Desarrollo Cognitivo en Educación Primaria: Teoría del Aprendizaje Significativo y Etapas Psicoevolutivas

Teoría del Aprendizaje Significativo de Ausubel

Según Ausubel, el aprendizaje del alumno depende de la estructura cognitiva previa que se relaciona con la nueva información. En el proceso de orientación del aprendizaje, es importantísimo conocer la estructura cognitiva del alumno; no sólo se trata de saber la cantidad de información que posee, sino cuáles son los conceptos y proposiciones que maneja, así como de su grado de estabilidad. Se da la necesidad de un cambio conceptual (desarrollo conceptual).

Estrategias para Provocar el Cambio Conceptual en el Alumno

Consta de tres fases:

  1. Exploración de las ideas previas de los alumnos: no sólo para el conocimiento del profesor, sino para que los alumnos tomen conciencia de sus creencias y puntos de vista.
  2. Confrontación de ideas propias y de otros compañeros, buscando la validez y límites de cada una. Algunos autores apoyan la creación en este momento de un conflicto entre lo que piensan y un caso que no puedan resolver con sus ideas (conflicto cognitivo).
  3. Acomodación y aplicación de nuevas ideas: se trata de que los alumnos resuelvan problemas prácticos utilizando los nuevos conceptos y presenten soluciones a la clase.

Según Posner y otros (1982), para que se produzca el cambio conceptual es necesario que:

  • Exista insatisfacción con las ideas previas, para lo cual el profesor debe presentar un número suficiente de problemas que el esquema no pueda resolver.
  • Las ideas nuevas sean inteligibles, plausibles y fructíferas.

Uno de los modelos para la enseñanza de las ciencias basados en el cambio conceptual más conocido es el de Driver (1986, 1988). Se estructura en torno a una secuencia de actividades específicamente elaboradas para conseguir dicho cambio en 4 fases:

  • Orientación: destinada a despertar el interés de los alumnos por el tema.
  • Explicitación: consiste en la exposición por los alumnos de sus ideas, que permite la identificación y clarificación de las mismas.
  • Reestructuración: donde han de modificarse las ideas de los alumnos por medio de diferentes estrategias que pueden incluir el uso combinado de contraejemplos o actividades destinadas a provocar insatisfacción con las propias ideas.
  • Revisión del cambio de ideas: se trata de comparar las nuevas ideas con las iniciales.

No es fácil evitar la construcción de conceptos erróneos, hay muchas posibilidades de errar, y no existe estrategia alguna de enseñanza que lo pueda impedir por completo. El reto está en cómo ayudar a los maestros para que sus estudiantes construyan y reconstruyan sus esquemas personales en el plano conceptual, y sus actitudes hacia las ciencias de manera que fomente su competencia cognoscitiva.

Obstáculos Didácticos: Nivel Psicoevolutivo de los Alumnos

Para Piaget, las estructuras mentales, que son las que deciden la manera en que un sujeto tiene acceso al conocimiento del mundo, no son innatas sino adquiridas. Estas estructuras se van construyendo y haciéndose progresivamente más complejas a medida que el sujeto interacciona con el mundo físico y social y madura biológicamente, siempre partiendo de estructuras mentales más simples. Los niveles psicoevolutivos que podemos encontrar en los niños/as de Primaria son:

Periodo Preoperatorio (hasta los 7-8 años)

En este periodo, el niño adquiere una determinada comprensión de las palabras y de los conceptos, y empieza a describir el mundo exterior, así como sus propios pensamientos y sentimientos. Las características de este niño son:

  • Es egocéntrico.
  • Centra su atención en una sola propiedad de un objeto, no comprende que tenga más de una.
  • Sus explicaciones son mágicas.
  • Sus acciones necesitan con frecuencia del método ensayo-error.
  • Son incapaces de revertir las acciones mentales (irreversibilidad).

Periodo de las Operaciones Concretas (hasta los 11-12 años)

Aquí el niño/a ya no precisa manipular los objetos reales para entender sus relaciones, sin embargo, sus operaciones mentales se limitan a sus experiencias concretas. Si el niño no posee experiencias directas de un fenómeno, razona por analogía con alguna experiencia anterior. Las características de este niño:

  • Proyecta mentalmente una serie de acontecimientos o acciones relevantes para una determinada meta.
  • Es capaz de revertir las acciones mentales (reversibilidad).
  • Percibe que los objetos no cambian de peso, aunque cambien de forma (conservación).
  • Se da cuenta de que las partes de un todo están relacionadas; por tanto, puede clasificar y ordenar objetos.
  • Comprende el espacio geográfico y el tiempo histórico.