Desarrollo Integral en la Primera Infancia: Psicomotor, Cognitivo y Socioemocional
T2. Bases del Desarrollo Psicomotor
El Desarrollo Psicomotor
El desarrollo psicomotor implica el control de pequeños y grandes grupos de músculos. Si no hay control sobre los grandes, difícilmente habrá un buen desarrollo de los pequeños, es decir, la **motricidad fina**. Primero se produce el desarrollo de la **motricidad gruesa** desde que el bebé sostiene su cabeza, se sienta sin apoyo, gatea. Más adelante, cuando descubre sus manos, se desarrolla la motricidad fina: hacer la pinza, dar palmadas, construir torres.
La adquisición de habilidades le permitirá al niño alcanzar la independencia a nivel motor y lograr grandes avances a nivel cognitivo. La **proliferación de las dendritas** y la **mielinización de los axones** son los responsables fisiológicos de los cambios en el niño. Aparecerán, se integrarán y, con el tiempo, desaparecerán los **reflejos primitivos**, controlados por el **Sistema Nervioso Central (SNC)**, que permitirán ejecutar respuestas voluntarias a nivel postural y motor.
Hitos del Desarrollo Psicomotor
El desarrollo de funciones básicas de forma ordenada supone un nivel cada vez más alto de organización y maduración cerebral (ej.: el niño aprenderá a caminar antes de empezar a correr). Se alcanzan de manera variable. Los **factores reguladores** son:
- Endógenos (INTERNOS): Ritmo madurativo de la persona.
- Exógenos (EXTERNOS): Factores ambientales, estado de salud, nutrición.
Etapas del Desarrollo Psicomotor en los Primeros Años
(Están interrelacionadas, una asienta las bases de la siguiente)
- Comportamientos motrices primarios: Movimientos espontáneos e inconscientes.
- Competencias motrices fundamentales: Se desarrollan patrones motores básicos.
- Perfeccionamiento de las competencias motrices: Adquisición de nuevas conductas motrices.
Inicios del Desarrollo Motor
(El bebé carece de control sobre su cuerpo). Sus movimientos son fundamentalmente reflejos e involuntarios, con dependencia total del adulto.
- Movimientos reflejos/primarios: Movimientos automáticos e involuntarios que garantizan la supervivencia del bebé desde el momento de su nacimiento. Darán paso poco a poco a los reflejos posturales y a la motricidad voluntaria.
- Movimientos no reflejos: Se producen junto con los reflejos; su función es ejercitar los músculos del bebé para que estén preparados a la hora de desplazarse.
Algunos Reflejos Primarios:
- Reflejo de Moro: Reacción al sonido repentino o a la pérdida de apoyo en la cabeza. Se caracteriza por la extensión de brazos hacia adelante, apertura de manos, arqueo de espalda y estiramiento de piernas, seguido de un movimiento de abrazo con los dedos apretados en un puño.
- Reflejo de tracción (Hands Pulling): Se desarrolla cuando el reflejo de Moro empieza a desaparecer y permite desarrollar fuerza en manos y dedos. El bebé agarra con sus dos manos los dedos del adulto y, al tirar de él, se incorpora inconscientemente con los brazos semiflexionados.
- Reflejo tónico simétrico del cuello (RTSC): Se desarrolla e integra antes del gateo. A cuatro patas, si flexiona la cabeza (como mirando sus rodillas), los brazos también lo hacen, mientras que las piernas se estiran. Por el contrario, al extender la cabeza hacia atrás, los brazos se estiran y las piernas se doblan.
- Reflejo de succión: Al introducir un objeto en su boca, responde con movimientos rítmicos de succión.
- Reflejo de búsqueda: Al tocar su mejilla, mueve la cabeza para encontrar el objeto con la boca y succionar.
- Reflejo de presión palmar y plantar.
- Reflejo tónico laberíntico.
- Reflejo de marcha.
Conceptos Clave en el Desarrollo Motor
Son un conjunto de movimientos organizados que implican la coordinación de varias partes del cuerpo y que constituyen la base de habilidades motrices más especializadas y de la actividad deportiva. Pueden ser de tres tipos:
Patrones Motrices Asociados a la Locomoción
- Arrastre: Se inicia cuando el niño quiere alcanzar un objeto con las manos pero no llega a cogerlo. Se observa un patrón motriz cruzado, con la cabeza hacia el frente y las dos piernas coordinadas.
- Gateo: Se desarrolla gracias a la experiencia motriz, el aumento del control corporal y la integración de información procedente del **sistema vestibular** (equilibrio) y **propioceptivo** (percepción del propio cuerpo). Aparece la tridimensionalidad en la visión del niño.
- Marcha: Comienza con un movimiento desequilibrado en busca de estabilidad, siguiendo un patrón cruzado.
- Triscado (trote): Requiere el apoyo de los pies de forma alternativa.
- Carrera: Se inicia con una primera fase de vuelo que obliga a realizar un patrón cruzado.
