La obra de arte como realidad imaginativa

TEMA 4ESTETICA RELACIONAL Nace en los 70´s. Era más de la arquitectura pero ahora el arte también la acepta. Frederic Jameson dice que en la historia, las vanguardias no tienen sentido como avance, no se constituye nada nuevo, nada que crear, ahora se reclica todo. Para Jameson es el momento culminante de la cultura, porque ya se ha descubierto todo culturalmente hablando.             WALTER BENJAMIN, LA OBRA DE ARTE EN LA ÉPOCA DE SU REPRODUCTIBILIDADPara Walter Benjamin, la proyección que logró hacer Marx hacia la producción capitalista fue de mucho valor, ya que logró mostrarle al mundo la magnitud de lo que él consideraba un problema en aquel entonces. Es así como el autor sugiere proyectar la situación real que está viviendo el arte en la actualidad, donde el interés de las masas ha logrado ocultar tanto la creación, como la genialidad, la perennidad y el misterio. El arte creado por los hombres es copiado por ellos mismos, tanto por práctica como para adquirir ganancias. Una obra de arte se caracteriza por ser única e irrepetible; por esta razón, por más que exista una excelente reproducción de ésta, no va a lograr acercarse a lo que una verdadera obra emite y ha vivido. Esto incluye todos los cambios, desde físicos hasta del lugar en que se ha encontrado. Desde las escrituras, hasta pinturas, pueden ser analizadas por procesos químicos para conocer sus años de existencia e identificar su autenticidad. Una reproducción manual se puede catalogar como una imitación al objeto real, mientras que una técnica no necesariamente tiene que tener origen del objeto original, pudiendo ser independientes. Una reproducción no sólo se puede dar en obras artísticas, sino hasta con la misma naturaleza. Un ejemplo de esto es cuando observamos un paisaje en una filmación: éste no transmitiría lo mismo si uno estuviera presente en la verdadera naturaleza, admirando a ésta es como podemos aspirar al aura puro de la originalidad. Lo que se quiere dar a entender con el significado de una reproducción técnica es que el aura de lo auténtico disminuye significativamente; se le da al aura la definición de ‘manifestación irrepetible de una lejanía (por cercana que pueda estar), a percepción espacial-temporal’.  Hoy en día, la sociedad vive en un constante desmoronamiento del aura, las masas se concentran en el consumismo buscando siempre una mejor reproducción del objeto original y adueñarse de éstos en las más próximas de las cercanías. Esta técnica ha llegado a ganarle terreno a lo irrepetible. La originalidad de una obra de arte viene ligada a su historia, a la utilidad por la cual fue creada y en la que se ha ido modificando con el tiempo. Para mantener su aura, ésta deberá estar siempre ligada en el ritual en el que se le dio su primera utilidad. Dos puntos importantes de la recepción de las obras de arte son el valor cultural y el valor exhibitivo (presentándose como dos polos opuestos). En estos tiempos, el valor cultural nos aleja de la apreciación constante del arte. Muchas obras están restringidas sólo para sacerdote, otras muchas son expuestas sólo en ciertas temporadas del año y otras se ubican bajo el piso de los templos, donde ningún público puede admirarlas. Mientras, en el valor exhibitivo, se puede trasladas el arte de su ritual, de un lugar a otro, y presenta un mayor público. Gracias a la reproducción técnica, este valor ha aumentado con gran fuerza. La fotografía y la pintura han sufrido modificaciones en la función artística que han caído fuera de este campo. La cinematografía es el arte que ya ha sido desarrollado, de una manera completamente distinta. Cuando el actor de cine está frente a la cámara, está consciente de que debe atraer la atención del público, del consumidor, ya que es éste el que forma el mercado. Debe entregarse a su público no sólo con el trabajo, sino con todo su ser, a partir del momento en que éste empieza a actuar. Ante esta realidad, el cine se encarga también de construir de forma artificial la personalidad del actor, vista como una mercancía. Al analizar el tipo de mecanismos que se necesitan para realizar una película cinematográfica, se logra evidenciar que la realidad es, en muchos casos, distorsionada y artificial, ya que el cine cuenta con una gran cantidad de aparatos y tecnicismos que logran depurar las escenas con el fin de comercializar el producto final. La intención fundamental del arte es la de provocar una demanda, la de exponer situaciones específicas al resto del mundo. Se debe recordar que, desde mucho tiempo atrás, la queja fundamental que existía era que las masas buscan la disipación o libertad mientras que el arte reclama recogimiento y tranquilidad. El autor habla de una fórmula muy interesante: quien se recoge frente a una obra de arte, logra penetrar en esta obra; mientras, la masa dispersa sumerge en sí misma a la obra artística. El enfoque que defiende Benjamin Walter está dirigido hacia la importancia de la originalidad en todos los ámbitos, y cómo ésta se va perdiendo cuando las obras son reproducidas una y otra vez. Todo objeto tiene su propio aura, desde personas, arte, naturaleza,… y ésta se puede degradar, dando así al observador una percepción diferente de lo visto. Una copia de algo jamás va a transmitir la misma sensación que la verdadera. El hombre, hoy en día, busca la manera de hacer las cosas más rápido, más fácil y en mayor cantidad, en función de sus ingresos económicos. Sin embargo, esta necesidad de producción masiva ha hecho que la apreciación de la realidad y de la vida haya ido cambiando cada vez más. La demanda aumenta día con día en un siglo acelerado y que se caracteriza por estar en constante cambio, y en estos tiempos la gente ya no encuentra la necesidad de detenerse para apreciar el arte de vivir como tal, y así es como las cosas van perdiendo su valor.