El Rol de la Televisión en la Formación y la Cultura

Televisión y Educación

5.1 La televisión: educadora y deseducadora de la mirada

La televisión es un medio de comunicación educativo por sí mismo. Es un sistema de transmisión de contenidos que pueden promover y reforzar normas, valores, actitudes y conductas. Sin embargo, como señala García Matilla, también puede transmitir contenidos que se enfrentan a cualquier valor educativo. Lo que resulta innegable es su gran influencia como creadora de modelos e incluso de líderes, generadora de opinión y moldeadora de gustos, tendencias, modas e inquietudes, a la cabeza de un proceso de aculturación a través de los medios y las TIC. La televisión se mantiene como el medio de comunicación más consumido en todo el mundo.

Pérez Tornero diferencia tres modelos básicos de televisión educativa, o mejor dicho, de contenidos televisivos a los que se les pueda dar una aplicación educativa:

  • De enriquecimiento: la TV se destina a complementar la tarea del profesor.
  • Enseñanza directa: la TV tiene que sustituir al profesor o no contar con su esfuerzo.
  • Contexto: la TV aporta documentos y materiales que, conjugados con otros, constituyen una posibilidad estructurada de formación.

Pérez Tornero también reconoce la existencia de semejanzas formales entre televisión y educación. Considera que ambas disciplinas trabajan con una materia prima común: la información. Esta información, atendiendo a metodologías distintas, será sometida a procesos parejos de ordenación, almacenamiento y jerarquización, para posteriormente divulgarla y transmitirla.

Existe una segunda característica intrínseca a la televisión: la TV también es cultura. Con esta afirmación, Callejo Gallego pretende incidir en que la televisión forma parte de nuestras sociedades. La TV es cultura y es creadora de cultura, de productos mediáticos que nos forman, informan y transforman. Callejo Gallego destaca a Wolton como el teórico que más directamente ha justificado la ausencia de contenidos de cultura legítima en las televisiones generalistas. Wolton describe la televisión como “un medio con una lógica propia, reacia al mundo de la cultura, esencialmente destinada al espectáculo y a conseguir una lluvia de imágenes que no nos hacen pensar en nada”. Pero además, opina que el bajo nivel cultural de la TV tiene una función integradora.

5.2 La TV educativa y cultural

La TV es educación y es cultura, una conexión que Pérez Tornero toma para referirse a una “televisión educativo-cultural”. Cualquiera de los géneros ya cultivados puede ser dotado de un cariz educativo y cultural, de manera que esta modalidad puede englobar perfectamente desde programas científicos de divulgación hasta reportajes y debates. La única diferencia entre este tipo de televisión y la convencional, como apunta Pérez Tornero, son los valores que la sostienen y su finalidad última.

La TV educativo-cultural nace como un servicio público de televisión cuya rentabilidad no se contabiliza desde un punto de vista económico, sino de su calidad y capacidad democratizadora. Por ello, parece lógico que esta modalidad haya sido la apuesta aislada de los segundos canales de la TV pública estatal o de las cadenas autonómicas.

Sus funciones principales giran en torno a la formación integral del individuo. Deberá cumplir como refuerzo sobre las doctrinas, habilidades, moral y conducta que aprendemos con la familia y en la escuela. Al mismo tiempo, como indica Pérez Tornero, “ha de contribuir permanentemente a la formación ciudadana, capacitar la participación en el sistema social y político, servir de cauce de información estable o fomentar y promover la formación tanto de jóvenes como de adultos”. José Mª Perceval señala entre las principales funciones de la televisión educativa y cultural:

  • Ser un instrumento eficaz en el sistema escolar sin sustituirlo.
  • Desarrollar un espectador crítico y no simplemente receptivo, aprovechando el canal educativo implícito de la televisión.

Como instrumento interactivo, Perceval apuesta por la televisión a la carta, una televisión que podrá responder más claramente a las necesidades educativas específicas de los espectadores.