Patrones Motrices de Manipulación
Implican la **coordinación óculo-manual** y la **prensión**. Desde los primeros momentos de vida, el bebé intenta agarrar y soltar objetos. El desarrollo de la prensión está asociado al desarrollo de la vista, ya que es necesaria la coordinación óculo-manual:
- A partir del 4º mes: La visión está bastante desarrollada (capta objetos con la vista para, cuando sea el momento, cogerlos).
- De 4 a 6 meses: Aproximación al objeto con movimiento de espalda, brazo y mano.
- De 6 a 8 meses: Mueve el brazo y la mano para alcanzar el objeto.
- De 8 a 10 meses: Capaz de coordinar movimientos de espalda con brazo, codo y mano.
La prensión de objetos con la mano también sigue una evolución similar:
- De 5 a 6 meses: Capaz de realizar **prensión palmar** y con los tres últimos dedos.
- De 7 a 8 meses: Capaz de realizar **prensión con pinza inferior** (pulgar/meñique).
- De 9 a 11 meses: Capaz de realizar **prensión con pinza fina o superior** (pulgar/índice).
Patrones Motrices de Estabilidad
Se observa una evolución motora en posiciones estáticas: A los dos meses, los bebés empiezan a levantar la cabeza y el pecho, pero no se mantienen sentados. A partir de los 3 o 4 meses, sentados con ayuda, empiezan a mantener la cabeza erguida. A partir de los 7 u 8 meses, se mantienen sentados sin ayuda y empiezan a mantenerse de pie con apoyo. Finalmente, alrededor de los 10 meses, se sientan sin ayuda del adulto y a los 12 meses serán capaces de ponerse de pie (lo que les permitirá trabajar el equilibrio y, posteriormente, la locomoción).
Perfeccionando los Movimientos
La adquisición progresiva de los patrones motrices básicos es posible gracias a la evolución del niño en los siguientes aspectos fundamentales:
- Tono muscular: Es la resistencia de un músculo al estirarse. Para su desarrollo, el movimiento y el tacto son muy importantes, ya que nos proporcionan mucha información sobre la afectividad o atención del niño. El **sistema vestibular** (situado en el oído interno) es el que controla el tono; si no funciona correctamente, el tono será bajo. Este sistema nos da información sobre nuestro equilibrio y la gravedad. Se distingue entre tono postural (estado que precede a la acción) y tono de acción (acompaña la actividad muscular durante la ejecución de la acción).
- Control postural: Capacidad de adaptar la postura del cuerpo a diversas actividades y de mantenerla durante un tiempo determinado. Está relacionada con la actitud y el tono muscular básico.
- Equilibrio: Capacidad de mantener una posición corporal controlada durante el desempeño de una tarea. Se distinguen dos tipos:
- Estático: Capacidad de mantener una postura sin movimiento (ej., una postura de yoga, donde el equilibrio debe estar desarrollado para mantenerla durante un tiempo prolongado).
- Dinámico: Capacidad de mantener el equilibrio mientras se está en movimiento (ej., un niño en bicicleta, que necesita un equilibrio dinámico porque se está desplazando).
- Coordinación: Capacidad de moverse de la manera más apropiada y eficiente, ubicada en el **cerebelo**. Tipos:
- Motora: Coordinación de los diferentes grupos musculares del cuerpo, según lo que perciban nuestros sentidos (relacionado con la **motricidad gruesa**).
- Óculo-manual (Mano-ojo): Capacidad de mover las manos según lo que ven los ojos (ej., escribir en un teclado, **motricidad fina**).
- Óculo-podal (Pie-ojo): Capacidad de mover los pies para responder a lo que perciben los ojos (relacionado con la **psicomotricidad fina**).
El **trastorno de coordinación del desarrollo** (o **torpeza motora**) se caracteriza por la dificultad para aprender habilidades motoras finas y gruesas en comparación con niños de la misma edad, lo que puede generar problemas sociales o de autoestima.
- Lateralidad: Distribución de funciones entre los dos hemisferios cerebrales, que se manifiesta en la utilización preferente de un lado del cuerpo frente al otro. Se denomina **lateralización cerebral** al predominio de un hemisferio sobre el otro para realizar o controlar ciertos comportamientos. Tener una lateralidad establecida puede prevenir problemas de aprendizaje (motricidad). Tipos:
- Homogénea: Preferencia consistente por un lado del cuerpo.
- Cruzada: Cuando la lateralidad de la mano es diferente para pies, ojos y oídos (común en diagnósticos de TDAH y dificultades de aprendizaje).
- Ambidiestra: Capacidad de realizar bien cualquier tarea con ambas manos.
- Contrariada/Forzada: Obligar a una persona a usar la mano, pie, etc., opuestos a su preferencia natural.
Entre las dificultades en el desarrollo de la lateralidad, la más frecuente es la **lateralidad cruzada relativa**, en la que el niño normalmente usa su ojo dominante y escribe con la mano subdominante.
- Percepción y orientación espacial y temporal (relacionadas con el **esquema corporal**):
- Orientación espacial: Capacidad de percibir las cosas en el espacio en relación a sí mismo. En niños, se inicia con el espacio inmediato; hasta los 7 años, la orientación es egocéntrica, sin la capacidad de ponerse en el lugar de otra persona.
