Trastornos del Neurodesarrollo: Síntomas, Diagnóstico y Abordajes Terapéuticos
Discapacidad Intelectual (Anteriormente Retraso Mental)
La discapacidad intelectual se define como una condición caracterizada por un funcionamiento intelectual significativamente por debajo del promedio (un coeficiente intelectual [CI] inferior a 70). Se diagnostica en la infancia temprana y afecta aproximadamente del 1 al 3% de la población.
Las personas con discapacidad intelectual obtienen puntuaciones bajas en las pruebas de inteligencia (CI), pero los efectos en el funcionamiento de la vida diaria varían según la gravedad y los deterioros asociados. Los niños con discapacidad intelectual leve (aproximadamente el 85% de los casos) suelen aprender a hablar y a ser independientes en el autocuidado, aunque su ritmo de desarrollo es más lento de lo normal.
Signos y Síntomas de la Discapacidad Intelectual
- Comportamiento inmaduro o infantil persistente.
- Disminución de la capacidad de aprendizaje.
- Dificultad para alcanzar los hitos del desarrollo intelectual.
- Dificultad para satisfacer las exigencias educativas escolares.
- Falta de curiosidad.
- Incapacidad de respuesta.
Abordaje en el Ámbito Familiar
- Fomentar la motivación personal.
- Ofrecer oportunidades de desarrollo.
- Mantener un compromiso constante.
- Asignar tareas sencillas y adecuadas a su nivel.
Es fundamental recordar que la educación es un factor clave para el progreso y el fortalecimiento de los niños con discapacidad intelectual.
Abordaje en el Ámbito Educativo (Aula)
- Diseñar actividades atractivas y significativas que promuevan su desarrollo y experiencia.
- Utilizar material visual en las paredes que refuerce las competencias adquiridas.
- Respetar el ritmo de desarrollo individual de cada estudiante, partiendo de sus propias experiencias.
- Trabajar en pequeños grupos para fomentar la relación y el apoyo entre los alumnos.
- Dar instrucciones claras y sencillas.
- Dividir las tareas en pasos consecutivos y presentarlas visualmente.
Terapias Complementarias
Musicoterapia
La musicoterapia es la utilización de expresiones sonoras y musicales, empleando los elementos de la música (timbre, ritmo, melodía y armonía) en un proceso terapéutico. Su objetivo es restablecer, mejorar y mantener estados de salud física, emocional, mental y espiritual.
- Fomentar expresiones orales y táctiles que faciliten la lectura.
- Utilizar dramatizaciones, cuentos y estrategias sencillas y claras.
- Aplicar diferentes niveles de ayuda según la necesidad.
- Asignar tareas sencillas y recompensarlas con refuerzos positivos (ej. economía de fichas).
- Presentar material concreto y manipulable.
Pronóstico de la Discapacidad Intelectual
- Detección precoz de la discapacidad intelectual para un abordaje temprano de las funciones intelectuales, complementado con otras herramientas médicas.
- Abordaje psicoterapéutico adecuado para los trastornos emocionales y de conducta.
- Refuerzo de la autoimagen del niño con discapacidad intelectual y abordaje integral de su personalidad.
Asesoramiento médico, psicológico y pedagógico a los padres sobre las fortalezas y áreas de mejora del paciente.
Tratamiento de la Discapacidad Intelectual
El tratamiento es multidisciplinario e incluye enfoques médicos, terapéuticos, pedagógicos, fonoaudiológicos, psicomotrices, kinesiológicos y de terapia ocupacional. La falta de seguimiento de estos tratamientos puede llevar a complicaciones médicas como convulsiones, infecciones respiratorias, trastornos de deglución y un aumento en la incidencia de cardiopatías.
Trastorno del Espectro Autista (TEA)
El Trastorno del Espectro Autista (TEA) se define como un conjunto de trastornos complejos del neurodesarrollo, caracterizado por dificultades persistentes en la interacción social y la comunicación, así como por patrones de conducta, intereses o actividades restringidos y repetitivos.
Síntomas del Trastorno del Espectro Autista
Dificultades en la Interacción Social
- Falta de empatía: Los individuos con TEA pueden tener dificultades para interpretar las emociones y pensamientos de los demás, así como para comprender las pautas sociales, como el tono de voz o las expresiones faciales.
Dificultades en la Comunicación (verbal y no verbal)
- Algunos individuos no desarrollan lenguaje verbal o tienen dificultades para comunicarse con expresiones o gestos. Otros pueden hablar, pero la forma y el contenido de su discurso pueden ser inadecuados, con tendencia a repetir palabras o frases (ecolalia) o a ignorar a su interlocutor.
Comportamientos Estereotipados y Repetitivos
- Pueden manifestar movimientos repetitivos como mecerse, dar vueltas de forma compulsiva, entre otros.
Dificultad en el Autoreconocimiento
- En ocasiones, se refieren a sí mismos en tercera persona o por su nombre propio, en lugar de usar «yo» o «mí».
Diagnóstico del Trastorno del Espectro Autista
El diagnóstico del Trastorno del Espectro Autista (TEA) implica diversas pruebas cognitivas y de lenguaje, junto con una evaluación neurológica detallada. El objetivo es no solo diagnosticar el TEA, sino también descartar otras patologías como trastornos de audición o esquizofrenia. Aunque las personas con esquizofrenia pueden mostrar conductas similares al autismo, sus síntomas suelen manifestarse en la adolescencia tardía o la edad adulta, e incluyen alteraciones de percepción como alucinaciones y delirios, que no son características del TEA.
