Estrategias Pedagógicas para el Desarrollo Integral en Primaria: Emociones, Convivencia y Valores
Educación Emocional
- Autoconcepto y autoestima: Actividad «El Burro», donde las buenas palabras impulsan el avance.
- Comunicación: Es la base de las relaciones interpersonales. Comprender y comunicar de forma adecuada las propias emociones afectará a muchos aspectos del desarrollo y al éxito en la vida. Fomentar la escucha activa y la expresión oral.
- Asertividad y habilidades sociales: La asertividad es una habilidad social que significa expresar los propios sentimientos, deseos, derechos y opiniones sin agredir o menoscabar a los demás. La persona asertiva se caracteriza por ser honesta. Actividad: El lenguaje corporal.
- Resolución de conflictos: Debe abordarse de manera que resulte positiva para los alumnos, es decir, de forma cooperativa. Actividad: Emplear el autocontrol.
Cohesión de Grupo y Disciplina Escolar
- Gestión democrática de las normas: El buen funcionamiento de los grupos se basa en la existencia de normas que regulan sus relaciones. Establecerlas de forma democrática favorecerá la convivencia.
- Gestión de la tarea: Dar participación al alumnado en la elección de las tareas que se realicen, así como en la metodología que se va a utilizar.
- Trabajo en grupo: Son las formas de trabajo que mejor aceptan los alumnos y que ayudan al profesorado a motivarlos.
- Test sociométrico: Técnica para conocer en un momento dado cuál es la estructura grupal: líderes, alumnos rechazados y la cohesión de un grupo.
Educación en Valores
La educación en valores está considerada como uno de los ejes principales que hay que tener en cuenta para mejorar la convivencia.
Por un lado, se trabajan los grandes valores universales: la paz, la solidaridad, la responsabilidad, la cooperación y el respeto, con actividades y dinámicas específicas creadas para ello. A su vez, se deben trabajar valores más cercanos y manejables utilizando temas más próximos y que apoyan el trabajo de los grandes valores como, por ejemplo, los siguientes:
- El diálogo: Saber escuchar y saber expresar con claridad los propios pensamientos. Se puede utilizar la técnica de repetir o resumir las ideas que ha expresado otro compañero.
- Sentido crítico: Aprender a defenderse de la propaganda comercial y de la presión del grupo. Diferenciar lo que realmente necesitamos de lo que queremos.
- Saber negociar: La negociación supone buscar alternativas y elegir la mejor, la que sea más justa para todas las partes. Se puede desarrollar llegando a acuerdos tanto en las tareas domésticas (hora de llegar a casa, colaborar en casa) como en las tareas escolares (reparto de trabajo con los compañeros de clase, participando en las asambleas de clase).
- La empatía: Reconocer al otro. Por medio de ejemplos y reflexiones individuales, aprendiendo a respetar a los demás.
- La solidaridad: Disfrutar al compartir las cosas materiales.
Transversalidad
Los temas transversales se abordan desde todas las áreas del currículo, tanto verticalmente (es decir, a lo largo de todas las etapas) como horizontalmente (es decir, a lo largo de todas las áreas de un mismo curso). Hablar de enseñanza transversal, en consecuencia, no es introducir contenidos nuevos que no estén reflejados en el currículo de las áreas, sino organizar algunos de esos contenidos alrededor de un determinado eje educativo a través de las orientaciones incluidas en los Proyectos Curriculares de Etapa.
Los temas transversales tienen una gran importancia en la educación para la convivencia y pueden trabajarse de distintas maneras:
- Incorporando contenidos conceptuales y procedimentales específicos de estos temas a las áreas ordinarias de cada etapa, especialmente a las más cercanas.
- Incorporando los contenidos actitudinales y de valores propios de estos ámbitos a las áreas con las que tienen mayor relación, sin olvidar su presencia en las demás.
- En ocasiones, se pueden completar estas actuaciones con programas específicos, bien dentro del Plan de Acción Tutorial, bien mediante conferencias, etc., que se han considerado útiles debido al contexto y situación concreta del centro.
En cualquier nivel en los que se trabajen los temas transversales, será cada profesor el que deberá asumir y extender estos contenidos para, de esta manera, ayudar a prevenir el acoso entre iguales, los conflictos de relación profesor-alumno, la violencia de género o los conflictos multiculturales.
