 de enero de 2010 quedará prohibido el uso de HCFC puros para el mantenimiento y la reparación de los aparatos de refrigeración y aire acondicionado existentes en dicha fecha. A partir del 1 de enero de 2015 quedarán prohibidos todos los HCFC

Para la producción de espumas A partir del 1 de enero de 2004, para la producción de todo tipo de espumas, inclusive pulverizadores de poliuretano y espuma en bloques

En todas las demás aplicaciones Prohibido su uso


Autorización Ambiental Integrada (AAI)

El planteamiento de prevención y control de la contaminación que desarrolla la Ley de Prevención y Control Integrados de la Contaminación (LPCIC) se sustenta en la creación de un único procedimiento administrativo, realizado por la autoridad ambiental autonómica (Consejerías de Medio Ambiente) en el que se integran algunas de las actuales autorizaciones sectoriales con trascendencia ambiental:

  • Autorización de producción y gestión de residuos.
  • Autorización instalaciones de tratamiento de residuos: incineración, eliminación, vertidos, valorización de peligrosos.
  • Autorizaciones de vertido: a colectores, de tierra al mar, a cauce público.
  • Emisiones a la atmósfera.
  • Autorización de emisión de COV.

Así pues, la AAI es una nueva autorización que integrará todas las autorizaciones y permisos con trascendencia ambiental citados. Además, aunque no integra la Evaluación de Impacto Ambiental (EIA), sí incluye a ésta en el propio procedimiento de aquélla.

Formalmente, al menos, su importancia deriva de la obligatoriedad que establece para las autoridades ambientales de otorgarla con unos criterios integradores:

  • La instalación autorizada aplica medidas adecuadas para prevenir la contaminación, considerando «medidas adecuadas» aquellas que pueden derivarse del uso de las Mejores Técnicas Disponibles (MTD).
  • La instalación autorizada evita la producción de residuos y, en todo caso, los gestiona adecuadamente, de acuerdo a la jerarquía de gestión de residuos.
  • Las materias primas, el agua y la energía se utilizan de forma eficiente.
  • Se aplican las medidas necesarias para prevenir los accidentes graves y, en todo caso,.
  • Se establecen las medidas necesarias para evitar riesgos de contaminación al cesar la actividad industrial.

Dentro del procedimiento para obtener la AAI, encontramos tres momentos claves:

  • El primero será la solicitud previa al Ayuntamiento de un informe urbanístico que determine si la instalación se ajusta o no al planeamiento urbano. En caso de ser negativo, impide obtener la AAI
  • Un segundo momento importante será la información pública del proyecto que acompaña la solicitud. La ley establece que este periodo informativo no podrá ser menor de 30 días,
  • El tercer momento se corresponde con la elaboración de las evaluaciones preliminares y el trámite de audiencia a los interesados.

Lo realmente novedoso de la AAI se centra en sus repercusiones técnicas en los procesos productivos, en la línea de prevenir la contaminación. La existencia de unos informes técnicos (BREF) sobre las Mejores Técnicas Disponibles (MTD), que habrán de ser el origen de las consideraciones incluidas en la AAI en aspectos como eficiencia energética y consumo de materias primas, minimización de residuos y emisiones y vertidos


En la Constitución Española se dice que «son bienes de dominio público estatal, los que determine la Ley y en todo caso, la zona marítimo-terrestre, las playas, el mar territorial, los recursos naturales de la zona económica y la plataforma continental».

En el Texto Refundido de la Ley de Aguas, aprobado por Real Decreto Legislativo 1/2001 de 20 de julio, constituyen el dominio público hidráulico, entre otros bienes, los cauces de corrientes naturales, continuas o discontinuas y los lechos de lagos, lagunas y embalses superficiales, en cauces públicos. Se consideran como dominio privado los cauces por los que ocasionalmente discurran aguas pluviales, en tanto atraviesen desde su origen, únicamente, fincas de propiedad particular.

