Salud Mental: Enfoques y Perspectivas Contemporáneas

Salud Mental: Enfoques y Perspectivas Contemporáneas

Este documento aborda diversas perspectivas y conceptos fundamentales relacionados con la salud mental, explorando sus definiciones, los enfoques para su abordaje, la distinción entre normalidad y patología, y las contribuciones de distintas teorías psicológicas y biológicas, así como su evolución histórica.

1. ¿Cuáles son los enfoques que permiten abordar las problemáticas referidas a la salud mental? Explique y fundamente.

Definición de Salud Mental:

Existen dos variantes principales:

  • De acuerdo con la OPS (Organización Panamericana de la Salud): La salud mental es la adaptación del individuo a su medio. En esta concepción, los excluidos no encajan, lo que genera desvíos y los lleva a ser estigmatizados.
  • Según la OMS (Organización Mundial de la Salud): La salud es un equilibrio físico, biológico y social, y no solo la ausencia de enfermedad. Lo social, por otra parte, es parte de este complejo bienestar, de estar siempre en equilibrio psico-socio-bio-espiritual.

Cabe destacar que esta definición de la OMS nace en Ginebra (Suiza) en el año 1964.

Factores Clave para Abordar la Salud Mental:

Los enfoques o factores que permiten abordar las problemáticas referidas a la salud mental son:

  • Factor psicológico
  • Factor biológico
  • Factor social

Estos tres factores forman el completo bienestar de un sujeto equilibrado.

Uno de los factores más importantes es el factor psicológico, ya que en él encontramos enfoques emocionales y espirituales. Estos dos enfoques son muy importantes, pues si uno solo de ellos no está satisfecho, se va a producir un desequilibrio en la persona, afectándola en los tres niveles de la vida diaria: el trabajo, lo social y el amor. Es por ello que es importante que el factor psicológico sea cumplido, ya que para que podamos lograr un completo bienestar, debemos estar emocionalmente equilibrados, y así los dos factores restantes (biológico y social) también puedan estarlo. Por lo tanto, el sujeto se rige por el mundo espiritual y emocional para lograr su completo bienestar.

2. Diferencie lo normal y lo patológico en relación con la salud mental. Conceptualice.

Las dos categorías que presenta la autora Quiroga son:

  • La categoría de normalidad, y;
  • La categoría patológica.

Concepto de Normalidad y Patología en Salud Mental:

  • La Normalidad: Es entendida como algo que implica mayoría y/o uniformidad por parte de los individuos, ya sea porque provengan de resultados estadísticos, porque sea impuesto coercitivamente, o por adscripción a ideales económicos, políticos, sociales, de clases o familiares. Es decir, que el concepto de normalidad se ha ligado al concepto de salud. La noción de normalidad suele estar atravesada por una serie de prejuicios no fundamentados.
  • La Definición de la Patología: Está vinculada a lo que se establece como “normal”. El «loco» queda momentáneamente arrojado a la marginalidad. Es decir, que los fenómenos patológicos, entonces, para todas las orientaciones, se presentan en general como modificaciones regulares de los fenómenos normales.

3. ¿Cómo define la teoría psicoanalítica la enfermedad mental? Incluya los conceptos fundamentales del psicoanálisis.

La teoría psicoanalítica define la enfermedad mental de la siguiente manera: es el resultado de severas fijaciones pregenitales, subordinando la genitalidad a las fuerzas pulsionales del pasado. El uso de los mecanismos de defensa intenta, a veces de forma infructuosa, atenuar el conflicto psíquico del entramado patológico. De este resultan tres tipos de estructuras: neurótica, psicótica y perversa. Es decir, que la teoría psicoanalítica fue creada por el padre del psicoanálisis, Sigmund Freud, el cual postuló que la mente estaría compuesta por tres instancias: el Ello, el Yo y el Superyó. A su vez, las caracterizó de la siguiente manera:

  • El Ello: Es el aislamiento y fuente de los impulsos más primitivos. Opera por el principio del placer; su objetivo fundamental es lograr la máxima satisfacción de las pulsiones, evitando todo tipo de tensiones o displacer.
  • El Yo: Es la instancia psíquica que, bajo la influencia del principio de la realidad, permite la integración con el medio de forma lógica, constante y satisfactoria (salud). Es por ello que, en caso de verse amenazado (es decir, en conflicto intrapsíquico), tendrá la capacidad para movilizar los mecanismos de defensa, permitiendo la adaptación del individuo al medio, aun bajo condiciones adversas.
  • El Superyó: Viene a ser la conciencia moral y las reglas sociales, por ejemplo: (“no hagas esto”), (“debes hacer esto”), etc. Es decir, se introyectan, dominando o entramando el conflicto con las pulsaciones del Ello. Una eficiente superación del complejo de Edipo sugiere que las pulsaciones del incesto han sido reprimidas, permitiendo el “ingreso” a la cultura, la individualización y la conciencia de género.

