Servicios Sociales y Políticas Europeas frente a Pobreza y Exclusión
Servicios Sociales frente a la Pobreza y la Exclusión Social
El Debate Conceptual sobre Pobreza y Exclusión Social en la Actualidad
El capitalismo ha dado lugar a distintas formas de pobreza y al concepto de exclusión. Ante esta situación, el Estado de Bienestar intentó desterrar la pobreza a través de los sistemas de protección social. La exclusión social supone la ruptura del equilibrio entre contribuciones-retribuciones (intercambio social e intergeneracional). Una protección que surge con el objetivo de terminar definitivamente con el paternalismo y la dependencia. Estos sistemas se volvieron más complejos y dieron lugar a unas estructuras jurídico-políticas que ponían en marcha políticas públicas de carácter social. Para la justificación de dichas políticas fue necesario:
- La elaboración de categorías y definición de bien público y bien colectivo (para todo el mundo, o para un grupo de personas).
- Comprender la rentabilidad de dichas políticas (ya que los beneficios no se pueden medir como cualquier bien del sistema mercantil).
- Aplicación del criterio moral.
En la crisis del Estado de Bienestar se pudo observar cómo estas políticas han sido incapaces de eliminar la pobreza y la exclusión, convirtiendo a estos en los principales problemas de la sociedad. Puesto que se ha iniciado una nueva etapa caracterizada por el incremento de desigualdad social, vulnerabilidad y exclusión de un número cada vez mayor de personas (muchas de ellas jóvenes con el umbral de poder convertirse en población activa).
Los grandes cambios sociales obligaron a una reconceptualización de la precariedad, puesto que antes esta solo atacaba a ciertos colectivos y ahora se trata de una situación que afecta a un grupo de personas mucho más heterogéneo. Esto se debe al aumento de estratos sociales desprotegidos por la crisis del Estado de Bienestar. A esta desprotección de cobertura pública hay que añadir la precariedad laboral actual, así como la escasez de redes sociales… Por eso debemos ver la exclusión como una acumulación de barreras que dejan fuera de la participación en la vida social a quienes la padecen. Se refiere pues a:
- Pobreza económica extrema.
- Grandes dificultades de acceso al empleo.
- Acceso muy limitado a la educación.
- Dificultades para hacer efectivo el acceso a la salud.
- Falta de acceso a una vivienda digna.
- Grandes dificultades en el ámbito de las relaciones familiares y sociales.
El modelo de protección social en España, basado más en las prestaciones económicas que en la dotación de servicios. (El volumen de recursos económicos de una familia es un indicador muy sólido de la posición social alcanzada, aunque no el único). Dos aproximaciones sirven de medida de la desigualdad socioeconómica:
- La pobreza relativa (o riesgo de pobreza).
- La pobreza extrema o absoluta (o persistente).
En el año 2000, en el Consejo Europeo de Lisboa se definieron unos indicadores sobre exclusión social válidos para todos los Estados miembros, para poder medir el progreso del objetivo marcado: eliminar la pobreza antes de 2010. Los indicadores fueron:
- Tasa de renta baja (inferior al 60% de la renta mediana del país).
- Distribución de la renta.
- Persistencia de esa renta baja.
- Tasa de desempleo de larga duración.
- Cohesión regional.
- Personas que viven en hogares en los que no trabajan ninguno de los miembros.
- Personas que abandonan prematuramente la enseñanza.
- Esperanza de vida al nacer.
- Percepción del propio estado de salud.
Tanto la pobreza, como la exclusión social y las desigualdades están poniendo en peligro la cohesión social, especialmente en algunos grupos sociales que ven cómo se agravan las dificultades económicas debido a los recortes en las prestaciones sociales.
La Actuación Europea en la Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social
La crisis energética de 1973 rompió las expectativas de cambio económico. En el año 1975 se puso en marcha el I Programa Europeo de Lucha contra la Pobreza que estaba marcado por la preocupación en su extensión. El II Programa se inició en 1985, que insistía en la lucha contra determinados colectivos desfavorables.
En 1987 se firmó el Acta Única Europea, a partir de 1989 se luchaba por alcanzar “la igualdad de remuneración entre hombres y mujeres, la protección infantil, de adolescentes, ancianos y disminuidos”. Este mismo año se aprobó el III Programa Europeo; que proponía una intervención integral apoyada en tres dimensiones:
- Pluridimensionalidad de la pobreza.
- La participación de los menos desfavorecidos.
- El partenariado (la participación de agentes sociales, políticos y económicos).
En 1992 se adoptó una recomendación del Consejo Europeo sobre las rentas mínimas que convertía la garantía de ingresos para todos los ciudadanos. Unos años más tarde, el Libro Verde y el Libro Blanco de la Política Social reafirmaron que la pobreza tenía que ampliar su definición, incluyendo la participación en el mundo del trabajo, el acceso a una vivienda, a la educación, sanidad y a todos los servicios.
También en el año 2000 se incluyen programas de integración social y se aprueba un nuevo programa de acción comunitaria de lucha contra la discriminación. En la Cumbre de Niza se aprobó una nueva agenda de política social que contenía las prioridades de acción social y ya en el año 2001 se impulsó el IV Programa Europeo de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión y los planes anuales de lucha contra la exclusión, con una estrategia similar a la de empleo.