Bienestar Laboral y Comunicación Efectiva: Claves para la Motivación y la Asertividad
1. Motivación Laboral y Antecedentes
La motivación laboral es aquella que impulsa al individuo a realizar una actividad o a tener un determinado comportamiento en una situación concreta.
Antecedentes Históricos de la Motivación Laboral
La llegada de la industrialización y la desaparición de los talleres artesanos a principios del siglo XVIII trajo consigo una mayor complejidad en las relaciones personales del entorno laboral, un descenso de la productividad y un aumento de la desmotivación de los trabajadores.
A mediados del siglo XX surgieron algunas teorías que estudiaban la motivación, y a partir de entonces se empezó a relacionar la motivación del trabajador con su rendimiento laboral y su satisfacción personal. A partir de entonces, las empresas decidieron analizar qué buscan las personas en el trabajo, cuál es su escala de necesidades, qué deseos, etc. El fin último de estos análisis era conseguir que el trabajador se sintiera realizado como persona dentro de la empresa.
La importancia que en la actualidad las empresas conceden a la motivación del trabajador se percibe por el esfuerzo que estas invierten en realizar encuestas y estudiar el nivel de satisfacción de sus empleados, así como la formación que dan a los directivos con el fin de proporcionarles recursos para motivar a los trabajadores.
2. Factores Clave para la Motivación de los Trabajadores en el Ámbito Laboral
Para motivar a los trabajadores, hay que tener en cuenta su escala de valores, su cultura, la situación económica del entorno en el que viven o las metas u objetivos que pretenden alcanzar mediante el trabajo. La personalidad y las necesidades de los trabajadores son los principales factores que directivos y gerentes deben valorar a la hora de garantizar la motivación de sus empleados.
Para los trabajadores, las principales fuentes de motivación son:
- El dinero: A medida que un trabajador va mejorando en su estatus económico, disminuye la importancia que le da al dinero. Por tanto, el dinero no motivará de la misma manera a un trabajador que tiene sus necesidades cubiertas que a un trabajador que lo necesita para subsistir.
- El reconocimiento dentro de la empresa: Un reconocimiento continuo puede dejar de ser motivador y debe ser opcional a la tarea realizada.
- El reconocimiento social: Un trabajo valorado y reconocido por la sociedad es una fuente de motivación por sí mismo.
3. Acoso Laboral (Mobbing)
Es la presión y el maltrato psicológico en el ámbito del trabajo, ejercido por una persona o por un grupo hacia otra de modo directo o indirecto, de forma sistemática y durante un tiempo prolongado. El principal motivo por el que se suele dar el acoso es la envidia por la valía que los acosadores reconocen en la víctima y que no perciben en sí mismos.
En el acoso laboral se distinguen varias fases:
- En la fase inicial, el acosador no se muestra violento, sino más bien al contrario: despliega sus capacidades seductoras con la víctima y su entorno con el fin de conocer las debilidades de la víctima y hacer creer al entorno que siempre se ha portado bien con ella.
- Una vez superada esta fase, es cuando surge el conflicto: el enfrentamiento comienza siendo un hecho puntual para, posteriormente, ir convirtiéndose en algo crónico, momento en el que comienza el acoso propiamente dicho. El acosador humillará y perjudicará a su víctima.
Como consecuencia del acoso laboral, la víctima empezará a perder seguridad en sí misma y, a partir de ese punto, la situación puede desembocar en graves problemas tanto en el plano psicológico como en el sociológico.
4. Asertividad en el Entorno Profesional
La asertividad se define como la facultad o cualidad de una persona de poder expresar sus sentimientos y opiniones de la manera más adecuada e inteligible para los demás, sin ofender o atacar a las personas que tienen distintos puntos de vista.
Una persona asertiva es aquella capaz de expresar sentimientos, actitudes, deseos y opiniones de un modo apropiado para cada situación, respetando las conductas y opiniones de los demás y resolviendo adecuadamente los posibles problemas que puedan surgir.
En general, una persona asertiva debe:
- Mostrar satisfacción con su trabajo.
- Comunicar su disconformidad cuando exista y buscar soluciones.
- Tomar la iniciativa cuando cree que algo no va bien.
- Hacerse responsable de sus actos, trabajando en todo momento con su equipo para alcanzar las metas propuestas.