Se distinguen los siguientes elementos referentes al dominio público hidráulico y a sus zonas asociadas:

  • Álveo o cauce natural de una corriente continua o discontinua es el terreno cubierto por las aguas en las máximas crecidas ordinarias.
  • Ribera es cada una de las fajas laterales situadas dentro del cauce natural, por encima del nivel de aguas bajas.
  • Margen es el terreno que limita con el cauce y que está situado por encima del mismo.
  • Zona de policía es la constituida por una franja lateral de 100 m de anchura a cada lado, contados a partir de la línea que delimita el cauce, en la cual se condiciona el uso del suelo y las actividades que en él se desarrollen.
  • Zona de servidumbre es la franja que linda con el cauce, dentro de la zona de policía, con ancho de 5 m, que se reserva para usos de vigilancia, pesca y salvamento.
  • Lecho o fondo de los lagos y lagunas es el terreno que ocupan sus aguas en las épocas en que alcanzan su mayor nivel ordinario. En los embalses superficiales es el terreno cubierto por las aguas cuando éstas alcanzan su mayor nivel a consecuencia de las máximas crecidas ordinarias de los ríos que lo alimentan.
  • Zonas inundables son las delimitadas por los niveles teóricos que alcanzarían las aguas en las avenidas, cuyo período estadístico de retorno sea de quinientos años. En estas zonas no se prejuzga el carácter público o privado de los terrenos y el Gobierno podrá establecer limitaciones en el uso, para garantizar la seguridad de personas y bienes.

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Caracterización de las Aguas Residuales

Las aguas residuales se pueden dividir en los siguientes tipos:

  • Aguas pluviales: Son las aguas de la escorrentía superficial provocada por las precipitaciones atmosféricas. Se caracterizan por grandes aportaciones intermitentes de caudal y por una contaminación importante en los primeros 15-30 minutos.
  • Aguas blancas: Son aguas procedentes de la escorrentía superficial y de drenajes. Se caracterizan también por grandes aportaciones intermitentes de caudales.
  • Aguas negras o urbanas: Son aguas recogidas en las aglomeraciones urbanas procedentes de los vertidos de la actividad humana doméstica o la mezcla de éstas con las procedentes de actividades comerciales, industriales o agrarias integradas en dicha aglomeración, y con las de drenaje y escorrentía de dicho núcleo.
  • Aguas industriales: Aguas procedentes de actividades industriales o de procesos de separación de materias primas, elaboración y acabado de productos, así como de la transmisión de calor y frío por aparatos de climatización, etc.

Tratamiento de Aguas Residuales

La depuración de los efluentes líquidos es una parte fundamental de la gestión ambiental en cualquier industria. Debe ser asumida en su doble faceta de obligación medioambiental con la sociedad y como parte del proceso de producción. En este último sentido, se deben tener en cuenta dos tipos posibles de costes:

  • Coste de producción: Proceso de tratamiento y «canon de vertido».
  • Coste de seguridad: Eliminación de problemas de seguridad e higiene y de penalizaciones por delito ecológico.

Para la planificación del proceso de tratamiento es preciso tener en cuenta, en principio, la triple posibilidad de actuación:

  • Depuración conjunta en una EDAR con aguas residuales urbanas.
  • Depuración en una estación depuradora de aguas residuales industriales (EDARI).
  • Depuración en la propia industria.

Los principales tratamientos en cada una de las categorías son:

Pretratamientos y tratamientos primarios:

Cribado, neutralización, coagulación-floculación, sedimentación, filtración, floculación, desarenado y desaceitado. Tienen por objeto la eliminación de sólidos en suspensión, coloides, metales pesados, aceites y grasas.

Tratamientos secundarios: Lodos activados, filtros percoladores, lagunaje, etc. Se elimina materia orgánica biodegradable.

Tratamientos terciarios:

  • Procesos de oxidación (destrucción o transformación de materia orgánica y compuestos inorgánicos oxidables) y de reducción.
  • Procesos de precipitación química: eliminación de metales y aniones inorgánicos.
  • Arrastre con aire o vapor (stripping): eliminación de compuestos volátiles.
  • Estos tres procesos anteriores también pueden ser, a veces, tratamientos primarios.
  • Procesos de membrana (ósmosis inversa, ultrafiltración, electrodiálisis, etc.) y de intercambio iónico: eliminación de especies disueltas y coloides en su caso.
  • Procesos de adsorción con carbón activo. Eliminación de compuestos orgánicos.
  • Procesos de incineración. Eliminación de compuestos orgánicos.
  • Procesos electroquímicos: electrolisis y electromembranas.


Estructura del Suelo

Debido, sobre todo, a la infiltración del agua edáfica, que produce una cierta meteorización química, y a la actividad orgánica, se desarrolla una estructura secuencial en capas distintas en el suelo según la profundidad. A estas capas se las denomina horizontes y constituyen el perfil del suelo.

Básicamente, en un suelo se distinguen, visualmente, tres horizontes en orden decreciente con características físicas, químicas, biológicas y funcionales diferentes.

