Malos Hábitos y Anquiloglosia: Implicaciones en la Salud Bucal

**EXAMEN DE SALUD**

Como parte del examen de salud básico que se debe realizar a los usuarios que ingresan al Programa CERO, es importante además tener en cuenta la pesquisa de malos hábitos como la succión no nutritiva y la presencia de anquiloglosia.

**I. Malos Hábitos: Hábito de Succión No Nutritiva (HSNN)**

El crecimiento maxilofacial está determinado genéticamente, pero en su desarrollo también influyen factores como función, oclusión, articulación y postura craneal. Entre los principales HSNN se encuentra la succión de chupete y succión digital.

1. Succión de chupete:

Comienza sobre los primeros 6 meses de vida. Es el hábito de succión no nutritiva más frecuente. Hay mucha controversia sobre la edad a la que se debe quitar el chupete. Hay estudios que sugieren que es posible disminuir el peligro de estas malposiciones pidiéndoles a los padres que reduzcan el tiempo de chupete al niño, ya que al cesar el hábito, con menos de tres años, se curan espontáneamente.

2. Succión digital:

Para la mayoría de los autores la succión digital es una de las situaciones más nocivas durante el desarrollo de la oclusión normal. Comienza en la vida fetal (29 semana de gestación), aunque desde el nacimiento hasta los 2 años se considera normal. Cuando se produce la erupción de la dentición temporal sucede un cambio en el patrón deglutorio y de masticación, y es a partir de aproximadamente los cuatro años de edad cuando la persistencia de los hábitos nocivos influye más negativamente en el desarrollo originando maloclusiones. Además, a partir de los 4-5 años de edad aumenta el rechazo social ante el hábito, lo que puede alterar el desarrollo emocional del niño. La prevalencia que citan los diferentes autores oscila entre el 1,7% y el 47%; estas diferencias pueden explicarse por la edad a la que se realice el estudio, pues mientras en las primeras semanas de vida este hábito es muy frecuente al responder a un reflejo innato, conforme el niño va creciendo la frecuencia disminuye.

Las maloclusiones más frecuentes que se asocian al hábito de succión digital son: mordida abierta anterior, protrusión de incisivos superiores, retroinclinación de incisivos inferiores, aumento del resalte, clase II, paladar ojival y mordida cruzada. Las principales terapias que se utilizan para evitar la succión digital son:

  • Tratamientos para modificar la conducta: Reforzamiento diferencial, técnicas aversivas (sustancias líquidas de sabor desagradable impregnadas en los dedos del niño, etc), técnicas de prevención de respuesta (brazaletes que impiden doblar el codo, apósitos en los dedos, uso de guantes, etc).
  • Dispositivos ortodóncicos fijos/extraibles: Existen de diferentes diseños, siendo el más común la reja lingual que actúa de forma pasiva como barrera mecánica contra la succión.
  • Terapia miofuncional: Incluye un conjunto de procedimientos y técnicas para reeducar el patrón muscular inadecuado existente (incompetencia labial, deglución infantil, alteración del funcionamiento de la musculatura perioral).

**II. Anquiloglosia: Anomalías del Frenillo Corto**

En los últimos años, se le ha dado un mayor énfasis a la duración de la lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses de vida. En este sentido, se han enfocado diversas líneas de investigación en el manejo de las dificultades para alimentarse en el periodo neonatal. Una alteración que dificulta el funcionamiento adecuado de los mecanismos de succión-deglución es la anquiloglosia, la cual limita los movimientos linguales impidiendo que el neonato pueda alimentarse de manera correcta.

El frenillo lingual se clasifica en anterior o posterior en función del lugar de anclaje del mismo a la lengua. Se diferencia cuatro tipos de frenillo lingual: el tipo 1 y tipo 2 (frenillos anteriores) y el tipo 3 y 4 o submucoso (frenillos posteriores). A continuación se detalla un resumen de las características de cada tipo de frenillo:

– Frenillo tipo 1:

El frenillo se ancla en la punta de la lengua, que suele presentar forma de corazón, y se observa a simple vista. La movilidad de la lengua se encuentra muy restringida, no siendo posible elevarla ni extenderla.

– Frenillo tipo 2:

El frenillo se inserta un poco más atrás que en el tipo 1, a una distancia de entre 2 y 4 mm de la punta de la lengua. Menos restrictivo, impide también la elevación y extensión de la lengua, aunque en menor medida.

– Frenillo tipo 3:

El frenillo se inserta más atrás que en los dos tipos anteriores, la extensión de la lengua no suele verse comprometida, pero si la elevación. A simple vista la lengua parece normal. Este tipo de frenillo presenta también un componente submucoso que no es visible a simple vista.

– Frenillo tipo 4 o submucoso:

El frenillo como tal no se ve a simple vista, se encuentra bajo una capa de tejido submucoso y restringe casi en su totalidad el movimiento de la lengua, que se ve anclada en el suelo de la boca, sin elevarse y con aspecto compacto. El movimiento de la lengua suele ser asimétrico. Los bebés que presentan este tipo de frenillo suelen presentar la boca y la lengua torcidas al abrirla.

El tratamiento más común de la anquiloglosia es la frenotomía. Esta debe ser realizada en forma oportuna ya que los resultados mejoran la percepción de la lactancia materna, la cantidad de leche que los lactantes toman y sobre todo mejoran la sensación de dolor de la madre, por lo que es esencial la pesquisa por parte del odontólogo, para la pronta derivación a fin de evitar complicaciones mayores.