- Orientación temporal: Implica el aprendizaje de conceptos temporales como hoy, mañana, ahora, después. Tarda en desarrollarse (debido a las estructuras prefrontales). Ej.: «¿Esta tarde es hoy?». Trabajar las rutinas es muy importante.
T3. Bases Neurológicas del Desarrollo Cognitivo
La **Neurociencia**, estudio del desarrollo cerebral, busca comprender los procesos mentales involucrados en el aprendizaje. Influye en los centros educativos y en los de Atención Temprana (AT). El **Sistema Nervioso (SN)** es la base y el soporte de constructos importantes en el ámbito educativo, como la personalidad.
Neuroplasticidad o Plasticidad Cerebral
Capacidad del cerebro para cambiar y aprender en respuesta a la experiencia externa (calidad de la intervención) y a cambios internos como lesiones. El cerebro es capaz de modificarse significativamente a lo largo de la vida como respuesta a las experiencias de aprendizaje. Gracias a ella, el cerebro permanece flexible, alerta y orientado a dar nuevas respuestas y soluciones. El ser humano puede aprender en cualquier etapa de su vida, aunque de formas diferentes. La plasticidad se puede clasificar en dos tipos:
- Expectante a la experiencia: Capacidad del cerebro para incorporar experiencias para las cuales está predispuesto genéticamente, relacionado con los **periodos sensibles**.
- Dependiente de la experiencia: Ventana abierta durante toda la vida, aprendizaje por experiencia.
Periodos Sensibles
Marco de tiempo en el cual un evento biológico particular es más propenso a ocurrir o a ser aprendido de manera óptima. Se reflejan en el comportamiento y son propiedad de los circuitos neuronales; estos se modifican, haciendo que ciertos patrones de conectividad se vuelvan estables y se prefieran energéticamente. Las preferencias en un circuito que resultan de la experiencia durante periodos sensibles se establecen como cambios estables.
Neuroeducación
**Los neuromitos**: Ideas erróneas sobre el cerebro y el aprendizaje, que debemos erradicar y sustituir por conocimiento asentado y veraz. Uno de los principales mitos tiene que ver con los periodos críticos para el aprendizaje, que sugieren la existencia de periodos críticos en los que deben ocurrir determinados aprendizajes. Y aunque es cierto que hay determinados momentos en los que los niños son especialmente sensibles al aprendizaje, se sabe que se puede seguir aprendiendo durante toda la vida. Otro neuromito es la creencia de que el hemisferio cerebral derecho es más emocional y el izquierdo más lógico, lo cual ha sido desmentido.
Desarrollo Cognitivo en los Primeros Años
La evolución del desarrollo cognitivo se centra en: el **conocimiento de sí mismo**, las **personas familiares y el entorno**, y los **objetos**.
El niño de cero a tres años establece sus relaciones principalmente a través de los sentidos y el movimiento, comenzando con comportamientos reflejos. El bebé recibe y transmite información e interactúa con el mundo a través de los sentidos, incluso antes de su nacimiento. Los sentidos de los bebés pueden estimularse de muchas maneras: escuchando a los cuidadores hablar, observando diferentes objetos y colores, o jugando con juguetes de distintas texturas.
- Gusto y olfato: Desarrollo medio. Prefieren lo dulce a lo amargo. A los 6 meses, empiezan a gustarles los sabores salados.
- Tacto: Muy desarrollado, con receptores en la piel.
- Oído: Está casi tan desarrollado como el del adulto.
- Vista: Es el sentido menos desarrollado al nacer; la agudeza visual es de solo 20/600 (visualiza un objeto a 20 pies, percibiéndolo como si estuviera a 600). Los recién nacidos pueden ver mejor los objetos y caras que se sostienen a 20-30 cm de su cara.
- Sentido vestibular y propioceptivo: Desarrollados en el sexto mes de embarazo. El **sentido vestibular**, situado en el oído interno, registra los movimientos de la cabeza y el impacto de la gravedad, ayudando a mantener el equilibrio (cualquier movimiento de cabeza lo estimulará). El **sentido propioceptivo** es el encargado de recibir información desde las centrales nerviosas, ayudándonos a conocer la posición de nuestro cuerpo y de sus partes en el espacio, lo que permite realizar sincronizaciones y movimientos coordinados. Ambos sentidos están muy relacionados.
Subetapas de la Etapa Sensoriomotora de Piaget
Piaget denominó a esta etapa, **etapa sensoriomotora** (0-2 años), porque reconoció que los bebés aprenden sobre su mundo interactuando con él a través de sus sentidos. Se puede dividir en seis subetapas:
- (0-1 mes) Reflejos primarios: Succión de objetos con la boca, seguimiento de objetos móviles con los ojos y cierre de la mano al contacto con la palma. El bebé ejercita estos reflejos para que se consoliden.
- (1-4 meses) Reacciones circulares primarias: Los reflejos comienzan a convertirse en acciones voluntarias. Consisten en reproducir una situación que inicialmente se produjo por casualidad (ej., un bebé se pasa la mano por delante de la cara y luego repite ese movimiento voluntariamente porque le resulta placentero, como chuparse el dedo).