El perfil del suelo que forma parte de los ecosistemas terrestres es un corte vertical del terreno, en el que pueden distinguirse capas que se denominan horizontes, ya que su disposición suele ser horizontal o subhorizontal. Cada uno de ellos suele tener características y propiedades diferentes en cuanto a color, estructura, textura, composición química, biológica o mineralógica. Los horizontes genéticos principales se designan atendiendo a su disposición en el perfil:

  • Horizonte O: Horizonte orgánico de un suelo mineral. Formado en la parte superior de suelo, en condiciones predominantemente aerobias. Contiene un 20% o más de carbono orgánico. Horizonte típico de suelos de bosque.
  • Horizonte A u ORGÁNICO Y DE LAVADO: Horizonte mineral oscurecido por aportes de materia orgánica. Formado en la parte superior del suelo o debajo de un O. El relativo oscurecimiento de su color se debe a la materia orgánica, por aportes de hojas, raíces u otras partes de la planta. También se designa como A cualquier horizonte en superficie afectado por laboreo o pastoreo.
  • Horizonte B o DE ACUMULACIÓN: Horizonte mineral formado en el interior del suelo. Ha desaparecido la estructura originaria de la roca. Existen horizontes B de alteración, como Bw, y de acumulación de distintos componentes, como yeso (By), carbonato cálcico (Bk) o arcilla (Bt).
  • Horizonte C o DE TRANSICIÓN HACIA LA ROCA MADRE: Horizonte mineral, comparativamente poco afectado por procesos edafogénicos, excepto meteorización o hidromorfismo. Material de características próximas a las del material originario (areniscas, calizas, lutitas, etc.). Puede tratarse de una capa de gravas y arenas.
  • (R) Roca. Roca consolidada subyacente, demasiado dura para romperla con la mano. Impide el paso de raíces. Se requiere un pico para romperla.


La Contaminación del Suelo

El suelo tiene la particularidad de que actúa como un sumidero en el que los contaminantes se filtran o se transforman hasta agotar su capacidad de amortiguación, momento en el que el suelo se puede convertir en fuente de sustancias químicas y los contaminantes pueden empezar a filtrarse en las aguas subterráneas.

El hecho de que los efectos de la contaminación permanezcan ocultos durante mucho tiempo ha llevado a que, hasta hace muy poco, la preocupación por el buen estado de los suelos haya sido mínima. Además, el suelo puede ser una propiedad privada, lo que dificulta la toma de medidas de protección.

En Europa, los tres principales procesos de degradación grave del suelo son la erosión, la acidificación y la contaminación por metales pesados, plaguicidas, otros contaminantes orgánicos, nitratos, fosfatos y radionucleidos artificiales. Otras amenazas importantes son la compactación del suelo, las pérdidas de materia orgánica debidas a prácticas de manejo incorrectas, la salinización y el encharcamiento.

Los suelos contaminados se generan principalmente por:

  1. Mala gestión de residuos: vertidos incontrolados, acumulaciones incorrectas, ruinas industriales, etc.
  2. Malas prácticas en instalaciones industriales: fugas, almacenamiento incorrecto, etc.
  3. Accidentes en el transporte, almacenamiento y manipulación de productos químicos.

Riesgo para la salud humana o para el medio ambiente es la probabilidad de que un contaminante presente en el suelo entre en contacto con algún receptor con consecuencias adversas para la salud de las personas o del medio ambiente.

En términos de protección de la salud humana se asume que:

  • Para sustancias cancerígenas una situación de RIESGO ACEPTABLE es aquella en que la frecuencia esperada de aparición de cáncer en la población expuesta no es superior a uno por cada cien mil casos.
  • Para sustancias con efectos sistémicos (sustancias que afectan órganos o tejidos, por ejemplo, el hígado o el riñón, en sitios remotos al del primer contacto del agente causante del daño con el organismo) se asume como una situación de RIESGO ACEPTABLE aquella en que, para cada sustancia, el cociente entre exposición a largo plazo y dosis máxima admisible es inferior a la unidad.

El riesgo de que un contaminante presente en un suelo pueda suponer la existencia de contaminación se evalúa a partir de la concurrencia de tres factores:

  • La concentración de contaminantes en el suelo.
  • La exposición a la contaminación de las personas por diferentes vías.
  • La toxicidad de las sustancias.

De este modo, se plantea la siguiente expresión:

Riesgo = Concentración x Exposición x Toxicidad


DESCONTAMINACIÓN DE SUELOS CONTAMINADOS

La problemática de la descontaminación de los suelos podemos tratarla bajo dos perspectivas: técnicas de aislamiento de la contaminación y técnicas de descontaminación.

