Pensamiento cuasimagico
Defina el concepto de pensamiento complejo, según Edgar Morín y asócielo a la crítica arquitectónica
Para hablar del pensamiento complejo, el autor desarrolla una serie de conceptos y puntos críticos que llevan a entender la noción:
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Comienza haciendo referencia a dos polos que conciernen la complejidad, el polo empírico y el polo lógico.
Lo empírico tiene que ver con el campo de las experiencias. La dificultad empírica se basa en el hecho de que nada está aislado en el Universo, y que todo está en relación. Según el autor, nos encontramos en la “era planetaria”, en la que todo lo que ocurre en algún punto del globo puede repercutir en todos los otros puntos del mismo. Lo lógico tiene que ver con las leyes que articulan el pensamiento, en tanto la dificultad lógica aparece cuando la lógica deductiva no es suficiente para dar una prueba en un sistema de pensamiento y surgen contradicciones insuperables.
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En segundo lugar, el autor hace referencia a la idea de que “no solo una parte está en el todo, sino que también el todo está en la parte”. El ejemplo más claro que da de esta idea es la enseñanza por materias específicas en la escuela que establecen separaciones absolutas entre los temas. El autor sostiene entonces que nuestro pensamiento es disyuntivo y reductor
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En tercer lugar si tenemos grabadas en nosotros esas formas de pensamiento que nos llevan a separar y a simplificar estos grandes problemas, es debido a que reina en nosotros un paradigma profundo que gobierna nuestras ideas sin que nosotros nos demos cuenta.
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En cuarto lugar, el autor hace referencia a la idea de organización, que se ve plasmada a su vez en las ideas de máquina humana y máquina artificial.
Sostiene que la organización es lo que liga un sistema, que es un todo constituido de elementos diferentes, ensamblados y articulados, afirmando que el todo tiene una cantidad de propiedades y cualidades que no tienen las partes cuando están separadas. El autor concluye entonces con la idea que es necesario pensar la complejidad como base de toda realidad viviente.
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En quinto lugar, Morín habla de la idea de realidad como una percepción dada gracias a nuestras estructuras mentales que nos permiten organizar nuestra experiencia en el tiempo y espacio. Habla entonces de la idea de constructivismo. Lo que conocemos no es el mundo en sí, sino el mundo a través de nuestro conocimiento, generando una adherencia inseparable entre nuestro espíritu y el mundo
El punto de vista de la complejidad nos dice entonces que es impensable creer que se puede conocer el mundo sin estar influidos por la percepción individual de la realidad.
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En sexto lugar, se desarrolla la idea de la complejidad humana, sosteniendo que el hombre es biológicocultural, especie-individuo y sociedad-individuo; es de naturaleza multidimensional.
En el hombre hay, además, una mezcla de dos pensamientos que conviven naturalmente: un pensamiento racional, empírico y técnico, junto a un pensamiento simbólico, mágico y mitológico.
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En séptimo lugar, el autor habla de la complejización de la política con el paso del tiempo, haciendo referencia a una política que ahora concierne a todos los aspectos humanos, una política multidimensional.
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En octavo lugar el autor establece la diferencia principal entre pensamiento simple y complejo, presentando las ideas de programa y estrategia. Un programa es una secuencia de actos decididos de antemano que funcionan uno tras otro sin variar. La estrategia, en cambio, es un escenario de acción que puede modificarse en función a las informaciones y de los acontecimientos que se sobrevengan en el curso de acción.
En el caso de la critica arquitectónica, esta fue variando durante el S.XX, en donde según Solá-Morales se detecta que el crítico ha ido adoptando diversas actitudes ante las cambiantes situaciones, lo que manifiesta con esta actividad crítica no es algo bien definido. En el panorama actual los rasgos de la arquitectura contemporánea son la complejidad y la multiplicidad. La arquitectura actual presenta un cuadro muy disperso de prácticas que hace difícil explicar totalmente o definitivamente la situación, y aquí es donde hace su aporte teórico el pensamiento complejo. Esta situación lleva a suponer que no hay teorías únicas, ni tampoco abordajes categóricos desde donde ensayar juicios. Es así que esta gran diversidad, hacen que la única tarea de la crítica sea la de medir y acotar con toda la precisión que sea posible el estado de las cosas en que nos hallamos. Una forma de pensamiento complejo es el ensayo que propone Montaner entendido como una crítica flexible y abierta que nos permite hacer un análisis crítico de cada situación particular teniendo presente siempre la incertidumbre. Nada está realmente aislado en el mundo y todo está en relación, encontramos complejidad en diferentes disciplinas como la física, la política, la arquitectura, estamos en la era planetaria, donde todo lo que ocurre en un punto, repercute en otros.