- (4-8 meses) Reacciones circulares secundarias: Interés por los objetos que lo rodean. Inicia el agarre voluntario. Consisten en que el bebé repite conductas que tuvieron un efecto en el entorno (ej., hace un ruido con la boca y los adultos se ríen). Comienza la diferenciación entre medio y fin, y el amanecer de la lógica.
- (8-12 meses) Coordinación de reacciones secundarias: Se inician las acciones intencionales, el desarrollo de la lógica y la coordinación entre medios y fines. La **coordinación ojo-mano** se perfecciona. Perfeccionamiento de las reacciones circulares secundarias.
- (12-18 meses) Reacciones circulares terciarias: Período de experimentación de ensayo-error. Investigación de las propiedades de los objetos. Incorporación de nuevas formas de hacer las cosas. No se inician por azar, sino por experimentación (ej., coger una pelota y lanzarla).
- (18-24 meses) Pensamiento representacional temprano: Desarrollo de símbolos primitivos y representaciones mentales más duraderas. Inicio de la intuición y la verdadera creatividad, lo cual marca el paso a la **etapa preoperacional**.
Avances en los Primeros Años (Logros)
Cambios importantes en plasticidad cerebral y mielinización.
Permanencia del objeto: Un niño tira muchas veces un objeto al suelo y asocia una respuesta a su acción (se lo vuelven a dar). Esto significa que el niño ha adquirido completamente la **permanencia del objeto**, que es la capacidad de darse cuenta de que los objetos no desaparecen cuando dejan de estar a la vista (aproximadamente a los 18 meses). (Según Piaget, en el estadio sensoriomotor 0-2 años, con críticas por la poca importancia dada al lenguaje).
Desarrollo de la Memoria y Atención
Hasta los tres primeros años, la **memoria** no es consciente; es clave trabajar con rutinas. En su primer año, el niño empieza a memorizar las primeras acciones cotidianas (ej., poner en funcionamiento su juguete preferido). La memoria también depende de su **atención**. Que el niño atienda dependerá de su motivación, salud y afectividad. Podemos estimular su atención variando el tamaño de los objetos, el color, la intensidad, la novedad y la posición del estímulo. Con dos años, es capaz de centrar su atención en una sola cosa durante aproximadamente dos minutos con ayuda del adulto, o un minuto solo.
Problemas en el Desarrollo Cognitivo en los Primeros Años:
- Falta de contacto visual y atención, ausencia de viveza en la mirada.
- Falta de intencionalidad, interés y atención por el entorno, los objetos y los demás.
- No comprensión ni empleo de la relación causa-efecto o medio-fin.
- No comprensión de órdenes sencillas ni prohibiciones.
- Conductas o juegos estereotipados. Ausencia de sonrisa social.
El Desarrollo Cognitivo de 3 a 6 Años
Teoría Constructivista de Piaget: Etapas del Desarrollo Cognitivo
- Etapa Sensoriomotora (0-2 años): Se basa en los reflejos y los sentidos.
- Etapa Preoperacional (2-7 años): Avances en lenguaje e imaginación.
- Etapa de Operaciones Concretas (7-11 años): Ideas basadas en la razón.
- Etapa de Operaciones Formales (11-21 años): Pensamiento abstracto y conceptual.
En este período, el **lenguaje** es una herramienta vital para procesar información e interactuar con el entorno. Para **Vygotsky**, la mente del niño cambia y evoluciona a medida que aprende en un contexto social con la ayuda de otros niños y adultos, lo que subraya la importancia del lenguaje.
Hitos del Desarrollo Cognitivo por Edad
- A los 3 años: Desarrollo del lenguaje. Pueden expresar la relación entre emociones y acontecimientos. **Juego simbólico**: Utiliza juguetes para representar realidades diferentes. Aprende por imitación y por ensayo-error, con interés por las construcciones. Tiene una idea clara de su cuerpo, dibuja una figura humana con cabeza y es capaz de señalar una o dos partes. Conoce el nombre de varios colores, puede contar hasta 10 (aprox.) y comprende el número 3.
- A los 4 años: Distingue entre apariencia y realidad, es capaz de elegir la pieza más pesada y agrupar objetos para formar colecciones. Le atraen los juegos de construcción y de agua. Empieza a orientarse en el **espacio-tiempo**. Desea aprender a leer.
- A los 5 años: **Pensamiento intuitivo** y **juego simbólico**. Empieza a dominar la representación y muestra cierta madurez a nivel cognitivo. Puede resolver problemas simples, organizar de menor a mayor, realizar sumas simples. En el dibujo muestra la diferenciación de partes del cuerpo. Tiene más desarrollado el sentido del tiempo y la duración de los acontecimientos. El pensamiento continúa siendo **egocéntrico**.
Posibles Problemas en el Desarrollo Cognitivo (3-6 años)
- No son capaces de mantener la atención cuando se les habla.
- No responden ni siguen órdenes sencillas.
- Repiten las preguntas que se les hacen. Falta de interés por el entorno.
- Nivel de vocabulario bajo. Conductas o juegos estereotipados.
- No realizan juego simbólico. No imitan. No buscan objetos escondidos o que se han caído.