Técnicas de Aislamiento

Para evitar que la contaminación se propague desde los suelos contaminados, éstos pueden ser almacenados en vertederos apropiados, sellados in situ o destruidos totalmente.

La técnica del sellado trata al suelo con un agente que lo encapsula y lo aísla. El suelo es excavado, la zona se sella con un impermeabilizante y se redeposita el suelo. Para desarrollar las barreras de aislamiento se han utilizado diversas sustancias, como cemento, cal, plásticos, arcilla, etc. El procedimiento tiene el inconveniente de que se pueden producir grietas por las que los contaminantes se fuguen.

Técnicas de Descontaminación

Básicamente se utilizan cinco métodos para la recuperación de los suelos contaminados:

  • Extracción. Consiste en separar los contaminantes mediante la acción de un fluido, a veces aire (arrastre) y en otras ocasiones se usa agua (lavado). Una vez arrastrado el contaminante, se depura el efluente con técnicas apropiadas. Se trata de procedimientos muy sencillos pero, para que sean efectivos, requieren que los suelos sean permeables y que las sustancias contaminantes tengan suficiente movilidad. Además, no son métodos válidos cuando el suelo presenta una alta capacidad de adsorción. Son métodos típicamente desarrollados in situ.
  • Tratamiento químico. Se trata de depurar el suelo mediante la degradación de los contaminantes por reacciones químicas. Frecuentemente se trata de reacciones de oxidación de los compuestos orgánicos. Como agente oxidante se emplea el oxígeno y el agua oxigenada.
  • Tratamiento electroquímico. El desplazamiento de los contaminantes se logra mediante la creación de campos eléctricos. Consiste en introducir a suficiente profundidad unos electrodos en el suelo. Los contaminantes fluyen desde un electrodo a otro siguiendo las líneas del campo eléctrico.
  • Busca la destrucción de los contaminantes mediante el suministro de calor. Se trata de un tratamiento ex situ.
  • Consiste en potenciar el desarrollo de microorganismos con capacidad de degradación de contaminantes (biorremediación). Se puede o favorecer la actividad de los microorganismos presentes o introducir nuevas especies. Para favorecer las acciones bióticas se pueden mejorar determinadas condiciones edáficas, añadiendo nutrientes, agua, oxígeno y modificando el pH.


Prevención, Reutilización y Reciclaje de Residuos

Prevención

No forma en sí parte de la gestión porque es un paso previo, pero se considerará aquí porque se relaciona estrechamente con ella. Se entiende por prevención y minimización el conjunto de medidas destinadas a conseguir la reducción en la producción de residuos urbanos, así como de la cantidad de sustancias peligrosas y contaminantes presentes en ellos.

Para ello es necesario actuar en las siguientes etapas del proceso:

  • Fabricación. Aquí se puede reducir su peligrosidad, volumen y peso. Es preciso diseñar el producto de manera que se facilite su reutilización y reciclaje.
  • Transporte. Disminuir en lo posible envases y embalajes innecesarios.
  • Consumo. Favorecer la reutilización, la menor generación de residuos a través de cambios en los hábitos de consumo y la facilidad de separación.

Para conseguir el objetivo de reducir la producción de residuos urbanos, el ya mencionado Plan de Residuos Urbanos arbitra una serie de medidas que ejemplifican muy bien lo que se debe hacer en este campo:

  • Acuerdos entre la Administración y los sectores productivos implicados.
  • Fomento de la recuperación y reutilización en origen
  • Normativas que prioricen la minimización de ciertos residuos peligrosos.
  • Fomento del I+D

Reutilización

La reutilización está íntimamente relacionada con la prevención en la producción de residuos. La adopción de medidas se centra principalmente en la reutilización de los envases.

Para ciertos materiales como el vidrio la reutilización es deseable en términos ecológicos. Aunque hay que tener en cuenta que si los envases han de ser transportados a gran distancia, un radio superior a 200-300 km, el coste ecológico de la reutilización alcanza y supera al del reciclado.

Otro ejemplo muy interesante es el de las bolsas de los supermercados. Se han establecido tasas sobre las bolsas de supermercado con el fin de penalizar su consumo irresponsable. En nuestro país existen experiencias como la reutilización de los cartuchos de tóner de impresora, que son residuos peligrosos para el medio ambiente, y cuyo rellenado, dado su alto precio, supone un ahorro económico.