4. Los humanistas postulan una jerarquía de necesidades humanas. Explique cuáles son y describa cómo conceptualizan la enfermedad mental.

El movimiento humanista surge como respuesta a los postulados freudianos, siendo sus principales referentes y precursores Abraham Maslow, Gordon Allport y Carl Rogers. Este movimiento fue creado para determinar que la vida humana es una lucha constante contra las propias pulsaciones. Es por ello que dicha corriente se basa en la satisfacción de las necesidades básicas; cuando no se cubren estas necesidades, se generan desvíos y un cambio en la personalidad del sujeto y en su vida. Un autor muy importante de esta corriente fue Maslow con su pirámide o jerarquía de las necesidades básicas y su desarrollo, la cual dividió en cinco etapas:

  • Autorrealización
  • Estética
  • Posesión o amor
  • Seguridad
  • Fisiológicas
  • Autoestima
  • Cognitiva

Las etapas de la pirámide de necesidades básicas, compuestas por necesidades fisiológicas, de posesión/amor, seguridad, etc., se caracterizan porque la sola presencia de la misma genera tensión y satisfacción. Si las necesidades básicas no se cubren y las demandas no son satisfechas, la persona podría llegar a sufrir un vacío que puede ser fuente de enfermedad. Para Maslow, es importante cubrir estas necesidades, ya que la satisfacción no solo calma la tensión, sino que también prepara al individuo para acceder al desarrollo y así a la autorrealización. Por otra parte, Allport se basaba en la idea de que la “personalidad” es fundamentalmente dinámica y singular, ya que el conocimiento de uno mismo es una condición de crecimiento.

Funciones Constitutivas del Yo según Allport:

Allport, al mismo tiempo, describe ocho funciones que lo constituyen:

  • Sentimiento corporal
  • Autoidentificación
  • Exaltación del Yo
  • Extensión del Yo
  • Agente racional

Las dos concepciones allportianas más importantes son: la exaltación del Yo y el agente racional. La exaltación del Yo es la capacidad innata que nos orienta a procurar lo mejor para nosotros, al cuidado y la preservación. El agente racional es una función del Yo que evalúa la necesidad de prescindir de ellos. Ambos conceptos permiten entender al Yo como una entidad dinámica, propensa al crecimiento y liberada del conflicto psíquico. Por su parte, Carl Rogers dejó como legado una mirada más abierta y esperanzadora sobre las potencialidades humanas. A su vez, llamó “tendencia actualizante” a la fuerza innata que abarca a todos los seres vivos y que los propulsa a actualizar constantemente sus capacidades con el fin de mantener la vida o evitar un sufrimiento que desorganice la noción del Yo. Es por ello que ideó un estudio de psicoterapia que denominó “psicoterapia centrada en el cliente”, en la que los fundamentos básicos son la aceptación incondicional (pleno respeto y comprensión al marco referencial del consultante). Por lo tanto, la técnica rogeriana cree en las capacidades de superación de los consultantes, en la que la intervención no se basa en la interrupción ni en los señalamientos. Para finalizar, diremos que para el humanismo, la enfermedad mental surge cuando las experiencias traumáticas son bloqueadas por formas defensivas o bien irrumpe la noción del “Yo” de forma súbita, provocando un comportamiento desorganizado. Para Maslow, las neurosis son vacíos estructurales por las necesidades básicas insatisfechas.

5. ¿Cómo explica el conductismo la enfermedad mental? Desarrolle.

El desarrollo conductista fue una respuesta objetiva a la introspección psicoanalítica, la oportunidad de que el pensamiento psicológico tuviera un espacio en el lugar de las ciencias. La conducta fue el objetivo del nuevo movimiento, desplazando el reinado de la subjetividad. La búsqueda había encontrado una técnica que día a día lograba más adaptación en EE. UU. y Rusia.