Programas de Desarrollo Cognitivo: Objetivos
- Adquirir estructuras parciales mediante la confrontación de una pluralidad de situaciones y elementos de la experiencia personal. Esto incluye el desarrollo de relaciones espaciales, dimensionales, cuantitativas, temporales e inducción de leyes (ej., emparejar objetos en función de su posición, como un coche y flechas).
- Reforzar la adquisición de operaciones lógicas:
- Conservación (ej., cantidad de agua en un vaso, dónde hay más fichas si unas están desordenadas y otras no).
- Correspondencia.
- Seriación.
- Clasificación (ej., clasificar por formas, colores, categorías).
- Reversibilidad (ej., 5+2 = 2+5).
- Desarrollar procesos de **razonamiento deductivo** (ej., «la calle está mojada, ha llovido»).
- Desarrollar capacidades intelectuales básicas para percibir las características de los estímulos, identificar los detalles percibidos, seleccionar los datos de la situación y retener los más relevantes. Esto incluye:
- Factores perceptivos.
- Comprensión verbal.
- Fluidez verbal.
- Memoria a corto y largo plazo (ej., tarjetas de memoria).
- Fomentar la **estimulación sensorial** y el **desarrollo de la comunicación** a través de actividades.
T4. Desarrollo Socioemocional en Educación Temprana
El Desarrollo Socioemocional
Proceso por el cual el niño adquiere conductas y construye creencias, normas, actitudes y valores propios del medio familiar y cultural en el que se desenvuelve, con el objetivo de establecer relaciones positivas consigo mismo, con los demás y con el entorno. A lo largo de este proceso, irá adquiriendo **conciencia de sí mismo** y de los demás, capacidad de **regulación emocional** y las bases de su **sistema de apego**.
Al nacer, el bebé experimenta sensaciones fisiológicas asociadas al sueño, hambre, dolor, etc. Su modo principal de transmitir información y comunicarse es la **sonrisa** y el **llanto** (el bebé llora por necesidades, contagio emocional o necesidad de atención). La expresión de emociones se va socializando (inicialmente, las emociones se expresan por necesidades; más tarde, las expresiones se utilizan en relaciones sociales).
Hitos Principales del Desarrollo Emocional Infantil
(El desarrollo es un proceso continuo y evolutivo; las franjas de edades son orientativas, ya que cada niño tiene un patrón madurativo único, influenciado por factores ambientales).
- Aparición de la sonrisa social: Puede aparecer todo tipo de respuestas fisiológicas relacionadas con el placer, interés o sorpresa. Aparece entre las 4 y 6 semanas y obedece a estímulos externos; no es imitativa, sino que evidencia una respuesta placentera. Primero aparece como respuesta a sensaciones táctiles, luego auditivas y finalmente visuales. El niño utilizará la sonrisa como mecanismo de comunicación gracias a la reacción positiva del adulto (mecanismo de refuerzo).
- Emociones negativas: Experimenta disgusto, tristeza o enfado desde el primer mes, pero no será hasta los 3 o 4 meses cuando emita respuestas diferenciadas, organizadas y claras.
- Surgimiento del miedo: Entre los 6 y 9 meses, los niños se muestran menos impulsivos y más cautelosos. Aparecen temores ante la presencia de extraños, la ausencia de sus cuidadores principales y cautela ante objetos desconocidos.
- Intersubjetividad (9 meses): Relaciona la atención que recibe de las personas con los objetos de su entorno. Utiliza la información que recibe de la persona para explorar objetos (reconducir la atención de una persona hacia un objeto). Aparecen fenómenos de **atención conjunta** y **señalar con el dedo (pointing)**, fundamentales en la aparición de capacidades más complejas como la **empatía**.
- Complejidad emocional: A partir del primer año, es capaz de reconocer un amplio abanico de emociones y relacionar las emociones que observa en las personas con sucesos u objetos específicos. Entre los 18 y 34 meses, surgen las **emociones de autoconciencia** (vergüenza, culpa, orgullo…) y un mayor desarrollo del «YO».
- Mejora de la empatía: A los 4 o 5 años, mejora su capacidad para ponerse, cognitivamente, en la mente de los demás, una operación mental clave para el desarrollo de la empatía.
La Regulación Emocional
La **regulación emocional** es la capacidad para manejar las emociones de forma apropiada. Supone tomar conciencia de la relación entre emoción, cognición y comportamiento (ej., la reacción de una madre calmada o excitada cuando su hijo se cae en el parque influye en la regulación emocional del niño). Los niños nacen con destrezas conductuales para controlar sus emociones: evitar la mirada del estímulo desagradable, **autotranquilización** (succión), **distracción conductual** (cambio de actividad), evitación del extraño y búsqueda de apoyo social.
El Apego
**Vínculo** que el niño establece con un reducido número de personas más cercanas a él y que constituirá la base de su posterior desarrollo. Es uno de los elementos más básicos y constituyentes de las relaciones familiares, actuando como hilo conductor por el que circula la historia familiar y gracias al cual esta adquiere consistencia y realidad.