Reciclaje

Se entiende por reciclaje la transformación de los residuos, dentro de un proceso de producción, para su fin inicial o para otros fines, incluido el compostaje y la biometanización, pero no la incineración, con o sin recuperación energética.

Una de las características de los residuos domésticos es su gran heterogeneidad, lo que hace que sean muy difíciles de tratar en conjunto. Además, la calidad de los productos reciclados está directamente relacionada con la calidad de la recogida y de la clasificación, evitándose así posibles contaminaciones. Todo ello justifica claramente la necesidad de separar los diferentes materiales que componen los residuos, lo que implica la instauración de políticas de recogida selectiva de los residuos.

Valorización Energética y Vertido Controlado

Inevitablemente, en todo el proceso que hemos ido detallando se producen rechazos, término con el que se denominan los materiales que por su naturaleza, estado, etc. no son reciclables. Estos rechazos, si son aprovechables, se pueden valorizar mediante su combustión controlada en plantas de incineración que utilizan estos residuos como combustible para producir energía.

Finalmente, existe una fracción de rechazos, tampoco valorizable, que termina en el vertedero de cola Igualmente ocurre con las escorias fruto de la valorización. Las cenizas generadas deben terminar en un depósito de seguridad, pues se trata de materiales muy peligrosos.

Incluso de los residuos depositados en el vertedero puede obtenerse un rendimiento económico extrayendo y recuperando el biogás producto de la descomposición anaerobia de la materia orgánica y que por su composición, muy rico en metano, puede aprovecharse para generar energía.


Etiquetado de Residuos Peligrosos

Los recipientes o envases que contengan residuos peligrosos deberán estar etiquetados de forma clara, legible e indeleble, al menos en la lengua española, la oficial del Estado.

En la etiqueta deberá figurar:

  • El código de identificación de los residuos que contiene, según el sistema de identificación que se describe en el anexo I del Real Decreto 833/1988 y modificado por el Real Decreto 952/1997.
  • Nombre, dirección y teléfono del titular de los residuos.
  • Fechas de inicio y final de envasado.
  • La naturaleza de los riesgos que presentan los residuos indicados por los pictogramas correspondientes.
  • Riesgos específicos (frases R) y consejos de prudencia (frases S).

El etiquetado de un producto implica la asignación de unas categorías de peligro definidas y preestablecidas, basadas en las propiedades fisicoquímicas, en las toxicológicas, en los efectos específicos sobre la salud humana y en los efectos sobre el medio ambiente, identificadas mediante pictogramas y símbolos de peligrosidad (E, O, F+, F, T+, T, Xn, Xi, C, N).cenizas generadas deben terminar en un depósito de seguridad, pues se trata de materiales muy peligrosos.

Incluso de los residuos depositados en el vertedero puede obtenerse un rendimiento económico extrayendo y recuperando el biogás producto de la descomposición anaerobia de la materia orgánica y que por su composición, muy rico en metano, puede aprovecharse para generar energía.

Cuando se asigne a un residuo envasado más de un indicador de riesgo, se tendrán en cuenta los criterios siguientes:

  • La obligación de poner el indicador de riesgo de residuo tóxico hace que sea facultativa la inclusión de los indicadores de riesgo de residuos nocivo y corrosivo.
  • La obligación de poner el indicador de riesgo de residuo explosivo hace que sea facultativa la inclusión del indicador de riesgo de residuo inflamable y comburente.
  • La etiqueta debe ser firmemente fijada sobre el envase, debiendo ser anuladas, si fuera necesario, indicaciones o etiquetas anteriores, de forma que no induzcan a error o desconocimiento del origen y contenido del envase en ninguna operación posterior del residuo.

El tamaño de la etiqueta debe tener como mínimo las dimensiones de 10 x 10 cm, dependiendo del tamaño del envase.


Producción de Residuos Peligrosos

Hay que calcular cuántos generamos al año, puesto que en función de la cantidad de residuos peligrosos producidos anualmente nuestra empresa estará catalogada como:

  • PEQUEÑO PRODUCTOR DE RESIDUOS PELIGROSOS Producción anual menor de 10 toneladas de RP.
  • PRODUCTOR DE RESIDUOS PELIGROSOS Producción anual mayor de 10 toneladas de RP.

La forma de gestionar los residuos peligrosos es prácticamente igual en ambos casos, sin embargo, sí que hay variación en algunos trámites administrativos, por lo que los estudiaremos por separado.