Un influyente de la corriente conductista fue J. Watson, el cual se basaba en las experiencias de Pavlov. Watson hizo que el propio estudio de la producción generara respuestas condicionadas. A su vez, J. Watson postuló que los estímulos del entorno podían generar un comportamiento fijo.

Técnica de Watson:

La técnica de Watson se basaba en que los estímulos del entorno podían generar comportamientos fijos como ser:

  • La anticipación
  • La presencia, y
  • El pensar.

Su objetivo estaba puesto en que el sujeto siempre repetía la misma conducta aprendida. Es por ello que para el conductismo, la enfermedad mental surge como resultado de los conocimientos anómalos, lo que lleva a cometer conductas dañinas. Los cognitivistas interponen a la asociación estímulo-respuesta la interpretación de los datos que ingresan a la mente. La conducta entonces surgiría como consecuencia de la decodificación de los datos captados.

6. Enumere los aportes de las teorías biológicas acerca de la enfermedad mental. Articule con las teorías neuroquímicas.

Aportes de la Teoría Biológica sobre la Enfermedad Mental:

  • Enfermedades de causa orgánica:
    • Demencias, y;
    • Retrasos mentales.
  • Enfermedades de probable causa mixta:
    • Esquizofrenia y otros trastornos psicóticos
    • Paranoia, y;
    • Trastornos bipolares.
  • Enfermedades con preponderancia psicosocial:
    • Trastornos de: ansiedad, disociativos, somatomorfos (antes llamados neurosis).
    • Trastornos de la personalidad.
    • Trastornos sexuales o de adicciones.
    • Trastornos adaptativos, etc.

Las teorías biológicas, en cuanto a la enfermedad mental, poseen una base orgánica que contribuye, predispone o afecta al organismo. Es decir, que dichas teorías son contribuciones genéticas en las que el flujo de los genes no se va a limitar a transmitir datos de generación en generación para mantener la estructura de la especie o el linaje familiar, sino que también determinan un umbral orgánico de respuestas a estímulos. Es por ello que para los seguidores de las teorías genéticas, la enfermedad mental es la expresión de alteraciones contenidas en los genes, siendo la influencia del entorno un factor que suma o detona la patología. Dicha teoría puede estar articulada con los neurotransmisores, los cuales surgen en la década del 50 como un descubrimiento que ha permitido descubrir y comprender a estas pequeñas moléculas que se encargan de hacer circular la información del mundo externo e interno y generar así respuestas o actos.

Tipos de Neurotransmisores:

Existen varios tipos de neurotransmisores, y son:

  • Serotonina: Interviene en el procesamiento de la información, en el estado de ánimo y en el control de los impulsos.
  • Ácido Gamma-aminobutírico (GABA): Actúa sobre la neurona postsináptica y el efecto más conocido es la reducción de la ansiedad.
  • Norepinefrina o Noradrenalina: Esta molécula se encuentra distribuida en varias de las vías cerebrales. Además, se asocia al sistema endocrino, ya que también se produce en la médula suprarrenal.
  • Dopamina: El avance de los estudios de la esquizofrenia y la enfermedad de Parkinson ha permitido saber mucho más sobre la dopamina. A su vez, interviene en la motricidad, en la búsqueda del placer y la sociabilidad.

Para finalizar, las teorías neuroquímicas buscan explicar la enfermedad mental a través del aumento o la depleción de los neurotransmisores y sus receptores.

7. ¿Cuál es el campo de la psicopatología y qué disciplinas comparten su estudio?

El término «psicopatología» fue empleado en el año 1878 como sinónimo de la psiquiatría clínica. Uno de los precursores de esta disciplina fue Emminghaus, un médico de Leipzig. Pero cabe decir que su término toma significado con Karl Jaspers, quien aspiró a construir una psiquiatría general, lo cual quiere decir que delimita a la psicopatología como una ciencia a la que se le otorga el dominio de los conceptos y las reglas generales del acontecer psíquico patológico. A su vez, Jaspers constituye una teoría general de las cuestiones relativas a la enfermedad psíquica y la patología mental, una psicopatología que aspira a lo universal.