Para un adecuado desarrollo afectivo, es necesaria la vinculación del niño con una o varias **figuras de apego**. El clima que se crea es fundamental para la regulación emocional y para disponer una **base segura** sobre la que comenzar a explorar y conocer el mundo.
Etapas del Apego
(Las conductas de apego se llevan a cabo a lo largo de toda la vida).
- Fase de pre-apego (Primeros 2 meses): Aparición de señales de carácter reflejo e intencionadas (dirigir la mirada, el llanto) que le permiten comunicarse con las personas que le rodean. La respuesta social del bebé es indiscriminada.
- Fase de formación del apego (2 a 6 meses): Aprende a diferenciar a los familiares de los desconocidos, mostrando una respuesta social discriminada. Aunque prefiere a las personas de su entorno, por regla general no protesta si se van o se encuentra con extraños.
- Fase clara de apego (6 meses – 3 años): Se consolida la vinculación afectiva, se construye el sistema de apego, comienza a tolerar ausencias, es capaz de autorregularse y empieza a tolerar la separación.
- Fase de formación de una relación recíproca (3+ años): Capaz de reconocer los objetivos de la figura de apego, lo cual le permite interactuar con los suyos.
Patrones de Apego
«**Un bebé seguro es un niño que explora y que está predispuesto a aprender**.»
- Apego seguro (65% de los niños): Basado en una relación positiva y de confianza en la que se brinda cariño, protección y atención cuando el niño las necesita. Los niños exploran tranquilamente a cierta distancia de la figura de apego, pueden querer incluirla en su juego, pero también son capaces de jugar solos. Cuando la figura desaparece, se intranquilizan, lloran y la buscan; un extraño puede lograr calmarlos o distraerlos. En el reencuentro, se calman abrazándola y al poco tiempo vuelven a jugar separados de ella porque saben que todo está bien.
- Apego inseguro (35% de los niños): Niños que no han desarrollado un vínculo adecuado debido al tipo de relación que pueden tener. Es una señal de alarma, pero no un anuncio fatídico. Existen tres tipos:
- Ambivalente-resistente (10-12%): Marcada necesidad de atención, protección y seguridad. Buscan siempre estar cerca de quienes puedan satisfacer sus necesidades de contacto, apoyo y cuidado. Exploran muy poco, les cuesta alejarse y se inquietan mucho ante la separación. En el reencuentro, muestran una actitud ambivalente hacia la madre: no se separan de ella, pero parecen enfadados, resistiéndose a los intentos para calmarlos.
- Evitativo (20%): Se mantienen a distancia de la figura de apego, aunque necesitan tenerla cerca. Ante una separación, no muestran ansiedad y pueden quedarse con desconocidos. En el reencuentro, pueden mostrarse indiferentes y, si se inicia contacto físico, pueden evitarlo abiertamente. Este vínculo afectivo puede desencadenar trastornos en su desarrollo o ansiedad.
- Desorganizado-desorientado (3-5%): Surge cuando se presentan cuidados inadecuados en el hogar. El niño muestra conductas de los dos patrones anteriores; tanto la presencia como la ausencia de la figura de apego lo desconciertan, con signos claros de miedo hacia ella. Este patrón se construye a través de situaciones amenazantes (maltrato) o en las que el niño es «temido» por el adulto. Se caracteriza por elevada ansiedad e incapacidad para superar el miedo a la adversidad.
Separación de la Figura de Apego (Bowlby)
- Fase de protesta: Lucha activa por recuperar la figura de apego, con conductas de búsqueda y llamada como el llanto. Se aferran a objetos propios y rechazan la ayuda que se les ofrece. Puede durar desde una hora hasta una semana. Si la figura de apego regresa, el niño incrementa las conductas de apego, aferrándose a ella y aumentando el rechazo al extraño.
- Fase de desesperación: Disminuye la intensidad de su comportamiento, con llanto intermitente. Se pierde la esperanza de reencontrarse con la figura de apego. Aparecen conductas regresivas y de ansiedad. Si la figura de apego regresa, puede mostrar desinterés u hostilidad, y un desapego en relación con el tiempo de separación y la actitud de la figura de apego.
- Fase de adaptación: El niño se adapta a la nueva situación, mostrando interés por las personas que le rodean. En condiciones favorables, volverá a establecer el vínculo de apego. Si la figura de apego regresa, puede mostrar distancia y frialdad, aunque el vínculo puede recuperarse con el tiempo.
* Si la indefensión y angustia ante la desaparición de la figura de apego y las conductas de búsqueda en el niño persisten más allá de los cuatro o cinco años, puede que estemos ante un trastorno del vínculo afectivo.
*Ansiedad de separación: Manifestaciones y vivencias del niño en ausencia de sus figuras de apego. Aparece sobre los 6-8 meses aprox., fenómeno normal hasta los 3 años.
La Familia como Principio del Desarrollo Socioemocional
La **familia** es el contexto de crianza más importante en los primeros años de vida del individuo, el primer «medio» del que depende su supervivencia y desarrollo integral. Está compuesta por un grupo de personas con vínculos afectivos o de sangre.
La familia es la suma de diferentes figuras o funciones de mayor o menor relevancia para el niño.