Tratamiento del Trastorno del Espectro Autista (TEA)
- Intervenciones Conductuales y Educativas: Se aplican tanto al individuo con TEA como a su entorno familiar. Estas terapias, a menudo intensivas y estructuradas (como el Análisis Conductual Aplicado – ABA), buscan desarrollar habilidades sociales y del lenguaje. También se brinda apoyo a los familiares (padres, hermanos, educadores) para facilitar la convivencia y la interacción con la persona con TEA.
- Intervenciones Emocionales y Psíquicas: Su objetivo es el desarrollo de habilidades emocionales, como la expresión y el reconocimiento de sentimientos, y el fomento de la empatía. Al igual que las intervenciones conductuales, estas terapias involucran al círculo social cercano, trabajando la expresión de sus propios sentimientos, frustraciones e impresiones hacia el individuo con TEA.
- Medicamentos: No existen medicamentos específicos para tratar el TEA directamente. El tratamiento farmacológico es paliativo y se enfoca en la sintomatología asociada. Por ejemplo, se prescriben anticonvulsivos para las convulsiones, y medicamentos para la impulsividad o hiperactividad (similares a los usados en el TDAH). Los fármacos más comunes incluyen ansiolíticos, antidepresivos y aquellos para el trastorno obsesivo-compulsivo.
Síndrome de Asperger
El Síndrome de Asperger (SA) es un trastorno del neurodesarrollo que se caracteriza por alteraciones cualitativas en la interacción social y la comunicación, junto con patrones de intereses y conductas restringidos y estereotipados. Afecta a personas con capacidades cognitivas y lingüísticas generalmente conservadas (sin discapacidad intelectual ni retraso grave del lenguaje).
Síntomas del Síndrome de Asperger
- Interacciones sociales mínimas o inadecuadas.
- Conversaciones centradas en sus propios intereses.
- Lenguaje repetitivo o formal.
- Dificultad con el «sentido común» o las normas sociales implícitas.
- Obsesión por temas específicos o complejos.
- Comportamientos y gestos peculiares.
- Posible presencia de movimientos extraños o tics nerviosos.
- Dificultades en las habilidades motoras (ej. aprender a andar en bicicleta).
Tratamiento del Síndrome de Asperger
No existe un tratamiento único o «típico» para el Síndrome de Asperger. Sin embargo, diversas intervenciones pueden ser beneficiosas:
- Información y entrenamiento para los padres.
- Intervenciones educativas especializadas adaptadas al niño.
- Entrenamiento en habilidades sociales.
- Terapia del lenguaje y la comunicación.
- Entrenamiento en integración sensorial.
- Psicoterapia o terapia cognitivo-conductual (TCC) para niños mayores y adolescentes.
Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH)
El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) es una disfunción de origen neurobiológico que implica una inmadurez en los sistemas que regulan el movimiento, la impulsividad y la atención. Para su diagnóstico, los síntomas deben manifestarse antes de los 12 años; no se diagnostica TDAH de inicio en la edad adulta.
Síntomas relacionados con la inatención
- Dificultad para prestar atención a los detalles y cometer errores por descuido.
- Dificultad para mantener la atención en tareas o actividades lúdicas.
- Parece no escuchar cuando se le habla directamente.
- No sigue instrucciones ni termina tareas escolares o encargos.
- Dificultad para organizar tareas y actividades.
- Evita o le disgusta participar en tareas que requieren un esfuerzo mental sostenido.
- Pierde objetos necesarios para tareas o actividades.
- Se distrae fácilmente por estímulos externos.
- Es olvidadizo en las actividades cotidianas.
Síntomas relacionados con la hiperactividad e impulsividad
- Inquietud, se mueve o retuerce en su asiento.
- Se levanta en situaciones en las que se espera que permanezca sentado.
- Corre o salta en situaciones inapropiadas (en adolescentes o adultos, puede manifestarse como sensación de inquietud).
- Dificultad para jugar o dedicarse a actividades de ocio tranquilamente.
- A menudo está «en marcha» o actúa como si tuviera un motor.
- Habla excesivamente (verborrea).
- Responde precipitadamente antes de que se le termine de formular la pregunta.
- Dificultad para esperar su turno.
- Interrumpe o se inmiscuye en las conversaciones o juegos de otros.
Tratamientos del TDAH
El tratamiento principal y más efectivo para el TDAH, con décadas de evidencia, es la terapia farmacológica. Esta ayuda a corregir la disfunción cerebral durante el período de su efecto.
Trastornos del Aprendizaje
Los Trastornos del Aprendizaje son dificultades neurobiológicas que afectan la capacidad de un niño para recibir, procesar, analizar o almacenar información. Esto puede manifestarse en problemas para leer, escribir, deletrear o resolver problemas matemáticos.
Las dificultades de aprendizaje son un término genérico que engloba un conjunto heterogéneo de trastornos. Se caracterizan por incapacidades persistentes, inesperadas y específicas para adquirir y ejecutar de forma eficiente determinadas habilidades académicas y sociales (como lectura, escritura, cálculo, dibujo o relaciones interpersonales).
Se definen como un desorden en uno o más de los procesos psicológicos básicos involucrados en la comprensión o el uso del lenguaje, hablado o escrito. Esto puede manifestarse en una habilidad imperfecta para escuchar, pensar, hablar, leer, escribir, deletrear o realizar cálculos matemáticos.
Problemas Específicos del Lenguaje
Disfasia
- Trastorno en la adquisición del lenguaje que afecta la comprensión y la expresión. Es una condición duradera, persistente y resistente a la intervención.
- El tratamiento se enfoca en el desarrollo del discurso y el vocabulario.
Disprosodia
- Trastorno que afecta el ritmo, la fluidez, la melodía y la entonación del habla (prosodia).
- Se trata con terapia del lenguaje; se recomienda no utilizar críticas y hablar despacio.