La psicopatología es una disciplina que se refiere a los conocimientos relativos a las anormalidades y a los desórdenes mentales; por ende, esto está atravesado por cuestiones que tienen que ver con la vida mental de los sujetos.

Por otro lado, el campo de la psicopatología es un campo construido desde lo heterogéneo y discursivo de las prácticas que coexisten con las diferentes pertenencias que sus desarrollos teóricos les otorgan.

A partir de todos estos fenómenos, la psicopatología asume formas fenoménicas diversas de acuerdo con una determinada sociedad en determinados órdenes etnográficos e históricos.

Los “fenómenos patológicos” se presentan en general como modificaciones regulares de los fenómenos normales.

Disciplinas que Comparten el Estudio de la Psicopatología:

Para finalizar, las disciplinas que comparten su estudio son:

  • La psicología
  • La psiquiatría, y;
  • El psicoanálisis.

8. Explique la noción de etiología e indique en qué se basan las principales ramas de investigación.

Etiología:

Su significado proviene del griego (“aitia”: causa, y “logía”: tratado sobre las causas). Las ramas que comparte esta disciplina son:

  • La psicogénesis
  • La organogénesis, y;
  • La sociogénesis.

Características de las Ramas Etiológicas:

Las mismas se caracterizan de la siguiente manera:

  • La Psicogénesis: Propone el estudio de la causalidad psíquica a partir del análisis de las perturbaciones mentales que no tienen fundamento orgánico.
  • La Organogénesis: Se basa en concepciones que se apoyan en la búsqueda de la etiología orgánica de la enfermedad mental o bien en la detección de lesiones o desequilibrios orgánicos. La influencia de la lesión o del desequilibrio orgánico son causas que se manifiestan como enfermedad mental.
  • La Sociogénesis: Es la tercera orientación etiológica y propone distintas formulaciones acerca de las relaciones adecuadas o no del “hombre con la sociedad”. Para estas corrientes, toda definición de salud o enfermedad está referida a un marco social que constituye al hombre en un momento histórico determinado. La “salud” reside de esta manera en la posibilidad de ajustarse o superar ciertas normas que definen momentáneamente lo normal de lo patológico. Y el resultado de estas acciones eficaces se dará a través de la sociedad que de alguna manera ejerce sobre los individuos a través de sus instituciones, de sus normas y de sus valores, haciendo que ocurran fracasos adaptativos.

9. La psiquiatría nace entre los siglos XVII y XIX. ¿Cómo eran considerados los enfermos mentales antes y después de la creación de esta disciplina?

La psiquiatría nace a mediados del siglo XVII y principios del siglo XIX, y su desarrollo histórico en cuanto a la enfermedad mental consistió de la siguiente manera:

  • En los siglos XVII y XVIII: Se desarrollaron interpretaciones naturistas de la enfermedad mental.
  • Durante el siglo XVII, los trastornos mentales eran considerados como un alejamiento voluntario de la razón, que debía ser corregido mediante el internamiento y las severas medidas disciplinarias correspondientes.
  • Al denominado “enfermo mental” ya no los quemaban en la hoguera, sino que aun su suerte era lamentable durante la era de la Ilustración.
  • Durante este periodo, las personas que presentaban patología o trastornos se las internaba en hospitales, cuales algunos vagaban solitarios, siendo objetos de desprecio, burlas y maltratados.
  • De este modo, durante estos siglos, los enfermos mentales solían estar encerrados y apartados de la vida comunitaria junto a: indigentes, huérfanos, prostitutas, homosexuales, ancianos y enfermos crónicos.
  • En el siglo XIX: Por el contrario, predominaban las explicaciones somáticas de la enfermedad mental.
  • El objeto de estudio de los médicos predominaba en los desórdenes psicológicos, ya que eran considerados como una disfunción cerebral que debía ser objeto de un tratamiento moral, según lo establecido por Pinel.
  • A su vez, en el siglo XIX, Foucault decía que con respecto a los enfermos mentales, se debía proteger a la sociedad de los enfermos mentales, preservándolos en un lugar. A raíz de esto, él fue el primero que dio lugar a la internación en los hospitales públicos de ese entonces.
  • Por otra parte, Pinel lo postuló desde el lado del tratamiento moral y desde el abordaje clínico. Él decía que a los enfermos mentales había que “alienarlos”, o sea, asilarlos, y que el término «alienado» tenía que ver con que una parte de la razón estaba desviada, y que había que volver a colocarla en su lugar.
  • Ya en el siglo XX: A grandes rasgos, se caracterizó por la influencia del psicoanálisis y por la expansión de la clasificación nosológica de las enfermedades mentales.
  • El desarrollo de la neurología, la fisiología y la bioquímica fueron las bases del desarrollo de la psiquiatría organicista.
  • El origen de la psicofarmacología fue otra de las bases de estudio del psicoanálisis y de la psiquiatría.
  • Finalmente, en el siglo XX, las disciplinas tales como la fisiología, la neurología, la psiquiatría organicista y la psicofarmacología fueron concepciones psicosociales de la enfermedad mental.