Clima Familiar
**Clima familiar**: Conjunto de factores ambientales que configuran el grado de confort emocional que propicia una situación; de él depende el estado de ánimo colectivo e individual. La calidad del clima puede ser:
- Clima familiar ideal: Se caracteriza por conductas de apoyo, afectividad, diálogo, etc., y sus efectos en los integrantes pueden ser seguridad, cariño, autoestima, etc.
- Clima familiar adverso: Se caracteriza por conductas agresivas, autoritarismo, evitación, etc., y esto da como consecuencia dependencia, ansiedad, etc.
Papel del Centro Educativo en el Desarrollo Socioemocional
(Después de la familia, la escuela es el segundo factor protector fundamental).
Los centros educativos deben velar por el **desarrollo integral**. Las necesidades emocionales del niño han de ser una prioridad educativa en las primeras edades de escolarización, ya que serán la base de seguridad que permitirá un desarrollo cognitivo adecuado. El centro educativo puede ser una posible amenaza a la seguridad y autoestima del niño debido a:
- Desconocimiento inicial: El centro educativo es desconocido en los primeros días, lo que puede ocasionar inseguridad.
- Primer contacto con iguales: Puede ser dificultoso, especialmente en grupos grandes, ya que se están creando las bases para las relaciones humanas.
- Separación de la figura de apego: Especialmente complicada en relaciones de apego inseguro.
- Falta de conciencia del tiempo: El niño no tiene noción del tiempo, por lo que las rutinas son muy importantes.
- Ruptura con hábitos: De su día a día familiar.
- Pérdida de privacidad: Al compartir momentos vitales con otros niños.
- Tendencia empática y contagio emocional.
Ante estas Situaciones, el Educador:
(Para controlar el riesgo y favorecer la seguridad emocional, se requiere una buena preparación psicopedagógica).
- Creando espacios y momentos que fomenten la familiarización del niño (con espacios, compañeros, maestros).
- Manteniendo contacto permanente y bidireccional con las figuras de apego (ej., agenda escolar).
- Diseñando actividades centradas en su desarrollo.
- Creando espacios y rutinas donde se respete la privacidad de los niños.
- Controlando posibles daños y abusos en las interacciones entre iguales.
- Favoreciendo la aceptación positiva de las diferencias entre iguales.
Las **emociones** no son algo bueno o malo, sino necesidades propias que debemos comprender, expresar, compartir, regular y controlar. El control sobre estas emociones y la capacidad de reconocerlas tanto en nosotros como en los demás, al tiempo que nos permite ponernos en su lugar y sobrellevar las situaciones, lo llamamos **inteligencia emocional** (se puede trabajar con cuentos). Esta inteligencia dependerá de los vínculos de apego iniciales. Tipos de apego según la conducta escolar:
- Apego seguro: Mejor adaptación a la separación, positivismo, confianza y estabilidad, menos llanto y agresividad.
- Apego ansioso-ambivalente: Peor adaptación, relaciones variables e inseguras, menor grado de bienestar, ansiedad, y una regulación emocional costosa.
- Apego evitativo: Mala adaptación, no se relacionan bien con maestros y compañeros. Pueden presentar ataques de agresividad e ira.
*Necesidades sociales: Satisfacen las necesidades de sentirse perteneciente a un grupo al que aportas y del que recibes una imagen concreta que permite constituir la identidad (estar en grupo, hablar, relacionarse y compartir en juego).
En las relaciones con los iguales, la percepción de los «amigos» varía según el momento del desarrollo:
- Primer año: Tratan a los otros como objetos a explorar, sin más interés que la interacción. Interés temprano por los iguales.
- Preescolar: Compañeros de juegos momentáneos.
- 4-9 años: El amigo es quien se conoce más que a los otros y hace lo que uno quiere, compartiendo sus gustos.
- 6-12 años: Reciprocidad emocional y cooperación bidireccional.
El Desarrollo de la Autonomía, el Autoconcepto y la Autoestima
La **identidad**, la **autoestima** y el **autoconcepto** dependen del desarrollo emocional y relacional.
Identidad
Autoconcepto: Representación que posee el individuo de sí mismo. La persona se autoevalúa en el grado de dominio de sus experiencias, tanto negativa como positivamente. Su desarrollo depende de cómo se perciban las experiencias vividas y de los factores del entorno. Como resultado del autoconcepto, aparecerá la autoestima.
Autoestima: Evaluación que hace el individuo de su valía como persona. De la autoestima se deriva la autonomía.
Autonomía: Capacidad que permitirá al niño diferenciarse de su entorno y comenzar a realizar conductas desde sí mismo, desde su singularidad y con cierta independencia.
*Especularización: El niño nos reclamará una imagen de él, y aquella que nosotros le devolvamos repercutirá y determinará sus conductas futuras, ya que la integrará en su idea de sí mismo.
T4. Programas de Atención a la Diversidad
Diversidad e Inclusión
(La inclusión como aspecto básico en las dinámicas de centro y aula).
La **inclusión** debe ser considerada una búsqueda permanente de procedimientos para responder a la **diversidad**, convivir con la diferencia y aprender de ella. Todas las personas deben gozar de los mismos derechos.
