Protocolos de Evaluación Clínica para la Salud Adolescente: Exploración Genital y Agudeza Visual
Evaluación Clínica Integral en Adolescentes
1. Exploración Genital y Perineal
La exploración genital y perineal es fundamental en la evaluación de la salud adolescente, adaptándose a la edad y el historial del paciente.
1.1. Examen General
- Pene: Evaluar longitud, lesiones, corrimiento del prepucio, hipospadias o epispadias.
- Testículos: Verificar ausencia, tamaño, masas, varicocele, hidrocele.
- Perineo y Genitales: Evaluar lesiones en varones y mujeres.
1.2. Consideraciones en Adolescentes con Inicio de Relaciones Sexuales
Además de lo anterior, si corresponde, se deben realizar las siguientes exploraciones y tomas de muestra:
- Inspeccionar el cuello uterino y la vagina con espéculo.
- Realizar tacto vaginal.
1.2.1. Muestras y Pruebas Específicas (Si Corresponde)
- Tomar muestras para citología oncológica cervical (PAP).
- Tomar muestra de flujo vaginal para diagnóstico de ITS, previo examen y valoración de las características del flujo.
- Tomar muestra de secreción uretral para diagnóstico de ITS. El cribado de ITS incluye el seguimiento.
- Realizar un VDRL (serología para sífilis) en todos los adolescentes que tengan factores de riesgo, con estricto seguimiento y tratamiento.
- Penescopia para valoración de infección por VPH (Virus del Papiloma Humano) y otras lesiones, en los grupos de riesgo.
- Colposcopia, ante PAP anormal.
- Tacto rectal, si por algún motivo estuviera indicado.
2. Evaluación de la Agudeza Visual
La valoración de la agudeza visual se considera un indicador trazador del estado de salud ocular de un individuo. El instrumento utilizado para este fin es la Cartilla de Snellen, que permite determinar la magnitud de la agudeza visual de una persona; en otras palabras, valora la capacidad de percibir detalles en el entorno.
2.1. Equipo y Ambiente Necesarios
- Elegir un ambiente amplio, con luz natural o iluminación adecuada.
- Cartilla de Snellen.
- Puntero.
- Oclusores.
- Hojas de registro e historia clínica.
La Cartilla de Snellen consta de un conjunto de letras de diferentes tamaños, distribuidas en filas equidistantes. En el lado izquierdo de cada fila se aprecia una valoración en forma de fracción, donde el numerador mantiene el mismo valor en cada fila y es indicativo de la distancia a la que se realiza la prueba (20 = veinte pies o 6 metros). Por otro lado, el denominador varía en cada fila y refleja la magnitud del compromiso visual de la persona. Así, una persona que solo logra ver la letra superior de la cartilla a 6 metros (20 pies) tiene una agudeza visual de 20/200.
Esta cartilla tiene dos caras: una con filas de letras «E» en diferentes posiciones, utilizada para la evaluación de niños, personas iletradas o poco colaboradoras. La otra cara, con un conjunto de letras, permite la evaluación de personas alfabetizadas. Asimismo, se observan una línea horizontal verde y otra roja que delimitan un conjunto de filas de letras, cuya visualización indica el rango de agudeza visual considerado normal para la población general. Para el registro se utilizan las siguientes siglas de uso común:
- AV: Agudeza visual
- OD: Ojo derecho
- OI: Ojo izquierdo
- SC: Sin corrección (sin lentes correctivos)
- CC: Con corrección (con lentes correctivos)
2.2. Procedimiento de Evaluación
- La evaluación de la agudeza visual debe realizarse en ambientes con buena iluminación, preferentemente con luz natural, evitando que la fuente de luz se refleje sobre la cartilla de Snellen.
- La cartilla debe colocarse a una distancia de 6 metros en línea recta con el/la adolescente a examinar, asegurando que sus ojos estén a la altura de la línea verde de la misma.
- Se preguntará al adolescente si sabe leer o reconoce las letras de la cartilla, para seleccionar la cara adecuada a utilizar.
- Si el adolescente utiliza lentes correctivos para visión de lejos, deberá colocárselos antes de iniciar la prueba.
- La agudeza visual se evalúa ojo por ojo, comenzando por convención con el ojo derecho y luego alternando con el izquierdo. Mientras se examina un ojo, el otro debe cubrirse con la palma de la mano del adolescente o con un oclusor de madera, sin ejercer presión sobre el ojo. Evitar cubrir el ojo con los dedos.
- Para una evaluación precisa, se debe indicar a los familiares que no intervengan ni induzcan las respuestas del examinado durante la prueba.
- El examinador debe colocarse a un lado de la cartilla y, con una vara o lapicero, señalar debajo de cada letra, comenzando por la letra superior y finalizando en aquella que el paciente no vea o en la que se equivoque. En el caso de personas iletradas, se le pedirá al paciente que señale con su mano hacia dónde se dirigen las «patitas» de la letra «E»; en este último caso, se puede confeccionar una letra «E» en papel o cartón para que el paciente la utilice como respuesta.
- El examinador anotará la fracción de la última línea que el paciente leyó correctamente con cada ojo, lo cual corresponderá a la evaluación de la agudeza visual monocular. Por ejemplo, si el adolescente leyó correctamente con sus lentes puestos la fila de letras encima de la línea roja con el ojo derecho y la fila encima de la línea verde con el ojo izquierdo, entonces deberá anotar:
- Todo adolescente cuya agudeza visual no se encuentre en el rango de normalidad (20/20 – 20/25) deberá ser derivado a un profesional oftalmólogo para determinar la causa.
2.3. Consideraciones Importantes
- En niños y adolescentes, predominan problemas como vicios de refracción no corregidos (necesidad de lentes), ambliopía (ojo perezoso), estrabismo (ojos desviados) y cataratas (pupila blanca).
- En personas adultas y adultas mayores, existe una mayor prevalencia de problemas oftalmológicos como cataratas, glaucoma, retinopatía diabética, degeneración macular relacionada con la edad y vicios de refracción no corregidos.