Colaboración Esencial: Familia y Escuela en el Desarrollo Educativo Infantil

El Vínculo entre Padres y Educadores: Un Trabajo Conjunto

Los padres, como estimuladores del desarrollo socioafectivo del niño, tienen una responsabilidad tanto con el propio niño como con los educadores en la escuela. Esta colaboración es fundamental para entender los desafíos que pueden surgir a lo largo del desarrollo y, si no se abordan adecuadamente, pueden dificultar un desarrollo óptimo de la personalidad del niño.

Los patrones educativos, para ser efectivos, deben incidir significativamente en la conducta del individuo, provocando determinadas conductas o bien modificándolas para lograr un ajuste más positivo. La labor educativa se fundamenta en una relación personal entre alumnos, padres y profesores. Resulta complejo determinar el equilibrio preciso entre las responsabilidades del profesorado hacia los alumnos y los padres, y sus propios intereses.

Relación entre la Familia y el Equipo Docente

  • El equipo docente debe comprender la importancia de ambos ámbitos (familiar y escolar) para la integración del niño en la sociedad.
  • Los mecanismos de aprendizaje por imitación de modelos e identificación se activan a esta edad. La identificación es un mecanismo inconsciente que se establece con los padres debido al vínculo afectivo. Los padres siempre son fuente de identificación primaria, en el sentido de que lo que ellos representan es lo único que el niño/a conoce inicialmente.
  • La disciplina, otro mecanismo utilizado por los padres, implica generalmente el uso de reforzadores que, teóricamente, determinarán un tipo de conducta en el niño/a.

La labor de la escuela, en contraste con la de la familia, debe distinguirse por su carácter compensatorio e integrador de las diferencias individuales. Esto supone:

  • Respetar la individualidad de cada niño, superando marcos referenciales homogeneizadores. El niño no debe ser comparado ni evaluado en relación al grupo, sino en función de su propio progreso personal.
  • Admitir la diversidad como algo inherente a la escuela.
  • Flexibilidad en el planteamiento de actividades. El profesorado debe partir del conocimiento de cada niño, lo que requiere una metodología global.

Importancia de la Relación entre Padres y Equipo Docente

La idea de comunidad educativa implica un sentido democrático de la educación, en el que todas las personas e instituciones que inciden en la formación del niño deben trabajar conjuntamente, cada una desde su ámbito, en la consecución de unos objetivos propuestos y asumidos por todos. Los resultados dependerán en mayor medida de esta acción conjunta que del protagonismo de cualquiera de ellos en particular.

El equipo docente de un centro debe plantear el trabajo educativo con un esquema abierto a las relaciones con los padres, no solo en los aspectos instructivos, sino también en los educativos. Todo quehacer educativo de la institución escolar puede resultar enriquecido como consecuencia de la colaboración entre padres y profesores.

Podemos establecer varios apartados en los que contemplar un tipo de relación participativa entre la escuela y la familia:

  • Comunicaciones informativas.
  • Participación en la gestión educativa.
  • Colaboración formativa.

En el caso de la Educación Infantil, la necesidad de la participación y colaboración en el desarrollo educativo de los alumnos cobra una especial importancia.

La Escuela como Agente Socializador

La escuela es el segundo gran ámbito de socialización. Es uno de los primeros lugares donde el alumno interactúa con personas ajenas a su ámbito familiar. El primer acceso a la escuela permite al alumnado descubrir y conocer relaciones sociales y espacios físicos distintos a su entorno familiar.

La escuela es un espacio fundamental para trabajar aspectos relacionados con la educación en valores y el comportamiento social. El colegio se convierte en uno de los principales espacios para la enseñanza de normas y comportamientos. Esto se evidencia en acciones cotidianas como saludar al entrar o salir del aula, cumplir las normas de intervención en la asamblea, o seguir las indicaciones durante el aseo, la recogida de material, la salida o el recreo.

Asimismo, es un lugar donde el alumnado puede tomar contacto con diversos aspectos del entorno; por ejemplo, el propio patio del colegio puede ser utilizado con este fin. Se considera que, tanto en el contexto familiar como en el escolar, los niños asumen roles, establecen interacciones y participan en patrones de conducta cada vez más complejos.