Si nuestra empresa genera menos de 10 toneladas al año de residuos peligrosos, tiene que inscribirse en el Registro de Pequeños Productores. Para ello, el responsable de la empresa deberá presentar en los Servicios Provinciales de Medio Ambiente la solicitud de inscripción, según los formatos definidos por éste.

No obstante, puede darse el caso de que generándose más de 10 toneladas al año, dado el grado de peligrosidad de los residuos generados, el organismo competente nos conceda la inscripción en el Registro de Pequeños Productores.

Junto con la solicitud, se presentará una memoria explicativa de la actividad, detallando los procesos generadores de residuos y un plano de la distribución en planta de las instalaciones.

En el plazo de seis meses, la Dirección General Ambiental deberá resolver la inscripción dando a cada pequeño productor un número de registro.

El pequeño productor inscrito en el registro tiene el deber de informar a los Servicios Provinciales de Medio Ambiente de cualquier cambio que se produzca en los datos aportados para su inscripción.

En el caso de tener una producción anual superior a las 10 toneladas de residuos peligrosos, tendremos que solicitar la autorización de productor de residuos peligrosos a la Dirección General de Medio Ambiente Industrial.

Para obtener la autorización, el titular de la empresa debe presentar los siguientes documentos:

  • Memoria de la actividad, detallando los procesos generadores de residuos peligrosos, cantidad, composición, características físico-químicas y código de identificación de los mismos, según se explica en el anexo I del Real Decreto 833/1988, – Descripción de agrupamientos, pretratamientos y tratamientos in situ previstos.
  • Descripción de los sistemas de almacenamiento, sistemas de recogida, transporte destino y tratamiento final previsto.
  • Planos de las instalaciones a escala 1:500 y de ubicación con descripción del entorno a escala 1:5.000.
  • Descripción y justificación de las medidas de seguridad exigidas para la actividad y de aquellas exigidas en la legislación sobre protección civil.


Gestión de los Residuos Sólidos Urbanos

Se considera como gestión de los residuos sólidos urbanos al conjunto de operaciones que se realizan con ellos desde que se generan en los hogares y servicios hasta la última fase en su tratamiento. Abarca, pues, tres etapas:

Recogida

La recogida de los residuos urbanos consiste en su recolección para posteriormente efectuar su traslado a las plantas de tratamiento.

Básicamente, existen dos tipos fundamentales de recogida:

  • No selectiva: Los residuos se depositan mezclados en los contenedores, sin ningún tipo de separación. Ha sido la habitual hasta hace algunos años.
  • La recogida selectiva se hace separando los residuos según su clase y depositándolos en los contenedores correspondientes:
    • Contenedor verde para el vidrio.
    • Contenedor azul para el papel y cartón.
    • Contenedor amarillo para los envases.
    • Contenedor gris o marrón para los residuos orgánicos.

También se suelen recoger voluminosos (colchones, muebles, etc.) y residuos inertes, como escombros fruto de pequeñas reparaciones domésticas.

Por lo que respecta a la recogida en sí, existen dos métodos:

  • Recogida por medio de vehículos.
  • Recogida neumática.

Transporte

En esta etapa se realiza el transporte de los residuos hacia las estaciones de transferencia, plantas de clasificación, reciclado, valorización energética o vertedero.

Las estaciones de transferencia son instalaciones en las cuales se descargan y almacenan temporalmente los residuos para poder posteriormente transportarlos a otro lugar para su tratamiento. Una vez allí, se compactan y almacenan y se procede a trasportarlos en vehículos de mayor capacidad a la planta de tratamiento.

Tratamiento

Es la etapa final del proceso y la de mayor importancia. Si los residuos vienen ya separados desde el origen, como es el caso del papel o el vidrio, se dirigen directamente a la planta de reciclado. Si vienen juntos, como es el caso de los envases, hay que separarsegún su naturaleza.

Idéntico proceso se realiza con la bolsa de restos donde predomina la materia orgánica pero existen residuos de otra naturaleza debido a errores o a la fracción decreciente de personas que no separan correctamente sus residuos.

El proceso de selección se realiza mediante diversos sistemas:

  • Metales férricos. Por medio de campos magnéticos.
  • Metales no férricos. Triaje manual y por corrientes de Foucault.
  • Papel y cartón. Se seleccionan por triaje manual.
  • Plásticos duros. Por triaje manual.
  • Plástico film. Mediante sistemas neumáticos.
  • Vidrio de color. Por triaje manual.
  • Vidrio blanco. De igual modo.
  • Materia orgánica. Es el sobrante de los procesos anteriores.