10. ¿Quién fue Philippe Pinel? Desarrolle en qué consistió el abordaje clínico y el tratamiento moral.

El médico francés Philippe Pinel nació en Jonquières (Tarn), el 20 de abril de 1745. Hijo de un modesto cirujano, ingresó en el internado de los religiosos del Oratorio de Lavaur, donde estudió latín y religión. Recibió órdenes menores y durante un tiempo enseñó teología, pero pronto colgó la sotana para estudiar medicina en Toulouse, donde se doctoró a los 28 años de edad. Prosiguió sus estudios médicos en Montpellier y en 1778 viajó a París con la ilusión y esperanza de hacer carrera. Pero sus inicios fueron bastante más duros de lo que pensaba. En la ciudad del Sena, sobrevivió impartiendo lecciones particulares de matemáticas y redactando y traduciendo circunstancialmente artículos médicos. Su actividad periodística lo llevó a dirigir en 1784 la Gazette de Santé. Dos años después, empezó a tratar a algunos enfermos mentales en el manicomio del doctor Belhomme, reservado a pacientes adinerados. En 1789, participó en la Revolución Francesa, aunque se distanció de toda actividad política durante el periodo del Terror.

En 1793, fue nombrado médico del manicomio de Bicêtre, donde prestó gran atención a las prácticas de Jean-Baptiste Pussin, quien propugnaba el tratamiento moral de los «locos».

Para ello, recurría con fines terapéuticos a la parte de su razón que no estuviese perturbada. Tanto Pussin como Pinel fueron personas caritativas y benévolas con los enfermos, de voluntad enérgica y excelentes observadores.

Pinel decidió humanizar el tratamiento de los alienados, que era como se conocía en aquella época a los «locos». Pidió autorización para suprimir las cadenas que sujetaban a los internos, las sangrías, las purgas y los tratamientos inútiles que solo servían para debilitar a los enfermos.

En principio, esa autorización le fue denegada, aunque la consiguió más tarde, una vez superado el reinado del Terror. Fue entonces cuando introdujo una perspectiva psicológica y comenzó a hacer estudios clínicos objetivos.

Durante la última fase de la Revolución Francesa, fue nombrado profesor adjunto de física médica y de higiene en la nueva Escuela de Salud de París y posteriormente ocupó la cátedra de patología interna. En 1795, fue nombrado médico jefe de la Salpêtrière, cargo que ocupó hasta su muerte. Sus tratamientos constituyeron el primer paso hacia la psicoterapia individual. Pinel demostró que en el paciente alienado persisten trazas de razón que permiten restablecer, en una especie de alianza terapéutica, el diálogo interrumpido por la locura, y se interesó por la reglamentación de la institución hospitalaria psiquiátrica. También demostró la importancia de las relaciones con el ambiente familiar, el medio o los otros enfermos en el desencadenamiento, la persistencia y el agravamiento de la enfermedad mental. Hizo hincapié en la disciplina, la regulación de la vida de los enfermos, su clasificación rigurosa y el aislamiento de los más peligrosos. Insistió en la necesidad de que el médico participase en la administración hospitalaria. Es por ello que con la aparición de Philippe Pinel, médico francés dedicado al estudio de tratamientos mentales, se implementaron los ejercicios físicos como tratamiento para los enfermos, además de trabajos físicos y manuales, rompiendo así cadenas y liberando a los enfermos para que así tuvieran un mayor desarrollo moral y disciplina, cambiando el medio hostil en el que estaban anteriormente. Esto ocurrió en el año 1789 y en 1793 él establece las prácticas a un sistema más humano para el tratamiento de las personas con estas enfermedades. Sus reformas fueron ampliamente reconocidas y seguidas en Europa. Luego en EE. UU. (1840-1860) llegó Benjamin Rush, quien llevó esta idea del no aislamiento de las enfermedades mentales para aplicarlas allá y creó la primera fundación antiesclavitud. Por estas mismas razones, es considerado el padre de la psiquiatría en EE. UU. Las acciones de Pinel entregan las bases de las actividades del desarrollo de la Terapia Ocupacional (TO).