Las **barreras a la inclusión** pueden aparecer en el juego, en el aprendizaje o en la participación en las actividades con iguales, y pueden originarse en cualquier aspecto del centro (ej., mala organización).
*Educación inclusiva: Es la base de la igualdad de oportunidades, el respeto a los derechos de los niños y la plena participación de las familias en el proceso de enseñanza-aprendizaje.
El Aula como Escenario de la Diversidad
El aula, más allá de un espacio de aprendizaje, es un **ambiente de aprendizaje** en el que los niños construyen, investigan, innovan y crean en un entorno seguro, positivo y afectivo. El ambiente deberá permitir la realización de actividades tanto libres como orientadas (disponer de espacios adecuados). El aula debe tener una estructura acorde a las metodologías de trabajo, con materiales bien ordenados.
La característica principal de la educación infantil es la **participación activa** del niño en las experiencias compartidas de aprendizaje. El papel del profesor será **facilitador del aprendizaje** y **mediador**. Las actividades deberán tener en cuenta el proceso de desarrollo del niño en todas sus facetas.
Metodologías Adaptadas a la Diversidad
Enfoque Montessori
(Trabajo con todos los sentidos).
Características:
- Trabajo en un mismo aula con niños de diferentes edades.
- Presentación cuidada de los materiales, acordes a la edad y los procesos de desarrollo.
- Tiempo de trabajo extenso para que el niño tenga tiempo de experimentar y concentrarse en la actividad.
- Cada niño es considerado un ser único. El profesor **guía, orienta e inspira**.
Metodología:
- Tiene en cuenta el desarrollo de habilidades sociales, emocionales e intelectuales.
- Gran énfasis en la autonomía y la autoestima.
- Aprenden explorando a través de la manipulación; son libres de moverse por el aula según su interés.
Enfoque Waldorf
(Utiliza recursos educativos como la danza y la música).
Características:
- Orientado a descubrir al ser humano en su totalidad, lo cual marca el papel del docente y del alumno. Clave: **Reconocerse a sí mismo**, encontrar sentido a la propia existencia y orientarse en el camino.
- El profesor no debe introducir aprendizajes para los que el niño no está preparado.
- El ambiente es un entorno seguro, cargado de emociones positivas, tranquilo, lleno de afecto y alegría.
- Los juguetes y materiales son naturales y hechos en su mayoría por los profesores. Deben despertar la imaginación y la fantasía del niño.
Enfoque Reggio Emilia
(Trabajar con el niño desde sus potencialidades).
Características:
- El niño es visto como un ser lleno de posibilidades, capaz de crear y construir su propio aprendizaje. El niño es el objetivo principal del enfoque.
- Dos condiciones esenciales para el aprendizaje: la **pedagogía de la escucha** y la **pedagogía de las relaciones**.
- Importancia de que los padres se involucren.
- Aprende partiendo de sus propios medios, haciendo uso de los recursos a su disposición.
- Profesores observadores que deben provocar la búsqueda del conocimiento y brindar un buen ambiente de aprendizaje.
Objetivo:
- Crear una escuela agradable, activa, inventiva, habitable, documentada, asequible.
Enfoque Pikler-Lóczy
Características:
- El niño es visto como un ser activo en su desarrollo, con su propio ritmo y particularidad en la adquisición de aprendizajes.
- Va más allá de satisfacer sus necesidades fisiológicas. Se centra en proporcionar **seguridad emocional** y **confianza** para que el niño se sienta capaz de explorar el entorno de forma autónoma y activa.
- Incide en la necesidad de cuidar las relaciones con el bebé para fomentar la creación de un apego seguro.
- Ofrece una nueva manera de ver el movimiento y el desarrollo motor y postural del niño.
- Materiales procedentes de materias naturales que ofrecen distintas sensaciones.
- **Rutinas diarias**: Importancia fundamental, sobre todo en momentos de cuidado, proporcionando seguridad en el espacio y en el tiempo.
El Juego Libre y Guiado
(Los niños aprenden principalmente a través del juego; ambos son valiosos en Atención Temprana).
Los niños que practican el **juego libre** suelen tener mejores **habilidades sociales**, una mejor **autorregulación**, piensan de una forma más creativa y tienen un gran potencial para la **resolución de problemas**. Es altamente beneficioso para el desarrollo integral de los niños (ej., en el recreo).
El **juego guiado** es la mejor manera de incorporar el juego en el currículo sin comprometer los objetivos educativos, al tiempo que permite a los niños disfrutar de la escuela. En el juego guiado, es crucial que los niños dirijan la acción, ya que así mantienen la autonomía para tomar decisiones sobre qué hacer en un momento dado. Los docentes guiarán el juego:
- Mediante la preparación del ambiente del aula (eligiendo cómo los materiales y juguetes estarán dispuestos).
- Construyendo el proceso de aprendizaje y la orientación que se dará para que sea un **aprendizaje significativo** (ej., «¿Qué crees que pasaría si…?»).
Con el juego guiado se promueve el desarrollo de **habilidades de base social**, así como **habilidades académicas**.