Educación Emocional
- Autoconcepto y autoestima: Actividad «El Burro», donde las buenas palabras impulsan el avance.
- Comunicación: Es la base de las relaciones interpersonales. Comprender y comunicar de forma adecuada las propias emociones afectará a muchos aspectos del desarrollo y al éxito en la vida. Fomentar la escucha activa y la expresión oral.
- Asertividad y habilidades sociales: La asertividad es una habilidad social que significa expresar los propios sentimientos, deseos, derechos y opiniones sin agredir o menoscabar a los demás. La persona asertiva se caracteriza por ser honesta. Actividad: El lenguaje corporal.
- Resolución de conflictos: Debe abordarse de manera que resulte positiva para los alumnos, es decir, de forma cooperativa. Actividad: Emplear el autocontrol.
Cohesión de Grupo y Disciplina Escolar
- Gestión democrática de las normas: El buen funcionamiento de los grupos se basa en la existencia de normas que regulan sus relaciones. Establecerlas de forma democrática favorecerá la convivencia.
- Gestión de la tarea: Dar participación al alumnado en la elección de las tareas que se realicen, así como en la metodología que se va a utilizar.
- Trabajo en grupo: Son las formas de trabajo que mejor aceptan los alumnos y que ayudan al profesorado a motivarlos.
- Test sociométrico: Técnica para conocer en un momento dado cuál es la estructura grupal: líderes, alumnos rechazados y la cohesión de un grupo.
Educación en Valores
La educación en valores está considerada como uno de los ejes principales que hay que tener en cuenta para mejorar la convivencia.
Por un lado, se trabajan los grandes valores universales: la paz, la solidaridad, la responsabilidad, la cooperación y el respeto, con actividades y dinámicas específicas creadas para ello. A su vez, se deben trabajar valores más cercanos y manejables utilizando temas más próximos y que apoyan el trabajo de los grandes valores como, por ejemplo, los siguientes:
- El diálogo: Saber escuchar y saber expresar con claridad los propios pensamientos. Se puede utilizar la técnica de repetir o resumir las ideas que ha expresado otro compañero.
- Sentido crítico: Aprender a defenderse de la propaganda comercial y de la presión del grupo. Diferenciar lo que realmente necesitamos de lo que queremos.
- Saber negociar: La negociación supone buscar alternativas y elegir la mejor, la que sea más justa para todas las partes. Se puede desarrollar llegando a acuerdos tanto en las tareas domésticas (hora de llegar a casa, colaborar en casa) como en las tareas escolares (reparto de trabajo con los compañeros de clase, participando en las asambleas de clase).
- La empatía: Reconocer al otro. Por medio de ejemplos y reflexiones individuales, aprendiendo a respetar a los demás.
- La solidaridad: Disfrutar al compartir las cosas materiales.
Transversalidad
Los temas transversales se abordan desde todas las áreas del currículo, tanto verticalmente (es decir, a lo largo de todas las etapas) como horizontalmente (es decir, a lo largo de todas las áreas de un mismo curso). Hablar de enseñanza transversal, en consecuencia, no es introducir contenidos nuevos que no estén reflejados en el currículo de las áreas, sino organizar algunos de esos contenidos alrededor de un determinado eje educativo a través de las orientaciones incluidas en los Proyectos Curriculares de Etapa.
Los temas transversales tienen una gran importancia en la educación para la convivencia y pueden trabajarse de distintas maneras:
- Incorporando contenidos conceptuales y procedimentales específicos de estos temas a las áreas ordinarias de cada etapa, especialmente a las más cercanas.
- Incorporando los contenidos actitudinales y de valores propios de estos ámbitos a las áreas con las que tienen mayor relación, sin olvidar su presencia en las demás.
- En ocasiones, se pueden completar estas actuaciones con programas específicos, bien dentro del Plan de Acción Tutorial, bien mediante conferencias, etc., que se han considerado útiles debido al contexto y situación concreta del centro.
En cualquier nivel en los que se trabajen los temas transversales, será cada profesor el que deberá asumir y extender estos contenidos para, de esta manera, ayudar a prevenir el acoso entre iguales, los conflictos de relación profesor-alumno, la violencia de género o los conflictos multiculturales.