El Tratamiento Moral en Inglaterra (siglos XVIII-XIX):

  • La sociedad tiene la obligación de ayudar a estas personas con demencia mental.
  • Enfoque del tratamiento que haya capacidad de autodeterminación (propia conducta). La terapia ambiental: para restablecer los hábitos de vida.

El tratamiento moral termina a grandes rasgos por la baja de recursos, la crisis económica y la muerte de los fundadores, además del crecimiento demográfico, el darwinismo social (ley del más apto) y el prejuicio contra aquellos que se encuentran en hospitales psiquiátricos.

El Abordaje Clínico de Pinel:

El abordaje consistió en una “psiquiatría clínica”, que viene a ser la caracterización de las distintas especies del género «locura». La “locura” es considerada como un fenómeno homogéneo en el seno del cual se recortan especies, en la que cada una de las especies se reúne de acuerdo con las manifestaciones más salientes.

Clasificación de la «Locura» según Pinel:

Las mismas son clasificadas de la siguiente manera:

  • Estado de excitación: conocidos como manía.
  • Estado de depresión: conocido como lipemanía.
  • Estados delirantes: conocidos como monomanía.
  • Estados estuporosos: conocidos como los cuadros de la estupidez.
  • Estado de incoherencia: conocidos como estados demenciales.
  • Actos impulsivos: están referidos a los cuadros de locura instintiva.

11. ¿A qué permiten llegar los tres planos semiológicos de Henri Ey? Explique los elementos que aportan.

La “semiología” proviene del griego “semeion” (signo) y “logos” (tratado). En la antigüedad se usaba el vocablo “semiótica” para designar la parte de la medicina que se ocupaba de interpretar los signos de las enfermedades y que abarcaba tanto la diagnosis como la prognosis, es decir, que tanto el diagnóstico como el pronóstico entraban en esta disciplina. Un autor que fue uno de los precursores fue Henri Ey, quien se basó en el tratado de la psiquiatría, en la semiología y en la psicopatología de los procesos de la esfera intelectual de Carlos Pereyra.

Henri Ey consideraba que la semiología es la notación precisa de los signos y de los síntomas que componen los cuadros clínicos de las enfermedades mentales; a su vez, los mismos permiten un diagnóstico y su pronóstico. Para Henri, el tratado de la psiquiatría se dedicaba a un estudio de la descripción y al análisis de los síntomas, ya que proponía un análisis que componía tres planos semiológicos:

  • La semiología del comportamiento y de las conductas sociales.
  • La semiología de la actividad psíquica basal y actual.
  • La semiología del sistema permanente de la personalidad.

Descripción de los Planos Semiológicos de Henri Ey:

Los describió de la siguiente manera:

  • La Semiología del Comportamiento y de las Conductas Sociales: Se limitaba a describir la sintomatología que presentaba el paciente sin entrar en la estructura profunda de los trastornos.
  • La Semiología de la Actividad Psíquica Basal y Actual: Realizaba una especie de corte transversal, del aquí y del ahora y de la experiencia morbosa. A su vez, se trata de dar cuenta de la organización de la vida psíquica actual, que corresponde a la vivencia vivida.
  • La Semiología del Sistema Permanente de la Personalidad: Se divide en tres planos y son:
    • Primer plano (Semiología del comportamiento de las conductas sociales): Encontramos la descripción más superficial.
    • Segundo plano (Semiología de la actividad psíquica basal actual): Tenemos un corte transversal de la experiencia vivida en el presente y la posibilidad del análisis de las distintas funciones.
    • Tercer plano (Semiología de la estructura permanente de la personalidad): Se produce una especie de corte longitudinal, que dará cuenta del modo de organización permanente de la personalidad.